El élder Cook insta a los miembros a escoger caminos de rectitud

LOGAN, UTAH

Poner a la familia, a la Iglesia y al Salvador en primer lugar es esencial para escoger un camino que conduce a la rectitud, enseñó el élder Quentin L. Cook, del Quórum de los Doce Apóstoles, durante un devocional en Logan, Utah, el 25 de enero.

“Las decisiones más importantes las pueden tomar todos, independientemente de sus talentos, habilidades, oportunidades o circunstancias económicas”, dijo él.

A veces las personas enfrentarán las dificultades de la vida, pasando por eventos en los que tienen poco o ningún control, pero sí tendrán control sobre los asuntos de una vida recta, enseñó el élder Cook.

“En lo que respecta a los principios, el comportamiento, la observancia religiosa y la vida recta, nosotros tenemos el control”, dijo él. “Nuestra fe en Dios el Padre y en Su Hijo Jesucristo y la forma en que los adoramos son decisiones que tomamos nosotros”.

El élder Cook reconoció que muchos de los desafíos de la fe que existían cuando él era pequeño, siguen siendo los mismos en la actualidad.

“Ha habido y siempre habrá oposición en todas las cosas. Quienes oran, estudian las Escrituras, viven los mandamientos y adoran y siguen al Salvador verán esta oposición con una perspectiva precisa. Su fe aumentará y bendecirá su vida”, dijo.

El élder Cook se centra en la frase “Sus sendas son justas”, la cual se encuentra en 2 Nefi 9. En ese capítulo hay amonestaciones acerca del aprendizaje, la sabiduría, la riqueza, el trabajar, el negarse a ver o escuchar las consecuencias del pecado y la profunda doctrina acerca de la expiación de Jesucristo.

“Mi énfasis está en los caminos de rectitud que nos permiten dar un informe al Santo de Israel, ‘el guardián de la puerta’”, dijo él.

El élder Cook compartió cómo los momentos trascendentales en su vida le han ayudado a formar su fe y la manera en que ha vivido.

Cuando él tenía 15 años de edad y su hermano mayor, Joseph, tenía 20, la experiencia de su hermano sobre decidir servir en una misión, a pesar de los deseos de su padre de que se quedara en casa e hiciera planes de ir a la Facultad de Medicina, tuvo un gran impacto en la vida de su hermano menor.

“Esa noche mi hermano y yo hablamos acerca de la decisión”, recordó el élder Cook. “Razonando, llegamos a esta conclusión: Si Jesucristo había sido un gran hombre, pero no divino; si José Smith había sido un gran maestro, pero no un profeta; o, si el Libro de Mormón tenía consejos grandiosos, pero no era la Palabra de Dios, entonces papá tenía razón y sería mejor ir a la escuela de medicina. Pero, si Jesucristo es divino, el Hijo de Dios; si José Smith es el profeta de la restauración; y, si el Libro de Mormón es la Palabra de Dios, entonces sería más importante aceptar el llamamiento de proclamar el Evangelio”.

Mientras deseaba su propia respuesta a esas preguntas, aquella noche el élder Cook oró y recibió una confirmación del Espíritu de que esas cosas son verdaderas.

“Tuve lo que he llegado a comprender como la sensación que el Espíritu Santo me da cuando estoy buscando las verdades espirituales”.

Esas respuestas han guiado sus decisiones más importantes, dijo el élder Cook, añadió que cuando las personas viven el Evangelio, ellas son bendecidas por el Espíritu para probar de la bondad de nuestro Padre Celestial con sentimientos de gozo, felicidad y paz.

“Yo sugeriría que el mejor método para obtener un testimonio es sumergirse en el Libro de Mormón para que puedan experimentar el testimonio constante del Espíritu”, dijo.

El conocimiento y testimonio de la función profética que José Smith desempeñó en la restauración afecta también la vida de una persona.

El élder Cook compartió dos principios importantes que aprendió como misionero, además de amor y aprecio por el Libro de Mormón.

En primer lugar, el sendero que uno escoge es importante, y segundo, el esfuerzo constante día a día es mejor que el esfuerzo heroico ocasional.

“No son sólo los senderos que conducen al mal los que debemos evitar”, dijo el élder Cook. “En 2 Nefi 9:51 se nos instruye, ‘… no gastéis dinero en lo que no tiene valor, ni vuestro trabajo en lo que no puede satisfacer’. En otras palabras, escojan senderos que los llevarán a la rectitud”.

“No todas las decisiones que enfrentarán serán entre el bien y el mal”, dijo él. “Muchas deben abordarse mediante el consejo que el élder Dallin H. Oaks dio en su sermón inspirado en ‘Bueno, Mejor y Excelente’. Aun la diferencia entre lo bueno y lo mejor puede ser profunda”.

Las metas relacionadas con una formación académica y el empleo son importantes, pero no deben estar por encima de la familia, la Iglesia y un testimonio del Salvador, enseñó el élder Cook. “Las consecuencias imprevistas pueden resultar sumamente desfavorables”.

“La reunión más importante que cada uno de nosotros tendrá del otro lado del velo es con el Salvador. Independientemente de quienes sean nuestros antepasados, seamos ricos o pobres, daremos un informe del cumplimiento de los mandamientos que se nos ha dado. Debemos vivir de tal forma que deseemos conocer al Salvador”.