Cinco formas de guardar el día de reposo como familia

Por E. Jeffrey Hill, colaborador de Church News en ChurchofJesusChrist.org

  • 22 Julio 2015

Las familias que hallen sus propias maneras de guardar el día de reposo con éxito cosecharán bendiciones tales como relaciones familiares más fuertes, una comunicación más bondadosa, fortaleza espiritual y más diversión.

Puntos destacados del artículo

  • 1. Adoren juntos como familia.
  • 2. Hagan que el día de reposo sea diferente a los demás días.
  • 3. Fortalezcan las relaciones familiares.
  • 4. Planeen para alcanzar la felicidad familiar.
  • 5. Presten servicio a los demás.

Como miembros de la Iglesia de Jesucristo, es fácil generar una lista de cosas que podemos hacer para santificar el día de reposo. Se requiere más creatividad al pensar en qué puede hacer una familia con niños de diferentes edades para que el domingo sea un día especial y espiritual. La mayoría de las familias intentan y fallan, y vuelven a intentarlo. Es difícil, pero las familias que siguen adelante hasta que encuentran sus propias maneras de guardar el día de reposo con éxito cosecharán bendiciones tales como relaciones familiares más fuertes, una comunicación más bondadosa, fortaleza espiritual y más diversión.

A continuación presentamos cinco principios, con muchas aplicaciones prácticas, que podrían ayudar a las familias a santificar el domingo en sus hogares.

1. Adoren juntos como familia.

Además de asistir a las reuniones de la Iglesia juntos, hay muchas maneras en que una familia puede hacer del día de reposo un día de adoración.

Acostarse temprano el sábado por la noche. Una familia puede adorar mejor durante el domingo si sus miembros descansan lo suficiente la noche anterior. Que para los niños pequeños sea una prioridad ir a la cama temprano y alienten a los adolescentes a regresar a casa a una hora razonable el sábado por la noche.

Oren y lean juntos. Simplemente porque el día de reposo es diferente, no salgan de la rutina semanal de la oración familiar y la lectura de las Escrituras. Lean las Escrituras a un ritmo en que los miembros de la familia disfruten. El estudio de las Escrituras puede ayudar a los niños a leer a una edad muy temprana. Si les enseñan a reconocer la frase “y aconteció que”, pueden participar a menudo cuando la familia lee el Libro de Mormón.



Den bendiciones del sacerdocio. El día de reposo es un día excelente para volver el corazón de los padres hacia los hijos y viceversa por medio de las bendiciones de padre. Los padres también pueden compartir sus bendiciones patriarcales con sus hijos y hablar acerca de la guía que se encuentra en ella.

Ayunen como familia. Antes de un domingo de ayuno, la familia puede comer una comida juntos por la tarde o la noche del sábado y analizar propósitos comunes para el ayuno próximo. Luego podrían recordarse uno al otro esos propósitos durante el ayuno. Los padres pueden alentar a los niños a ayunar al grado apropiado para su edad. (Los niños más pequeños podrían ayunar por una sola comida). Terminen el ayuno al orar como familia acerca del propósito del ayuno. Pregunten a los niños sobre su experiencia en el ayuno y sobre cualquier inspiración que hayan recibido.

Proclamen el Evangelio. Decidan juntos llegar a ser amigos de una familia de otra religión en el vecindario y planeen una actividad con ellos. Si es el momento apropiado, inviten a esa familia a asistir a la capilla con la de ustedes. También pueden pedir a cada miembro de la familia que escriba su testimonio en ejemplares del Libro de Mormón para entregarlos a conocidos y amigos. O podrían ofrecer a otras familias una de las “tarjetas de obsequio” de la Iglesia

Rediman a los muertos. El domingo es un buen día para centrarse en la historia familiar. Ayuden a los niños a aprender su historia familiar al leer y contarles relatos sobre sus antepasados. Recopilen historias de conversión de la familia. En un mapa grande coloquen tachuelas y etiquetas para indicar donde nacieron, se casaron y fallecieron los antepasados. O hagan una cena con la comida del país de un antepasado en particular. Al aprender juntos acerca de sus antepasados, creen un cuadro genealógico de cuatro generaciones con cada hijo.



No se tomen vacaciones del día de reposo. Cuando estén lejos en unas vacaciones familiares, hagan el esfuerzo de asearse, arreglarse y vestirse apropiadamente para ir a las reuniones dominicales adonde sea que estén. Si no hay reuniones disponibles donde estén de vacaciones, obtengan permiso para tener su propio servicio sacramental familiar.

2. Hagan que el día de reposo sea diferente a los demás días.

Como día de adoración, el domingo se debe sentir diferente a los otros días de la semana. Al controlar cuidadosamente el ambiente del hogar, las familias pueden ayudar a crear y mantener la reverencia durante el día.

El domingo deben verse diferente. El uso de ropa bonita todo el día puede ayudarnos a guardar el día de reposo. Las niñas pueden usar vestidos y los niños una buena camisa y pantalones. Lo que se use como vestimenta no es tan importante como que la ropa refleje el espíritu que la familia quiere para el día de reposo. Estas pueden ser o no la ropa que se usan para ir a la iglesia, pero debería ser más agradable que la ropa de todos los días. Incluso la preparación de la comida y la posterior limpieza tiene un aspecto más de “domingo” cuando la familia usa ropa bonita y delantales de cocina.

El domingo debe sonar diferente. Las familias pueden seleccionar con cuidado la música que escuchan los domingos. La música apropiada puede establecer un tono de reverencia hacia el hogar. Las familias pueden evitar poner la música de todos los días en este día santo. Existen muchos CDs tranquilos con temas musicales religiosos. Las familias también pueden cantar himnos, canciones de la Primaria, canciones familiares y otra música inspiradora.



El domingo se debe sentir diferente. Los niños pequeños necesitan jugar. Nunca se sentarán todo el día en silencio en el sofá. Como padres, pueden ayudarles a seleccionar las actividades que estén en armonía con el ambiente que desean establecer para el día de reposo. Aparten para el domingo los juguetes tranquilos con los cuales no juegan los otros días. Jueguen a las versiones de domingo del juego de mímicas, donde los miembros de la familia actúan relatos de las Escrituras. Armen un rompecabezas de tema religioso juntos como familia. O disfruten de un juego de preguntas y respuestas del Libro de Mormón. Las posibilidades son infinitas.

El domingo quizá no sea el mejor día para que los niños jueguen con amigos. Puede ser un mejor día para que los niños jueguen con sus padres y hermanos; y por último, para dar al día de reposo una sensación más sagrada, la familia puede elegir no ver la televisión, reproducir videos ni jugar juegos de computadora; si hay un programa de televisión que a su familia realmente le gustaría ver, pueden grabarlo en video y mirarlo en una noche entre semana.

El domingo debe tener un sabor diferente. “La cena del domingo” es una tradición que une a las familias con una comida deliciosa y palabras agradables. Con demasiada frecuencia esta actividad debilita la experiencia del día de reposo de la persona responsable de la comida (a menudo, la mamá). Sin embargo, si todos los miembros de la familia ayudan con la preparación de la comida y la limpieza, esta tradición puede fomentar el espíritu del día de reposo. Coman a un ritmo pausado y alimenten el alma con la conversación y acción de gracias, no solamente al vientre con alimentos.

3. Fortalezcan las relaciones familiares.

Debido a que los miembros de la familia pasan tiempo juntos el domingo, es un buen momento para que lleguen a conocerse mejor mutuamente y fortalezcan su relación.

Celebren el matrimonio. Como familia, lean viejas cartas de amor escritas durante su noviazgo y en los primeros años de matrimonio. Busquen en los diarios, álbumes de fotos y cintas de video cuando ustedes salían en citas y estaban recién casados. Es bueno que los niños vean que sus padres experimentaron el joven amor romántico. A veces lo mejor que un matrimonio puede hacer para fortalecer la relación el día de reposo es tomar una siesta relajante juntos.

Creen una historia familiar compartida. Escriban una historia familiar con extractos del noviazgo de los padres hasta el día de hoy. Para encontrar información de esa historia, miren juntos álbumes de recuerdos familiares, álbumes de fotos y videos caseros. Pueden pedir que los miembros de la familia lleven su diario personal y compartan las anotaciones significativas. O pidan a cada miembro de la familia que responda la pregunta “¿Cuál es un momento en el que nuestra familia era muy unida?”.

Lean y caminen juntos. Salgan de la casa a caminar por la tarde del domingo plácidamente en familia y aprecien la belleza de la mano de Dios al aire libre juntos. Permitan que los niños hablen de cualquier cosa que deseen. Enfóquense en escuchar más que en hablar. Leer juntos como familia también ayuda a edificar fuertes relaciones familiares. Sus familias podrían leer en voz alta las revistas de la Iglesia, un clásico inspirador, una biografía o un libro religioso.



Manténganse en contacto. Los domingos también son un buen momento para que las familias establezcan conexiones con los miembros de la familia o con familiares cercanos que están lejos de casa. Junten a la familia alrededor de un teléfono con altavoz y llamen a abuelos, tíos, tías, primos, nietos y parientes cercanos en la universidad, en un viaje de negocios o que se encuentren lejos de casa por alguna razón. Podrían escribir una carta familiar o enviar un paquete que contenga elementos que proporcionen consuelo y cuidado a un miembro de la familia que esté en una misión o en el servicio militar.

4. Planeen para alcanzar la felicidad familiar.

El domingo es un buen día para que las familias miren hacia el futuro al establecer metas y coordinar horarios.

Fijen metas familiares y para el matrimonio. Los matrimonios y las familias pueden planear para el futuro al establecer metas para la próxima semana, mes o año (o década o siglo). Podrían imaginar su matrimonio y su familia dentro de 15 años a partir de hoy y escribir un diario detallado de lo que ocurrirá en la familia en el año 2030. También puede ser entretenido hacer una lista de 100 cosas que la familia desee hacer en los próximos 25 o 50 años. Es asombroso cuántas cosas harán si las escriben.

Lleven a cabo consejos familiares. Lleven a cabo una reunión de planificación familiar cada semana, donde todos los miembros de la familia puedan abordar sus necesidades y deseos. Fijen metas familiares relacionadas con la obra del templo, la obra misional y el perfeccionamiento de los santos. Este también es un buen momento para revisar el calendario familiar y organizar la semana. También pueden decidir sentarse en forma individual con uno de los niños para ayudarle a fijar metas personales.

5. Presten servicio a los demás.

El domingo es un gran día para servir a los demás como familia. Al abrir su hogar y buscar oportunidades en su comunidad, pueden encontrar muchas maneras de experimentar el gozo del servicio en este día.

Lleven a cabo servicio en familia. Podrían invitar a otra familia para la cena y el postre del domingo. O podrían hacer un refrigerio juntos y entregarlo como familia a amigos o vecinos nuevos. También hay muchas oportunidades de servicio apropiadas para el domingo más allá de su vecindario inmediato. Vayan a una residencia de ancianos y presenten una charla fogonera familiar o un programa musical o solamente charlen con los residentes. Visiten amigos, familiares o miembros del barrio que están en el hospital, o pónganse en contacto con un comedor comunitario o un refugio para personas sin hogar y presten servicio, como ir a servir una comida.



Como lo ilustra esta compilación de ideas y prácticas, hay tantas formas de guardar con éxito el día de reposo como familias. No es fácil, pero mediante la perseverancia, las familias pueden descubrir las prácticas que son tanto divertidas como significativas para todos los miembros de la familia; y santificar el día de reposo como familia no solamente invitará al Espíritu, sino que además mejorará la comunicación entre los familiares, aumentará el amor y la bondad dentro del matrimonio y fortalecerá a todas las relaciones familiares. Vale la pena el esfuerzo.


E. Jeffrey Hill es profesor adjunto de matrimonio, familia y vida humana. Este artículo es una adaptación de la composición del autor “Ideas for Keeping the Sabbath Holy as a Family”, en David C. Dollahite, editor, Strengthening Our Families: An In-Depth Look at the Proclamation on the Family, 2001, págs. 304–307.