Amen a los niños y amen al Señor; enseñaron las hermanas líderes de la Primaria

Por Por Rachel Sterzer, redactora de Church News

  • 16 Abril 2013

La hermana Rosemary M. Wixom, presidenta general de la Primaria, les enseñó a las líderes de la Primaria que deben centrar todo lo que hacen en la Primaria en el Salvador y en el plan del Padre Celestial.

Puntos destacados del artículo

  • La capacitación de líderes de la Primaria tuvo lugar el 4 de abril de 2013, en el Salón de Asambleas de la Manzana del Templo.
  • Las líderes deben centrarse en el Salvador y en estar espiritualmente preparadas.
  • Enseñar a los niños con discapacidades no es un problema, sino una oportunidad.

“La esencia de la Primaria se halla al centrarse en el Salvador Jesucristo”. —Hermana Rosemary M. Wixom, presidenta general de la Primaria

“Hay un millón de modos diferentes de enseñar y dirigir en la Primaria”, dijo la hermana Rosemary M. Wixom, presidenta general de la Primaria, a las líderes de Primaria de barrio y estaca que se reunieron en el Salón de Asambleas el jueves 4 de abril. “Me encantaría sentarme con cada una de ustedes… y aprender lo que han aprendido y agradecerles cada hora de preparación que dedican a su llamamiento”.

A la hermana Wixom se le unieron sus consejeras, la hermana Jean A. Stevens y la hermana Cheryl A. Esplin para las reuniones de capacitación de las organizaciones auxiliares de la Primaria; también las acompañaron la mesa general de la Primaria para analizar el tema de este año: “Soy un hijo de Dios”.

Hablando sobre el llamamiento de prestar servicio en la Primaria, la hermana Wixom dijo que sólo hay dos requisitos: amar a los niños y amar al Señor.

La hermana Wixom desafió a las líderes de la Primaria a aprovechar la oportunidad de centrarse en un niño durante el siguiente tiempo para compartir. “Vislumbren el rostro de ese niño. Vean la luz de sus ojos. Imagínense lo que está sintiendo y qué pueden decir o hacer ustedes para aumentar la fe de ese niño y animarlo a permanecer en el camino de regreso a su Padre Celestial”.

Citando el Manual 2, la hermana Wixom dijo: “En la Primaria tenemos un objetivo… ‘Todas las organizaciones auxiliares existen para ayudar a los miembros de la Iglesia a crecer en su testimonio del Padre Celestial, de Jesucristo y del Evangelio restaurado…’ La Primaria es donde las almas de los niños se anclan en Cristo”.

La hermana Wixom compartió la promesa y la responsabilidad relacionadas con Doctrina y Convenios 68:6. “La promesa: ‘Sed de buen ánimo, pues, y no temáis, porque yo, el Señor, estoy con vosotros y os ampararé’. La responsabilidad: ‘Sed de buen ánimo, pues, y no temáis, porque yo, el Señor, estoy con vosotros y os ampararé; y testificaréis de mí, sí, Jesucristo, que soy el Hijo del Dios viviente; que fui, que soy y que he de venir’”.

“Testificamos de Jesucristo cuando centramos todo lo que hacemos en la Primaria en nuestro Salvador y en el plan del Padre Celestial”, explicó.

Hablando sobre la diferencia que puede significar en la Primaria el centrarse en el Salvador, la hermana Wixom habló acerca de cosas que las líderes de la Primaria ya saben. “Ustedes saben que [los niños] aprenden uno por uno. Saben que les están enseñando a los niños y no sólo dando lecciones… Ustedes saben cuán valioso es hablar sobre el Salvador”.

La preparación espiritual, como la oración personal y el estudio de las Escrituras, contribuyen al espíritu de la Primaria, dijo la hermana Wixom. Los maestros que se centran en el Salvador Jesucristo están más comprometidos con su llamamiento.

La hermana Wixom también habló sobre la influencia que el centrarse en Jesucristo puede tener en la reverencia en la Primaria. “Ustedes saben que la reverencia proviene del interior de cada persona. [La reverencia] es una expresión de amor y respeto. Viene por medio de su ejemplo y preparación”.

La hermana Wixom instó a los líderes a incluir a los niños en la creación de expectativas y límites, pero advirtió: “Recuerden que las reglas se refieren a la situación y no a la esencia de la Primaria. En otras palabras, eviten que el tema de la reverencia determine todo lo que hacen en la Primaria. La esencia de la Primaria aparece al centrarse en el Salvador Jesucristo”.

La hermana Stevens, primera consejera de la presidencia general de la Primaria, presentó a James Hamilton, de 11 años, quien preparó más de 200 nombres de familiares para el templo.

“Es un dulce recordatorio de que las bendiciones del Señor no son sólo para unos pocos selectos”, dijo. “Él las ofrece a todos y desea que cada uno de Sus hijos e hijas vayan al templo y reciban las bendiciones y los convenios que se pueden hacer allí”.

La hermana Stevens animó a las líderes a pensar en cómo pueden ayudar a los niños a quienes aman y prestan servicio para que compartan el mensaje con sus familias. “Al hacerlo, nos sentiremos más cerca al Salvador”.

Al hablar de cómo mejorar el servicio que prestan a los niños con discapacidades, la hermana Esplin, segunda consejera de la presidencia general de Primaria, citó a una líder de la Primaria que dijo: “Tener un hijo con una discapacidad no es un problema que se deba resolver, sino una oportunidad para toda la Primaria. El Señor está al tanto de esos niños. Él nos los da a nosotros para un cumplir con un propósito”.

Teniendo en cuenta la participación de la audiencia, la hermana Esplin compartió varias cosas que las líderes de la Primaria pueden hacer para amar y ayudar a participar a niños con discapacidades en la Primaria, incluso el considerar las necesidades específicas de ese niño, recurrir a la ayuda de los padres y la información que ellos puedan proporcionar, incluir a otros niños y orar para pedir inspiración.

“Nunca seremos todos capaces de comprender todo acerca de cada discapacidad”, dijo la hermana Esplin. “Y está bien así. Si nuestro corazón está lleno de amor y nos ponemos de rodillas, el Señor nos enseñará al pedir Su consejo y al deliberar en consejo con los padres”.