Los jóvenes de Brasil van conectando la obra del templo con la historia familiar

Por Por Melissa Merrill, Noticias y Eventos de la Iglesia

  • 17 Mayo 2012

 Durante los viajes al templo, los jóvenes en el distrito del templo de Campinas, Brasil participan en el trabajo de indexación de familysearch entre sesiones en el bautisterio. En la foto, de izquierda a derecha, están Cándido Murillo, Matías Candido Santana, Isabela Andrade Gonçalves, Ana Paula Antunes de Jesús, Virginia Godinho Chagas, Liv Versiani Nery, y Larissa Gonçalves de Mello e Souza.

Puntos destacados del artículo

  • El director del centro de historia familiar adyacente al Templo de Campinas Brasil comenzó a invitar a los jóvenes que estaban visitando a participar en el trabajo de indexación, cuando no estuvieran en el templo.
  • Como resultado, los jóvenes indexaron miles de nombres en el centro y aún más al regresar a casa.

"antes de que el énfasis en conseguir [que los jóvenes] participaran en la historia familiar y la indexación, el viaje al templo principalmente era para bautizarse por los muertos. Ahora las experiencias de indexación se están convirtiendo en parte de su trabajo." -George A. Oakes, presidente del Templo de Campinas Brazil

José A. Moscão estaba notando una tendencia: los jóvenes que venían al templo de Campinas Brasil tenían una gran cantidad de “tiempo muerto”.

El hermano Moscão, director del centro de historia familiar situado junto al Templo de Campinas, sabía que debido a la distancia muchos jóvenes tenían que viajar para llegar al templo, la mayoría llegaba en caravanas y se quedaban durante varios días. El tiempo entre sus sesiones en el baptisterio, comidas y espera por sus padres y lideres que participaban en otras ordenanzas del templo no podía se obviado.

Pero tal vez, pensaba, o más bien, sentía-que podría ofrecer a los jóvenes un alternativa a vagar por las inmediaciones del templo cada vez que tenían tiempo libre.

Así lo hizo.

Una invitación

Cuando notaba que había jóvenes fuera del templo comenzó a invitarlos al centro y les ofreció enseñarles cómo realizar la indexación en FamilySearch.

Al principio algunos eran tímidos o un poco renuentes. Pero el hermano Moscão dijo que cuando él les habló de rescatar a la gente de la oscuridad y sacarlos a la luz sus nombres en obediencia a las palabras de un profeta viviente, los jovenes se conmovieron.

El hecho de que el templo y el centro de historia familiar estén localizados en las mismas instalaciones es significativo; pone de relieve de una manera física que el templo y la historia familiar son dos partes de un gran esfuerzo. Eso, dijo George A. Oakes, presidente del templo de Campinas Brazil, es algo que los jóvenes en el distrito del templo vienen para aprender.

“Antes de enfatizar el involucrarlos en la historia familiar y en la indexación, su viaje al templo fue principalmente con el propósito de ser bautizados por los muertos. Ahora las experiencias de indexación se están convirtiendo en parte de su trabajo”, él dijo.

“Yo creo que si toda la juventud de la Iglesia se involucrará en la indexación y en la historia familiar por unos pocos minutos al día, ellos también obtendrán el mismo espíritu que estos jóvenes brasileños llevaron con ellos luego de su visita al templo”

Una Introducción

Cuando jovenes entran al centro, el hermano Moscao y los misioneros que son voluntarios en el centro-- hay un total de 16 que prestan servicio en diferentes turnos durante la semana--cubren lo siguiente de una orientación breve e informal. (El hermano Moscao dice que al introducir a los jóvenes a los aspectos espirituales del programa antes de los aspectos técnicos les ayuda a fijar el tono de la experiencia.)

  • Ellos se estan convirtiendo en salvadores en el monte de Sión (véase Abadias 1:21).
  • Ellos están respondiendo al llamado de un profeta (véase david a. bednar, "Los corazones de los hijos se volverá").
  • Ellos están rescatando gente de la oscuridad-la oscuridad de la largamente olvidadas películas y los libros polvorientos de las oficinas de registro y de las iglesias. La indexación trae aquellos nombres a la luz y hace posible su busqueda para que las familias los puedan encontrar y participar en la obra del templo por sus antepasados.
  • Al unirse a esta labor, ellos estaran participando en otro aspecto de “el mas glorioso de todos los temas pertenecientes al evangelio eterno, a saber, el bautismo por los muertos” (D&C 128:17).
  • Estarán usando su tiempo en el gran obra de redimir a los muertos, una obra que bendice familias.
  • Todos nosotros somos parte de la familia de Dios, y en la indexación de los nombres de las personas que no conocen, aún están ayudando a su familia. Por otra parte, señala el hermano Moscao, tal vez alguien más en el mundo esta haciendo lo mismo por ellos y estan indexando los nombres de sus antepasados.
  • Una vez ellos entiendan como participar en la indexación, tienen la oportunidad de enseñar a los miembros de su familia y a otros jóvenes en sus barrios y ramas a participar también.

Después de enseñarles a los jóvenes un poco acerca de la doctrina detrás de la indexación y de explicarles el concepto, el Hermano Moscao y los misioneros utilizan las 6 computadoras del centro y les enseñan a los adolescentes como empezar a indexar y como pueden instalar el software una vez lleguen a sus casas. Una vez entendido, dice el hermano Moscao, ellos “empiezan a indexar con una fuerza sin igual”.

Un entusiasmo por la obra.

Los números reflejan ese entusiasmo. En los primeros dos meses de 2012, los visitantes indexaron 6,370 nombres; 3,305 de esos fueron indexados por jóvenes de edades de 12 a 18. De hecho, para acomodar el creciente interes en indexar, el centro de historia familiar de Campinas a menudo extiende sus horas regulares de 8:00 a.m. a 6:00 a.m. y se queda abierto hasta las 10:00 p.m.

Pero la juventud no están dejando la indexación atras cuando salen del templo. Cuando llegan a casa, continuan su responsabilidad en lo que Hermano Moscao llama “el ejercito de más de 170,000 indexadoras activos que la Iglesia tiene hoy.”

Liv Versiani Nery de 12 años de Vila Velha, Espiritu Santo, se encuentra entre ellos. Su ciudad natal esta a unas 16 horas del templo, y ella aprendió a indexar en el Centro de Historia Familiar del Templo de Campinas. Se fue a la invitación de una de sus amigas Larissa Mello, y aunque nunca antes habia eschuchado de la indexación-mucho menos intentado--aprendió rapido. Más adelante en la semana fue invitada a compartir su experiencia con otros jóvenes durante una de las sesiónes de bautismos, y cuando llegó la hora de partir de Campinas, Liv había indexado 160 registros.

Hoy, Liv continua indizando de su casa. Ha hablado de indizando con su vecino, que es de otra fe, y le dijo de la experiencia positivia la ha sido para ella; el vecino ha “respondido entusiasticamente,” dijo Liv.

Liv también busca regularmente a su director de historia familiar del barrio para recibir orientación adicional y posteriormente comparte lo que ha aprendido con otros jóvenes de la estaca.

“Sientes un espíritu muy dulce cuando estás indexando,” dijo Liv. “Me encanta tanto hacerla. He aprendido que esta es una obra del Señor y aunque estoy ayudando a personas que no conozco, ellos aún son hijos del Padre Celestial. Es una obra muy gratificante.”

Lúcia Monferron Pires ha servido como misionera en el Centro de Historia Familiar del Templo de Campinas Brazil desde abril de 2011. Aunque ella disfruta trabajar y ayudar a todos los clientes en el centro, ella ve algo especial en la juventud.

“Estoy completamente de acuerdo con lo que el Elder David A. Bednar enseñó sobre los jovenes siendo preperados por esta obra,” dijo la Hermana Monferron. “Fueron nacidos en un tiempo propicio por esta y son ágiles en comprendiendo el proceso por ambos aspectos espirituales y tecnológicos de la historia familiar. Responden prontamente y positivamente, y disfrutan del sentimiento que viene de ayudar a la Iglesia y ser parte de un grupo mundial que realiza una obra tan importante.”

Una Transformación.

Los jovenes siguen trabajando de sus computadoras de casa, de la escuela, o en su Centro de Historia Familiar local (los que viven suficiente cercas tal vez volverán al centro al lado del templo), y están invitando sus iguales a unirse. Muchos están logrando las metas de Mi Deber a Dios y Progreso Personal con su trabajo de indexacion. El Hermano Moscão dijo que muchos le han informado que el tiempo que anteriormente ocupaban para navegar en la red, jugar juegos en sus teléfonos celulares y en sus consolas de videojuegos, y ver television, ahora lo usan para hacer más indexación.

La hermana Monferrón dijo que ella había recibido mensajes de jóvenes que le cuentan cuán felices están por participar en esta tarea de ayudar a otros a encontrar sus antepasados y llevar a cabo las ordenanzas en favor de ellos.

“Los jóvenes llegan a ser más resposables con el trabajo del templo cuando están haciendo índice,” ella sugirió. “Es un gran privilegio poder ver que ellos y sus sentimientos por el Evangelio transforman. Me hace querer aprender más y mejorarme para el beneficio de todos los que asisten al centro de historia familiar.”

Los que sirven en el Centro de Historia Familiar del Templo de Campinas Brasil están preparándose para la llegada de los jóvenes. Ahora ellos coordinan con el liderazgo de la estaca y del distrito con antelación para tener los jóvenes venir al templo ya teniendo algún conocimiento de hacer índice. Eso, espera el hermano Moscão, mejorará los esfuerzos y hará que el tiempo que se pase en el centro sea aun mas efectivo.

Una Influencia para el Bien

Los jóvenes del distrito del Templo de Campinas ya están haciendo una diferencia significante.

Anteriormente de este año, Isabela Andrade Gonçalves, 16, de Vila Velha, Espírito Santo, Brasil, viajó con su madre y hermana al templo; el último día del viaje era el primer aniversario de la muerte de su abuela. Isabela fue bautizado por su abuela, y su madre realizó las otras ordenanzas del templo.

“Durante este viaje me sentía de que necesitaba hacer algo bueno,” explicó Isabela. “Yo quisiera aprender a hacer índice, y recibí ayuda del Hermano José Moscão.

”Luego, cuando yo estaba realizando el bautismo por mi abuela, el espíritu me tocó profundamente. Me di cuenta de que había mucha gente más allá del velo esperando constantemente, y que ellas necesitaban mi ayuda. Me di cuenta de que yo podía dar un poco de mi tiempo para servir y que podía hacer mucho para esta gente. Hacer índice es una obra de amor.“

Un imán pequeño que dice, ”¿Has hecho índice hoy?“ hace recordar a Isabela de la importancia de esa obra. ”Nosotros, los jóvenes de la Iglesia, tenemos el privilegio de servir en la misión de la Iglesia,“ ella dijo. ”Prefiero hacer índice en vez de hacer algo que no me satisface ni contribuye a mi desarrollo espiritual. ...Es gratificante ser un instrumento en las manos de nuestro Padre Celestial.“

Alexandra Malfatti nunca ha participado en hacer índice antes de ser una misionera del centro de historia familiar en septiembre de 2010. Pero ella aprendió rápidamente. Y descubrió que los jóvenes que ella enseña aprenden rápidamente también. ”La tecnología ya está en su ADN,“ ella dijo.

”A causa de ser joven, ellos están ansiosos de aprender,“ ella explicó. ”Los jóvenes que vienen al templo son muy especiales. Ellos quieren ser útiles para el Señor. Y se sorprenden al darse cuenta cuan fácil es entender el programa.“

La lección para adultos, en particular los qué estén trabajando con los jóvenes en la obra de historia familiar, es ”¡creer en la juventud!“ ella dijo. ”Ellos son capaces de ayudar en la obra del Señor. ...Los jóvenes de la Iglesia son especiales, y ellos están preparados. Nosotros debemos creer en su potencial.“