La Sociedad de Socorro celebra 175 años en 2017

Por Sarah Jane Weaver, la hermana Linda K. Burton, la hermana Carole M. Stephens y la hermana Linda S. Reeves, Presidencia General de la Sociedad de Socorro

  • 20 Enero 2017

El 17 de marzo marca 175 años desde que el profeta José Smith organizó la Sociedad de Socorro en 1842. La Presidencia General de la Sociedad de Socorro está emocionada acerca de esta fecha debido a los sentimientos y acciones que evocará en mujeres de todo el mundo.

Puntos destacados del artículo

  • El programa de la Sociedad de Socorro celebrará 175 años de organización este marzo.
  • En vez de celebrar un “evento”, reflexionen y busquen con espíritu de oración maneras de honrar y recordar esta ocasión especial.

“La Sociedad de Socorro permanecerá cada vez más firme y fuerte, como un faro de luz y una estrella guiadora para mujeres de todas las naciones”. —Hermana Belle Spafford, expresidenta general de la Sociedad de Socorro

El 17 de marzo de 2017 marca 175 años desde que el profeta José Smith organizó la Sociedad de Socorro en 1842. Estamos emocionadas acerca de esta fecha debido a los sentimientos y acciones que anticipamos evocará en el corazón y la vida de todas nuestras hermanas.

Principios de la Sociedad de Socorro

En vez de ser un “evento”, esperamos que cada una de las hermanas reflexione y busque con espíritu de oración maneras en las cuales honrar y recordar esta ocasión especial, manteniendo los siguientes principios en mente:

  • Nuestra identidad eterna, funciones y responsabilidades como hijas amadas procreadas en el espíritu por nuestros Padres Celestiales.
  • El propósito y la obra de la Sociedad de Socorro en la obra de salvación es: “La Sociedad de Socorro prepara a las mujeres para las bendiciones de la vida eterna al aumentar la fe en el Padre Celestial y en Jesucristo y Su expiación; fortalecer a las personas, las familias y los hogares mediante las ordenanzas y los convenios y trabajar en unidad para ayudar a los necesitados”.
  • La gran historia de discipulado de las mujeres.
  • Todas las hermanas pertenecen y son valiosas miembros de la Sociedad de Socorro, sin importar cuál es su llamamiento actual.

Una invitación

Nos gustaría extender una invitación a las hermanas y a las líderes a considerar con espíritu de oración cómo podrían incorporar estos principios al enseñar en la Sociedad de Socorro, planear y participar en reuniones adicionales significativas.

Las alentamos a utilizar recursos inspirados, como las Escrituras, Hijas en Mi Reino, Manual 2: Administración de la Iglesia y discursos de la conferencia general que posibilitan la inspiración.

A continuación ofrecemos algunos ejemplos de ideas que podrían ayudar a inspirar otras ideas para considerar con espíritu de oración:

  • Identidad eterna: vuelvan a leer el discurso del presidente Nelson “Una súplica a mis hermanas” (y hagan una meta personal).
  • Aumentar la fe: memoricen “El Cristo Viviente: El Testimonio de los Apóstoles” o escriban su testimonio o su relato de conversión.
  • Fortalecer a las personas, las familias y los hogares: lleven el nombre de un familiar al templo o ayuden a alguien más a hacer convenios del templo.
  • Trabajar en unidad para ayudar a los necesitados: sigan buscando a refugiados para prestarles servicio mediante “Fui forastero” e “Ilumina el Mundo”.
  • Gran historia de discipulado de las mujeres: vuelvan a leer Hijas en Mi Reino y busquen algunos principios o ejemplos de mujeres cuyas historias las inspiren.
  • Todas las hermanas son parte de la Sociedad de Socorro: tiendan una mano a una de las hermanas que trabaja en las Mujeres Jóvenes y en la Primaria o a una de las “hermanitas” en aquellas organizaciones.

Familia SUD de Cebú, Filipinas. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Una hermana de la Sociedad de Socorro de Tacloban, Filipinas, camina con sus hijos. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Una hermana de la Sociedad de Socorro de Montreal, Quebec. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Hermanas misioneras que sirven en Montreal, Quebec. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Casi al final de su servicio, la hermana Belle Spafford, que sirvió como Presidenta General de la Sociedad de Socorro por cerca de treinta años, expresó sus sentimientos acerca de la organización.

En esa época (1966), la membresía de la Sociedad de Socorro era de unas 300 000 mujeres. Cincuenta años más tarde (2016) se produjo un incremento de veinticinco veces ese número, ¡ahora son más de siete millones de mujeres! La hermana Spafford testificó con poder y una visión extraordinaria: “La Sociedad de Socorro permanecerá cada vez más firme y fuerte, como un faro de luz y una estrella guiadora para mujeres de todas las naciones.

“Seguirá elevándose hasta convertirse en un poderoso baluarte contra las fuerzas del mal que abruman a las mujeres y que amenazan sus hogares y seres queridos. Brindará paz al alma y amor a los corazones y la vida de un sin fin de miembros que son hijas de nuestro Padre… Que las mujeres de hoy y del mañana valoren la Sociedad de Socorro, fomenten su obra y que se amen las unas a las otras” (History of Relief Society 1842–1966, 1966, pág. 140).

Nuestra presidencia está agradecida por ustedes, nuestras amadas hermanas de la Sociedad de Socorro, a medida que continúen siguiendo a nuestro Padre Celestial y al Salvador Jesucristo, y también se amen y se fortalezcan las unas a las otras. Estamos contentas de escuchar sobre las maneras sencillas, significativas y llenas del Espíritu en las que ustedes recordarán de manera personal y colectiva los 175 años de la Sociedad de Socorro.

Madre SUD de Tacloban, Filipinas. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Una hermana de la Sociedad de Socorro de Tacloban, Filipinas. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Hermanas de la Sociedad de Socorro de Manila, Filipinas. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Anaseini Tabua y otros miembros de la Estaca Nausori, Fidji, se congregaron en el centro de reuniones SUD cerca de su pueblo. Muchos de sus hogares fueron destruidos por el ciclón tropical Winston el 20 de febrero. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Peggy Plumb, de LDS Charities, camina junto a niños en el campamento para refugiados Bajed Kandala 2 ubicado en el norte de Irak. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Hermanas de la Sociedad de Socorro de Sapporo, Japón. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Una hermana de la Sociedad de Socorro de Filadelfia, Pensilvania. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Una hermana de la Sociedad de Socorro de Filadelfia, Pensilvania. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Ghafouri, una doctora musulmana, y Peggy Plumb, de LDS Charities, entregan un vestido blanco a una mujer Yazidi en el campamento para refugiados Bajed Kandala 2 en Irak. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Una hermana de la Sociedad de Socorro de Sapporo, Japón. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Una hermana de la Sociedad de Socorro de Sapporo, Japón. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Yoko Sato y Hideko caminan cerca del Templo de Sapporo, Japón. Fotografía por Sarah Jane Weaver.

Hermanas de la Sociedad de Socorro de Filadelfia, Pensilvania. Fotografía por Sarah Jane Weaver.