Las mujeres jóvenes pueden compartir bondad a través de las redes sociales

Por Por Carol F. McConkie, Presidencia General de las Mujeres Jóvenes

  • 8 Octubre 2014

Las mujeres jóvenes pueden compartir bondad tal como el élder David A. Bednar alentó, mediante el uso de las redes sociales, dijo la hermana Carol F. McConkie.  Foto por D. Brent Walton.

Puntos destacados del artículo

  • El compartir pensamientos inspiradores en Instagram llevó a una jovencita a que se comunique con una nueva amiga que ahora está recibiendo las lecciones misionales.
  • Los padres y los líderes pueden ayudar a los hombres y a las mujeres jóvenes a seguir pautas acerca de cómo publicar en línea.
  • Las mujeres jóvenes están compartiendo frases, imágenes y pensamientos positivos con miles de seguidores en Instagram.

“Necesitamos simplemente tener una conversación como la tendrían unos amigos en una misma habitación, guiados siempre por la inspiración del Espíritu y recordando constantemente la expiación de Jesucristo, la cual nos recuerda cuán valiosos son los hijos de nuestro Padre Celestial”. —Élder M. Russell Ballard, del Quórum de los Doce

Vivimos en una época en que toda persona que decide hablar tiene la oportunidad de hacerlo al compartir su opinión. Mediante la tecnología moderna podemos enviar mensajes a la familia, amigos y cientos de otras personas en cuestión de segundos. Los canales de las redes sociales nos permiten compartir tanto texto como imágenes visuales en el mismo momento que están sucediendo los acontecimientos.

Nuestras mujeres jóvenes ya están usando de manera activa estas herramientas de comunicación. Los padres y los líderes pueden ayudarlas a aprender a utilizar estos recursos de forma apropiada y eficaz para compartir mensajes sencillos de bondad y verdad. Cuando es encomiable todo lo que ellas envían por mensajes de texto, por tweet o lo que publican, informan e inspiran las mentes y los corazones de quienes escuchan, leen o ven sus mensajes.

Nuestras mujeres jóvenes tienen mensajes gloriosos para compartir. Una joven comprendió su influencia y su responsabilidad de difundir luz y bondad a las demás personas. Emily, de once años de edad, deseaba mucho tener una cuenta activa en Instagram. Sus padres, preocupados por la privacidad y seguridad, estaban reacios a que lo hiciera. Juntos, idearon un plan. La hermana mayor de Emily tiene una cuenta en Instagram llamada JesusistheChrist (Jesús es el Cristo), dónde publica fotos de templos, frases acerca del Salvador y demás contenido edificante. Emily siguió el ejemplo de su hermana y abrió una cuenta anónima en Instagram bajo el nombre de seektouplift (Procura edificar). Ella publica todos los días pensamientos edificantes con diseños que ha creado. Ahora tiene más de 2.300 seguidores.

Una de sus seguidoras preguntó a Emily si era cristiana. Ella respondió diciendo que lo era y que era miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, a menudo conocida como los mormones. Después de enviarse mensajes por un tiempo, Emily remitió a su amiga a mormon.org. Su amiga solicitó un Libro de Mormón en línea. Cuando lo recibió, Emily y su amiga de Instagram empezaron a leer el Libro de Mormón juntas y a comentar acerca del mismo entre ellas. Después de un tiempo, Emily preguntó a su nueva amiga si le gustaría que un par de jovencitos o jovencitas fueran a su casa para que le enseñaran a ella y a su familia un poco más acerca de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Esta nueva amiga y su familia ahora reciben las lecciones misionales en su hogar.

Una damita, de California, presenta su cuenta de Instagram, For_the_Strength_of_Youth (Para la Fortaleza de la Juventud), diciendo: “Todo lo que quiero es compartir la luz de Cristo en la vida de las personas. ¡Encuentra una razón para sonreír hoy!”. Ella tiene más de 6.000 seguidores.

Estas dos hijas preciadas de Dios representan el principio del cumplimiento de la promesa que el Señor hizo al profeta Enoc. Dijo que en los últimos días, “justicia enviaré desde los cielos; y la verdad haré brotar de la tierra para testificar de mi Unigénito, de su resurrección de entre los muertos, sí, y también de la resurrección de todos los hombres; y haré que la justicia y la verdad inunden la tierra como un diluvio” (Moisés 7:62).

Los jóvenes deben consultar con sus padres y hacer un plan sobre qué clases de materiales edificantes y apropiados compartirán en las redes sociales.

Nuestro Padre Celestial y Jesucristo se aparecieron a José Smith. Por el poder de Dios, José Smith sacó a la luz el Libro de Mormón. La rectitud y la verdad han sido restauradas a la Tierra en esta dispensación final; y ahora, el testimonio de Cristo y Su Evangelio deben salir adelante “como con un diluvio” para preparar al mundo para la Segunda Venida del Salvador. Como hijos del convenio nos presentamos como testigos de Cristo en todo momento, en todas las cosas y en todo lugar, incluso en las redes sociales.

El élder David A. Bednar, del Quórum de los Doce Apóstoles, enseñó en su discurso durante la Semana de la Educación en el campus de la Universidad Brigham Young: “Creo que ha llegado el momento de que nosotros, como discípulos de Cristo, utilicemos estos medios inspirados de manera apropiada y mucho más eficaz para testificar de Dios el Eterno Padre, de Su plan de felicidad para Sus hijos, y de Su Hijo Jesucristo como el Salvador del mundo; para proclamar la realidad de la restauración del Evangelio en los últimos días y para llevar a cabo la obra del Señor” (“Inundar la tierra como con un diluvio”, discurso dado durante la Semana de la Educación en el campus de la Universidad Brigham Young, 19 de agosto de 2014).

Los padres y los líderes pueden ayudar a las mujeres jóvenes a seguir las pautas de los manuales de la Iglesia, se alienta a los miembros a compartir mensajes de los sitios oficiales y cuentas sociales de la Iglesia, así como sus propias palabras, imágenes y demás multimedia. Cuando los miembros utilicen internet para otros fines que no sean los llamamientos de la Iglesia, deben comprender que el mensaje que compartan es personal, “no deben dar la impresión de que representan a la Iglesia o que ésta los patrocina”. Además, deben dar ejemplo de cortesía y centrarse en compartir mensajes dignos de alabanza que fortalezcan a aquellos con quienes se contactan (véase Manual 2: Administración de la Iglesia, 2010, 21.1.22). Se encuentran más pautas detalladas en la página Ayudas para el uso de internet para miembrospágina en ChurchofJesusChrist.org.

Las mujeres jóvenes están perfectamente preparadas para utilizar las redes sociales para hablar abiertamente y proclamar bondad y verdad. No es complicado. Extendemos la mano a los demás en amistad, apoyo y amor. “Necesitamos simplemente tener una conversación como la tendrían unos amigos en una misma habitación, guiados siempre por la inspiración del Espíritu y recordando constantemente la expiación de Jesucristo, la cual nos recuerda cuán valiosos son los hijos de nuestro Padre Celestial” (M. Russell Ballard, “Sharing the Gospel by Using the Internet,” Ensign, julio de 2008).