2012
Doctrina y Convenios 135:3
Junio de 2012


Línea por línea

Doctrina y Convenios 135:3

Antes de ser martirizado, el profeta José Smith hizo muchas cosas para bendecir a toda la humanidad.

3 José Smith, el Profeta y Vidente del Señor, ha hecho más por la salvación del hombre en este mundo, que cualquier otro que ha vivido en él, exceptuando sólo a Jesús. En el breve espacio de veinte años ha sacado a luz el Libro de Mormón, que tradujo por el don y el poder de Dios, y lo ha hecho publicar en dos continentes; ha enviado la plenitud del evangelio sempiterno, que el libro contiene, a los cuatro ángulos de la tierra; ha publicado las revelaciones y los mandamientos que integran este libro de Doctrina y Convenios, así como muchos otros sabios documentos e instrucciones para el beneficio de los hijos de los hombres; ha congregado a muchos miles de los Santos de los Últimos Días; ha fundado una gran ciudad y ha dejado un nombre y una fama que no pueden fenecer. Vivió grande y murió grande a los ojos de Dios y de su pueblo; y como la mayoría de los ungidos del Señor en tiempos antiguos, ha sellado su misión y obras con su propia sangre.

Vidente

Un vidente:

  • Está autorizado para ver con ojos espirituales “cosas que el ojo natural no percibe” (véase Moisés 6:35–38).

  • Es un revelador y un profeta (véase Mosíah 8:13–16).

  • Conoce el pasado, el presente y el futuro.

Ha hecho más

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Presidente Joseph F. Smith

“La obra a la que José Smith se dedicó no se limita sólo a esta vida, sino que también atañe a la vida venidera y a la existencia pasada. En otras palabras, se relaciona con los que han vivido en la tierra, con los que ahora viven aquí y con los que vivirán en ella después de nosotros. […] Tiene que ver con toda la familia humana de eternidad en eternidad”.

Presidente Joseph F. Smith (1838–1918), Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: Joseph F. Smith, 1998, pág. 14.

El don y el poder de Dios

José Smith tradujo el Libro de Mormón “mediante la misericordia y el poder de Dios” (D. y C. 1:29) y “por los medios preparados de antemano” (D. y C. 20:8), entre ellos el Urim y Tumim.

Fama y nombre que no pueden fenecer

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Presidente Thomas S. Monson

“Aun cuando los sucesos del 27 de junio de 1844 fueron trágicos [el martirio de José y Hyrum Smith], nos consuela comprender que el martirio de José Smith no fue el último capítulo de ese relato. Aunque los que procuraron quitarle la vida pensaron que la Iglesia se derrumbaría sin él, su potente testimonio de la verdad, las enseñanzas que él tradujo y su declaración del mensaje del Salvador siguen viviendo hoy en el corazón de más de doce millones de miembros que están por todo el mundo y que lo proclaman como profeta de Dios”.

Véase presidente Thomas S. Monson, “El profeta José Smith: Maestro mediante el ejemplo”, Liahona, noviembre de 2005, pág. 69.

Ha sellado su misión y obras con su propia sangre

Lee la letra del himno “Loor al profeta” (Himnos, Nº 15) y luego escribe en tu diario personal lo que sientes acerca del profeta José Smith.