Amor por mis antepasados

Nací en Santa Cruz de Yojoa y me bauticé en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en noviembre del 2017. Un día el asesor de historia familiar de la región, el hermano Barahona, me invitó a trabajar en historia familiar. La excursión al templo de mi barrio se acercaba, así que me ayudó a crear mi cuenta y comenzar a trabajar en mi árbol familiar. Deseaba ir al templo y llevar nombres de mis antepasados. Mi madre y mi padre ya fallecieron y deseaba llevar sus nombres para hacer el bautismo por ellos.

Estando en el templo me sentí tan humilde y feliz, me tocó esperar por casi tres horas. Mientras esperaba mi testimonio se fortaleció. Sé que esta Iglesia es verdadera, que la obra que se realiza en los templos es esencial para mi salvación y la de mis antepasados.

Cuando llegó el momento de entrar al bautisterio, tuve la oportunidad de bautizarme por mis padres así como por otras personas cuyos nombres estaban listos para recibir esta sagrada ordenanza. Cada vez que entraba en el agua sentía una felicidad y gozo que solo en la Casa del Señor se puede experimentar. Me siento agradecido por los templos y la obra que se realiza en ellos. Sé que esta Iglesia es verdadera, la única que tiene la plenitud del Evangelio en la tierra.