La honradez

Sacerdocio Aarónico, Manual 3, 1995


Objetivo

Que cada uno de los jóvenes se disponga a evaluarse a sí mismo y se esfuerce por ser honesto en todas sus acciones.

Preparación

  1. 1.

    Estudie con devoción Éxodo 20:13–17 y Alma 7:20.

  2. 2.

    Materiales necesarios:

    1. a.

      Los libros canónicos (cada joven debe tener los suyos propios).

    2. b.

      Lápices para marcar las Escrituras.

Sugerencias para el desarrollo de la lección

La deshonestidad causa desdicha. La honradez produce la paz interior

Cita y análisis

Relate la siguiente experiencia del élder Gordon B. Hinckley:

“Entre las muchas cartas anónimas que he recibido, hubo una de particular interés; contenía un billete de veinte dólares y una notita que decía que el remitente había estado en mi casa hacía unos años. Viendo que no había nadie, trató de abrir la puerta, que estaba sin llave, entró y dio un paseo por la casa. En el dormitorio encontró un billete de veinte dólares; lo tomó y se fue. En el transcurso de los años, su conciencia no le dejó vivir en paz, y entonces me devolvía el dinero…

“…No incluía nada en concepto de interés por el tiempo que había usufructuado mi dinero. Pero al leer su patética carta, pensé en el castigo al que él mismo se había sometido durante un cuarto de siglo, con el incesante tormento de su conciencia. No pudo encontrar la paz hasta que hizo restitución de lo robado” (Liahona, agosto de 1976, pág. 52).

• ¿Por qué, piensan ustedes, la deshonestidad hace desdichada a una persona?

Cita

Lea la siguiente declaración acerca de la importancia de mantener la paz y el gozo que se obtienen al vivir con rectitud:

“Hay veces en que, bajo ciertas circunstancias, es posible escaparnos de muchas cosas —de las cárceles, del amigo falso, de las malas compañías, de la gente aburridora, de ambientes indeseables— pero nunca de nosotros mismos. Cuando nos acostamos al final del día, quedamos a solas con nuestros pensamientos —ya sean placenteros o no. Cuando nos levantamos en la mañana, allí estamos todavía con nosotros mismos —ya sea que nos guste o no. Lo más persistente en la vida (y, sin lugar a dudas, aun en la muerte) es nuestra propia conciencia. Siendo esto así, nadie es más digno de compasión que la persona que se siente incómoda consigo misma —no importa hacia dónde, cuán rápidamente o cuán lejos vaya” (Richard L. Evans, Richard Evans’ Quote Book [Salt Lake City: Publishers Press, 1971], pág. 214).

Presentación por el asesor

Explique a los jóvenes que no tenemos necesidad de sufrir la desdicha que proviene de una conciencia intranquila. Contamos con el Espíritu Santo para que guíe nuestras acciones y pensamientos de un modo que nos produzca regocijo. Pero cada vez que rehusemos seguir la inspiración del Espíritu del Señor perderemos gran parte de nuestra paz y felicidad.

La honradez es la base de todas las buenas relaciones

Pasaje de las Escrituras y análisis

Señale que la honradez es la base de todas las buenas relaciones. Varios de los Diez Mandamientos nos enseñan cómo vivir en paz con nuestros semejantes.

Pida a los jóvenes que lean y marquen Éxodo 20:13–17.

• ¿En qué manera nos enseñan estos versículos a ser honrados? ¿Qué nos enseñan en cuanto al valor que el Señor da a la honradez?

Presentación por el asesor

Explique a los jóvenes que toda relación provechosa depende de cuánto confía entre sí la gente. Los acuerdos hechos entre las naciones se basan en la confianza mutua. Cuando una no confía en la otra, las naciones interrumpen sus relaciones diplomáticas y cesa entre ellas el intercambio y otras actividades pacíficas. El resultado podría aun ser una guerra. La reanudación del intercambio y de las relaciones diplomáticas se produce solamente cuando se reestablece la confianza entre las naciones.

Lo mismo sucede con las relaciones entre personas. Nos gusta establecer relaciones con gente en la cual podamos confiar. Respetamos a aquellos que han demostrado ser honrados en sus tratos con nosotros y con los demás. Cuando pensamos en las personas que más respetamos, es evidente que son gente en quien confiamos que harán lo que dicen que van a hacer y que nos tratarán con honradez.

Análisis

• ¿Cómo sabemos que podemos confiar en alguien? (Por las experiencias que hemos tenido con esa persona.)

• ¿Qué experiencias han tenido ustedes que demuestran que pueden confiar en sus padres, en su obispo y en sus amigos?

Pida a los jóvenes que relaten algunas experiencias mediante las cuales han logrado confiar en otros. Señale entonces que en cada caso se ha manifestado la integridad personal del individuo en quien se ha confiado.

Pasaje de las Escrituras y análisis

Una de las características más importantes del Señor es que siempre ha cumplido Sus promesas.

Pida a uno de los jóvenes que lea Alma 7:20.

• ¿En qué manera les ayuda este pasaje a saber que pueden confiar en el Señor?

• ¿Qué significado tiene para nosotros el hecho de que el Señor nunca varía en lo que nos dice?

• ¿De qué modo puede este versículo ayudarles a saber cómo tratar a los demás?

Asegúrese de que los jóvenes entiendan que aprendemos a confiar en el Señor porque sabemos que Él es honrado con nosotros. También debemos ser honrados con los demás para que aprendan a confiar en nosotros.

La honradez nos prepara para servir al Señor

Cita

Explíqueles que la honradez nos prepara para servir al Señor. Ningún joven podrá ser un misionero eficaz a menos que haya aprendido a ser honrado. Léales la siguiente declaración del presidente N. Eldon Tanner:

“No existe una mayor cualidad de nuestro carácter que la honradez en todo lo que hacemos… Siento mucho tener que decir que han habido miembros, tanto hombres como mujeres, que han mentido para poder entrar al templo y para servir una misión. El Señor ha dicho que ninguna cosa impura entrará en el templo de Dios (véase D. y C. 97:15). Cuando se entrevista para que reciba una recomendación para el templo o un llamamiento a una misión, la persona tiene que tener en cuenta que el obispo y el presidente de estaca están representando al Señor y que sus respuestas son para el Señor y que sus compromisos son con el Señor. El Señor lo sabe y no será burlado…

“Los futuros misioneros deben comprender que el Señor necesita a alguien en quien pueda confiar, alguien que sea limpio y digno en todo sentido para representarlo en el campo misional. Si no son dignos, no acepten un llamamiento, no mientan para poder ir, sino prepárense para ello mediante el arrepentimiento” (Richard L. Evans, Richard Evans’ Quote Book [Salt Lake City: Publishers Press, 1971], pág. 214).

Análisis

• ¿Por qué es tan importante que no mintamos a nuestros líderes del sacerdocio?

Recalque cuán importante es que los jóvenes se conserven dignos de ir a una misión.

Relato y análisis

Reláteles el siguiente caso de uno de los líderes sudamericanos del Señor que aprendió desde niño a ser honrado:

“Cuando Ben Pantoja, de un pueblito en el sur de Chile, tenía seis años de edad, sus padres fueron a una ciudad vecina a comprar alimentos para la familia. Después que se hubieron ido, su hermanito de ocho años le dijo a Ben: ‘¡Vamos a comprar un helado!’

“Un helado era, en realidad, algo muy especial para Ben y para su pequeña hermanita Mercedes, así que ambos preguntaron a su hermano dónde conseguirían el dinero para comprarlo. Éste les respondió que su padre le había dicho que si querían comprar alguna golosina podían tomar el dinero del cajoncito que contenía los ahorros de la familia. Ben tuvo el presentimiento de que eso no era verdad, pero la sola idea de saborear el helado le ocupó los pensamientos.

“Los tres comieron helado. Cuando sus padres regresaron a la casa, la mamá de Ben fue directamente al cajoncito de los ahorros para depositar el residuo de los gastos en él y notó que faltaba dinero. Interrogó a sus hijos y descubrió la verdad.

“Ben Pantoja decidió esa misma noche que nunca más habría de ser deshonesto y que jamás haría nada que fuera incorrecto. En la actualidad, él es uno de los líderes escogidos del Señor en Sudamérica porque cumplió su palabra” (Lynn Mickelsen, “Stretching the Truth,” New Era, abril de 1992, pág. 4).

• ¿En qué manera preparó a Ben su decisión de niño para llegar a ser un líder en la Iglesia?

Conclusión

Presentación por el asesor

Explique a los jóvenes que nuestro Padre Celestial nos ha brindado la oportunidad de llegar a ser como Él y algún día lograr la naturaleza divina. Es imposible imaginar que podemos llegar a ser como nuestro Padre Celestial hasta que logremos ser honrados con los demás y con nosotros mismos.

Testimonio y cometido

Exprese su testimonio en cuanto al valor de la honradez en su vida. Exhorte a los jóvenes a que evalúen cuán honrados son y que se esfuercen por serlo aún más siguiendo la guía que el Espíritu Santo les ofrece.