Luego de recibir la Primera Visión en 1820, José Smith compartió su experiencia con un predicador que rechazó su testimonio. Otras personas de la comunidad también eludieron y persiguieron al joven José, y hombres prominentes de la sociedad hicieron lo imposible para criticarlo públicamente. A pesar de esa oposición, José Smith se mantuvo fiel a su testimonio.
El presidente Gordon B. Hinckley compartió una experiencia que tuvo cuando era misionero joven y se encontraba prestando servicio en Londres, Inglaterra. Mientras lees su relato, medita en lo que harías si te encontraras en el lugar del joven.
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Presidente Gordon B. Hinckley
“[Un hombre joven] llegó a nuestro apartamento una noche lluviosa; llamó a la puerta y lo invité a pasar.
“Me dijo: ‘Necesito hablar con alguien. Estoy completamente solo…
“Le pregunté: ‘¿Qué problema tiene?’
“Me contestó: ‘Cuando me convertí a la Iglesia, hace menos de un año, mi padre me dijo que me fuera de la casa y no volviera nunca; y no he regresado’.
“‘Unos meses después’, continuó, ‘el club de cricket al que estaba afiliado me borró de la lista y anuló mi afiliación; esos eran los muchachos con los que había crecido, de los que me sentía muy cerca, mis amigos’.
“Luego agregó: ‘El mes pasado mi jefe me echó por ser miembro de esta Iglesia y no he podido conseguir otro empleo…
“‘Y anoche, la joven con la que he estado de novio durante año y medio me dijo que nunca podría casarse conmigo porque soy mormón’” (“La soledad del liderazgo”, Principios de liderazgo: Manual para el maestro, 2001, págs. 48–49).
¿Alguna vez has sentido que te han tratado mal o te han criticado debido a tus creencias religiosas? ¿Cómo te sentiste en esos momentos?
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La Primera Visión
Si bien José Smith recibió enormes bendiciones por haber permanecido fiel a su testimonio de la Primera Visión, también fue rigurosamente probado. Mientras estudias hoy, piensa en lo que podrías aprender de la forma en que José Smith reaccionó ante la oposición a su testimonio que te ayude con la oposición que quizá enfrentes en esta época o en algún día futuro.
En José Smith—Historia, el Profeta describió un poco la oposición a la que hizo frente por causa de su testimonio. Lee José Smith—Historia 1:21–23 y busca palabras y frases que te ayuden a entender lo que él experimentó. Según el versículo 22, ¿quiénes eran los principales participantes en la persecución de José Smith? Teniendo en cuenta la edad y las circunstancias de la vida de José Smith, ¿por qué crees que la persecución por parte de esas personas puede haber sido especialmente difícil para él?
Presta atención a la frase que se encuentra cerca del final de José Smith—Historia 1:20 y que comienza con las palabras: “Parece que…”. Lee el resto del versículo, empezando por esas palabras, y busca la razón por la que José Smith experimentó esa persecución. Según lo explica José, ¿por qué sufrió tanta persecución a una edad tan temprana?
Aunque José Smith es odiado y perseguido, se mantiene fiel a su testimonio
Piensa en los muchos y variados relatos de fe y testimonio que hay en las Escrituras. ¿Hay alguna otra persona de las Escrituras cuyo carácter o fortaleza de testimonio admires en gran manera?
Lee José Smith—Historia 1:24 y determina a qué persona de las Escrituras José Smith admiraba y con quien se sentía identificado debido a las persecuciones que había afrontado. Responde las siguientes preguntas en el diario de estudio de las Escrituras:
¿Cómo crees que le haya servido de ayuda a José el ver lo que tenía en común con el apóstol Pablo?
¿Qué lección aprendemos del ejemplo de José Smith al estudiar y meditar las experiencias de Pablo en cuanto a la forma en que debemos responder ante las dificultades?
Una de las lecciones que aprendemos es que, en los momentos difíciles, podemos obtener fortaleza del ejemplo de las personas fieles de las Escrituras. (Sería bueno que anotaras este principio al margen de tu ejemplar de las Escrituras, junto a José Smith—Historia 1:24).
En el diario de estudio de las Escrituras, escribe acerca de una ocasión en la que hayas sido fortalecido al estudiar la experiencia de una persona fiel de las Escrituras.
Este año, mientras estudias Doctrina y Convenios, leerás acerca de muchas personas con las cuales podrás sentirte identificado y cuyos ejemplos podrás usar para hallar la fortaleza que necesites.
Medita en esta frase del testimonio del Profeta que se encuentra en José Smith—Historia 1:25: “Había visto una visión; yo lo sabía, y sabía que Dios lo sabía; y no podía negarlo”.
En el diario de estudio de las Escrituras, responde una o las dos preguntas siguientes:
¿Qué te enseña la frase de José Smith—Historia 1:25 en cuanto al testimonio que tenía José Smith de la Primera Visión?
¿Qué puedes hacer a fin de fortalecer tu testimonio de la Primera Visión?
Repasa José Smith—Historia 1:24 y luego estudia el versículo 25; mientras lo haces, busca doctrinas y principios adicionales que puedan ayudarte cuando afrontes oposición o tengas la tentación de dudar de tu testimonio. En el diario de estudio de las Escrituras, anota las verdades adicionales que descubras.
Elige una de las verdades que hayas encontrado en José Smith—Historia 1:24–25. En el diario de estudio de las Escrituras, contesta las siguientes preguntas basándote en la verdad que hayas elegido.
¿Cómo demostró el profeta José Smith esta verdad en su vida?
¿Cómo podría serte útil esta verdad?
¿Qué influencia tendría en tus decisiones el vivir esta verdad o en qué forma el vivir esta verdad ya ha influido en tu vida?
Otros principios y doctrinas que quizá hayas descubierto en José Smith—Historia 1:24–25 son estos: El conocimiento que recibimos de Dios es verdadero, aun cuando el mundo lo rechace. Debe preocuparnos más lo que piense Dios de nosotros que lo que piensen los hombres. Debemos permanecer fieles a nuestro testimonio aun si se nos odia o persigue por ello.
Recuerda el relato que el presidente Hinckley contó acerca del joven de Londres, Inglaterra, que hizo frente a gran oposición debido a sus creencias religiosas. El presidente Hinckley continúa su relato:
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Presidente Gordon B. Hinckley
“Le pregunté entonces: ‘Si esto te ha costado tanto, ¿por qué no abandonas la Iglesia, regresas a la casa de tus padres y al club de cricket, vuelves al trabajo que era tan importante para ti y a la chica de la que crees estar enamorado?’
“Él no me contestó durante un buen rato. Después, hundiendo la cabeza en las manos, se soltó a llorar con desconsuelo. Al fin, levantó la cabeza y con los ojos empapados, me dijo: ‘No podría hacerlo. Sé que esto es la verdad y, aunque me costara la vida, no podría abandonarlo’.
“Tomó la gorra mojada, fue a la puerta y se hundió en la noche lluviosa, solo, tembloroso y atemorizado, pero resuelto. Mientras lo observaba, pensé en la soledad de la conciencia, la soledad del testimonio, la soledad de la fe, y en la fortaleza y el consuelo del Espíritu de Dios” (“La soledad del liderazgo”, pág. 49).
Escoge una de las verdades que anotaste y ponte la meta de aplicarla en tu vida. (Sería bueno que anotaras esa meta en tu diario de estudio de las Escrituras).
Para terminar, lee José Smith—Historia 1:26 y busca el siguiente principio que José Smith demostró: Si actuamos de acuerdo con los principios que se enseñan en las Escrituras, podemos obtener un testimonio de su veracidad. A medida que pongas en práctica la doctrina o el principio sobre el que escribiste, tu testimonio se fortalecerá y prevalecerás en contra de la oposición y las dificultades que enfrentes.
Escribe lo siguiente en tu diario de estudio de las Escrituras al final de las asignaciones de hoy: