Pablo enseñó la importancia de caridad Aconsejó a los santos corintios que obtuvieran la caridad y la procuraran, así como otros dones espirituales. Pablo enseñó que el don de profecía es mayor que el don de lenguas y se da a los miembros de la Iglesia para que puedan fortalecer a otras personas espiritualmente.
Pablo enseña en cuanto a la importancia de tener caridad
Antes de la clase, anote las siguientes situaciones hipotéticas en la pizarra o proporciónelas a los alumnos en un volante. Invite a un alumno a leer cada situación en voz alta, y pida a los alumnos que consideren si cada una de esas declaraciones los describen a ellos.
Con frecuencia te molesta o te irrita el comportamiento de uno de tus hermanos.
Un compañero de clase es grosero contigo, así que piensas que se justifica que tú también seas grosero con él.
Tienes envidia de los talentos y los logros de un amigo.
A veces te resulta fácil chismear y hablar mal de otras personas de tu cuórum del sacerdocio o de tu clase de las Mujeres Jóvenes.
¿Qué efectos dañinos pueden resultar de esas actitudes o esos comportamientos?
Al estudiar 1 Corintios 13, invite a los alumnos a buscar verdades que les pueden ayudar a evitar actitudes o comportamientos que perturben su propia felicidad y las relaciones positivas con otras personas.
Recuerde a los alumnos que los santos de Corinto estaban comportándose en maneras que conducían a la contención y a divisiones en la Iglesia. En su epístola, Pablo enseñó que los dones espirituales se dan para el beneficio de todos y para ayudar a los miembros de la Iglesia a servirse y fortalecerse mutuamente. Pablo aconsejó a los santos que procuraran “los mejores dones” (1 Corintios 12:7–31).
Invite a un alumno a leer en voz alta 1 Corintios 13:1–3, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para encontrar un atributo y un don del Espíritu que Pablo tenía en alta estima.
¿Qué atributo y don del Espíritu tenía Pablo en alta estima? (La caridad).
Explique que la caridad es “el amor más fuerte, más noble y más elevado, y no tan sólo un sentimiento de afecto” (Guía para el Estudio de las Escrituras, “Caridad”).
¿Cómo describió Pablo a las personas que no tienen caridad aunque tengan otros dones espirituales?
Explique que las frases “metal que resuena” y “címbalo que retiñe” en el versículo 1 se refieren a instrumentos que hacen sonidos fuertes. En el contexto del 1, esas frases pueden indicar hablar palabras que se tornan vacías o que no tienen sentido cuando el que las habla no está motivado por la caridad.
¿Por qué crees que somos nada si no tenemos caridad?
¿Cómo es posible que alguien dé todas sus posesiones para alimentar al hambriento o que muera voluntariamente por la verdad, y aun así no tenga caridad? (Explique que la caridad es más que un acto de generosidad y más que morir por la verdad).
Copie el siguiente cuadro en la pizarra:
Lo que es la caridad o lo que hace
Lo que no es la caridad o lo que no hace
Explique que Pablo describió las cualidades y las características de la caridad para ayudar a los santos corintios a entender mejor ese don. Divida los alumnos en grupos de dos. Invite a los alumnos a leer 1 Corintios 13:4–8 con su compañero y a buscar las descripciones que hizo Pablo de la caridad.
Después de darles suficiente tiempo, invite a los alumnos a pasar a la pizarra y escribir las descripciones que hizo Pablo de la caridad bajo el encabezado correcto de la tabla. Ayude a los alumnos a entender las descripciones, según sea necesario.
¿Quién encaja en la descripción de todos esos atributos de la caridad? (Jesucristo).
Recuerde a los alumnos que el profeta Mormón enseñó que “la caridad es el amor puro de Cristo” (Moroni 7:47). Explique que la caridad se puede describir de dos maneras importantes: (1) El amor de Cristo por nosotros (2) y el amor semejante al de Cristo que nosotros tenemos por los demás. Pida a los alumnos que escojan algunas descripciones de la caridad de la lista de la pizarra y explique a la clase cómo son buenas descripciones de Jesucristo.
¿Qué piensas que quiere decir en el versículo 8 que “la caridad nunca deja de ser”?
Pida a un alumno que lea la siguiente declaración del élder Jeffrey R. Holland, del Cuórum de los Doce Apóstoles:
Imagen
Elder Jeffrey R. Holland
“La verdadera caridad quedó demostrada en forma perfecta y pura en el inagotable y supremo amor expiatorio de Cristo por nosotros… Ésa es la caridad —Su amor puro por nosotros— sin la cual no seríamos nada, no tendríamos esperanza y seríamos hombres y mujeres de lo más desahuciados…
“La vida tiene una porción de temores y fracasos. A veces las cosas se quedan cortas; a veces las personas nos fallan, nuestra economía, nuestros negocios o nuestros gobiernos nos fallan. Pero una hay una cosa en el tiempo y en la eternidad que nunca deja de ser: el amor puro de Cristo” (Christ and the New Covenant, 1997, pág. 337).
¿Cómo puede ser útil recordar que el amor puro de Cristo nunca deja de ser?
Según lo que hemos aprendido en 1 Corintios 13:4–8, ¿qué nos ocurre cuando obtenemos el don de la caridad? Los alumnos pueden reconocer una variedad de verdades, pero asegúrese de que quede claro que al procurar obtener el don espiritual de la caridad, llegamos a ser más como nuestro Salvador, Jesucristo. Escriba esa verdad en la pizarra).
Para resumir 1 Corintios 13:9–12, explique que el apóstol Pablo enseñó en cuanto a por qué los dones espirituales del conocimiento y de la profecía con el tiempo se desvanecerían. Pablo observó que el conocimiento que está disponible en esta vida es incompleto y que obtendremos un conocimiento perfecto en la eternidad.
Invite a un alumno a leer 1 Corintios 13:13 en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio y busquen tres dones del Espíritu que Pablo enseñó que permanecen, o sea, que perseveran o que se mantienen constantes. Invite a los alumnos a dar un informe de lo que encuentren.
¿Cuál enseñó Pablo que es el mayor don espiritual? (Los alumnos deben determinar la siguiente verdad: La caridad es el mayor don del Espíritu. Escriba esa verdad en la pizarra).
¿Qué relación existe entre la fe, la esperanza y la caridad? (La fe conduce a la esperanza, y la esperanza conduce a la caridad).
De acuerdo con lo que hemos aprendido en 1 Corintios 13, ¿por qué piensas que la caridad es el mayor don del Espíritu?
Destaque el consejo de Pablo en 1 Corintios 14:1 de “[seguir] la caridad”.
¿Qué podemos hacer para “[seguir] la caridad” u obtener el don de la caridad?
Invite a un alumno a leer Moroni 7:48 en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para averiguar lo que Mormón enseñó que su pueblo debía hacer para obtener el don de la caridad. Invite a los alumnos a dar un informe de lo que encuentren.
¿En qué forma el tener caridad puede mejorar nuestras relaciones con familiares, amigos y compañeros?
¿Puedes describir una ocasión en la que has visto la caridad en la forma en que alguien te ha tratado a ti o a otras personas? (Considere compartir una experiencia personal).
Invite a los alumnos a escribir en una hoja de papel qué descripciones de la caridad piensan que son las más difíciles para ellos y por qué. Aliente a los alumnos a fijar una meta por escrito sobre lo que harán para seguir procurando obtener más caridad. Pida a los alumnos que la coloquen en un lugar donde la vean a menudo y les recuerde la meta.
Pablo enseña que el don de profecía es mayor que el don de lenguas
Lleve a la clase artículos que se puedan usar para edificar una torre, como bloques, cajas, tarjetas o libros. Invite a un alumno a usar los artículos que llevó para edificar una torre tan alta como sea posible en un minuto. Después, invite al alumno a sentarse. Pida a los alumnos que lean 1 Corintios 14:1–3 en silencio para encontrar la palabra en esos versículos que tiene relación con la demostración de edificar una torre.
¿Qué palabra del versículo 3 tiene relación con edificar una torre? (Edificación Si es necesario, quizás deba explicar que edificar también se puede referir a fortalecer o mejorar espiritualmente).
Al estudiar 1 Corintios 14, invite a los alumnos a buscar un principio que les ayudará a saber cómo pueden edificar a otras personas.
Explique que Pablo se dirigió a los miembros de la Iglesia en Corinto que estaban experimentando el don de lenguas, o la habilidad de hablar en otros idiomas. Invite a un alumno a leer en voz alta 1 Corintios 14:1–3, y pida a la clase que siga la lectura en silencio y que busquen el don espiritual que Pablo aconsejó que sería mejor que los santos buscaran .
¿Qué don del Espíritu aconsejó Pablo que los santos desearan y procuraran?
Explique que “[una] profecía consta de palabras o escritos divinamente inspirados, los cuales se reciben mediante la revelación del Espíritu Santo. El testimonio de Jesús es el espíritu de profecía (Apocalipsis 19:10). Cuando una persona profetiza, habla o escribe aquello que Dios desea que sepa, ya sea para su propio bien o para bien de los demás” (Guía para el Estudio de las Escrituras, “Profecía, profetizar”, scriptures.lds.org).
Escriba la siguiente frase en la pizarra: profetizar = enseñar y testificar por inspiración
Según el versículo 3, ¿cómo el enseñar y testificar por inspiración puede ayudarnos a bendecir a otras personas? (Los alumnos deben distinguir con sus propias palabras un principio semejante al siguiente: Al enseñar y testificar por inspiración, podemos edificar y consolar a los demás.
¿De qué formas te han bendecido y consolado las enseñanzas y el testimonio inspirados de otra persona?
Para resumir 1 Corintios 14:4–30, explique que Pablo advirtió a los santos corintios en cuanto al don de hablar en lenguas. Pablo advirtió que, si se usaba indebidamente, el don de lenguas no edificaría a la Iglesia, y distraería a los miembros de buscar mejores dones espirituales.
Invite a un alumno a leer 1 Corintios 14:31, 33, 40 en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio y que busque qué consejo dio Pablo a los santos en cuanto a profetizar.
¿Qué consejo dio Pablo a los santos acerca de profetizar? (Todos, tanto hombres como mujeres, pueden profetizar, enseñar y testificar. Eso se debe hacer en orden, una persona a la vez).
¿Qué verdad podemos aprender de esos versículos acerca de la Iglesia de Jesucristo? (Los alumnos deben distinguir con sus propias palabras un principio semejante al siguiente: En la Iglesia de Jesucristo, todas las cosas deben hacerse con orden).
¿Por qué piensas que es importante que todas las cosas en la Iglesia se hagan con el orden debido?
Explique que los escritos de Pablo en 1 Corintios 14:34–35 ofrecen un ejemplo de cómo dirigió a los santos en Corinto para mantener orden en la Iglesia. Invite a un alumno a leer 1 Corintios 14:34–35 en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para saber lo que Pablo enseñó a los miembros de la Iglesia en Corinto. Invite a los alumnos a dar un informe de lo que encuentren.
Explique que es difícil entender el propósito del consejo de Pablo, ya que claramente él no prohibió que las mujeres oraran o hablaran en las reuniones de la Iglesia (véase 1 Corintios 11:5). La Traducción de José Smith reemplaza la palabra hablar y hable en los versículos 34 y 35 por gobernar y gobierne. Ese cambio de palabras sugiere la posibilidad de que Pablo estuviera intentando corregir una situación en la que algunas mujeres de Corinto se comportaban de manera indisciplinada o intentaban de forma inapropiada tomar la responsabilidad de dirigir en vez de sostener y seguir a los líderes del sacerdocio (véase Nuevo Testamento, Manual del alumno, [manual del Sistema Educativo de la Iglesia, 2014], pág. 380[000]).
Para concluir la lección, testifique acerca de las verdades que se enseñaron en 1 Corintios 13–14.
El élder Bruce C. Hafen, de los Setenta, enseñó lo siguiente en cuanto a la caridad:
“Es muy posible brindar servicio caritativo —incluso ‘cristiano’— sin desarrollar un carácter cristiano profundamente arraigado y permanente. Pablo entendía eso cuando advirtió en contra de dar todos los bienes de uno para alimentar al hambriento sin tener verdadera caridad… Podemos dar sin amar, pero no podemos amar sin dar. Si nuestra relación vertical con Dios es completa, entonces, como fruto de esa relación, la relación horizontal que tenemos con nuestros semejantes también será completa. Entonces actuamos de forma caritativa hacia otras personas, no solamente porque pensamos que debemos hacerlo, sino porque somos así” (The Broken Heart: Applying the Atonement to Life’s Experiences, 1989, págs. 196–197).
Como se encuentra escrito en 1 Corintios 13:4–5, Pablo describió varios atributos de la caridad; en otras palabras, las personas que tienen caridad hacen las cosas y tienen las características que él describió. La frase “es sufrida” describe a alguien que soporta sus pruebas con paciencia. “… no tiene envidia” describe a alguien que no está celoso de otras personas. “… no se jacta” describe a alguien que no es vanidoso. “… no se envanece” describe la cualidad de ser humilde. “… no se comporta indebidamente” describe a alguien que no es grosero ni desconsiderado. “… no busca lo suyo” describe la cualidad de poner a Dios y a los demás antes de uno mismo. “… no se irrita” describe a alguien que no se enoja fácilmente. “… todo lo cree” describe a alguien que acepta toda la verdad.
1 Corintios 13:8. Los dones de profecía, lenguas y conocimiento “cesarán” y se “acabarán”
El élder Bruce R. McConkie, del Cuórum de los Doce Apóstoles, explicó por qué los dones de profecía y de lenguas con el tiempo cesarán, y por qué el don del conocimiento se acabará:
“¿Cesarán los dones del Espíritu? ¿Habrá un día en que los santos no poseerán más los dones de profecía y de lenguas? ¿O el don del conocimiento? Sí, en el sentido que estos serán absorbidos por algo mayor, y ya no se necesitarán en el día perfecto. Cuando los santos conozcan todos los idiomas, ninguno podrá hablar en una lengua desconocida. Cuando los santos lleguen a ser como Dios y sepan todas las cosas, pasadas, presentes y futuras, no habrá necesidad u ocasión de profetizar el futuro” (Doctrinal New Testament Commentary, 3 tomos, 1965–1973, tomo II, pág. 380).
El élder Robert J. Whetten, de los Setenta, explicó:
“Al igual que la fe, el amor cristiano es un don del Espíritu que se da de acuerdo con los principios de rectitud personal y de acuerdo con nuestro nivel de obediencia a las leyes sobre las cuales se basa. Y al igual que la fe, el amor se tiene que practicar para que crezca” (“Verdaderos seguidores”,Liahona, julio de 1999, pág. 34).
El élder Dallin H. Oaks, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó:
“La caridad, ‘el amor puro de Cristo’ (Moroni 7:47), no es un acto sino una condición o estado del ser. La caridad se obtiene mediante una sucesión de actos que resultan en la conversión. La caridad es algo que uno llega a ser” (“El desafío de lo que debemos llegar a ser”, Liahona, enero de 2001, pág. 42).
El élder Dallin H. Oaks, del Cuórum de los Doce Apóstoles, explicó la diferencia que existe entre los miembros de la Iglesia que tienen el don espiritual de profecía y aquellos a quienes se llama a servir en un oficio profético:
“En el sentido que se usa para hablar de dones espirituales, un profeta es alguien que testifica de Jesucristo, enseña la palabra de Dios y exhorta al pueblo del Señor. En el sentido de las Escrituras, profetizar significa mucho más que predecir el futuro…
“Es importante que entendamos la diferencia que existe entre un profeta, que tiene el don espiritual de profecía y el profeta, que posee el oficio profético” (“Spiritual Gifts”, Ensign, septiembre de 1986, pág. 71).
“Los apóstoles y otros hablaron en ‘otras lenguas’ en el día de Pentecostés (Hechos 2:4–8). En esa ocasión, el don de lenguas se manifestó mediante los siervos de Dios que enseñaban el Evangelio en lenguas que conocían los que escuchaban, pero que desconocían los que hablaban (véase el comentario de Hechos 2:5–11). Otra manifestación del don de lenguas tiene lugar cuando el Espíritu inspira a una persona a hablar en un idioma que es desconocido tanto para el orador como para los que escuchan (véase de Bruce R. McConkie, Doctrinal New Testament Commentary, tomo II, pág. 383)” (Nuevo Testamento, Manual del alumno, [manual del Sistema Educativo de la Iglesia, 2014], pág. 379[000]).
Para más información en cuanto a advertencias importantes en cuanto al propósito y el uso del don de lenguas, véase de Robert D. Hales, “Gifts of the Spirit”, Ensign, febrero de 2002, págs. 14–15.