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Unidad 27, Día 1: 2 Timoteo


Unidad 27: Día 1

2 Timoteo

Introducción

En su segunda epístola a Timoteo, el apóstol Pablo enseñó que el miedo no proviene de Dios, y aconsejó a Timoteo que no se avergonzara de su testimonio de Jesucristo. Lo alentó para que aguantara sus pruebas con fidelidad y le instruyó que enseñara a los santos que se arrepintieran. Pablo explicó que, aunque la apostasía y la maldad serían comunes tanto en su época como en los últimos días, Timoteo debía permanecer fiel a las verdades que ya había aprendido. Pablo también enseñó en cuanto al propósito de las Escrituras. Al terminar su carta, alentó a Timoteo a cumplir su ministerio diligentemente.

2 Timoteo 1

Pablo aconseja a Timoteo que no se avergüence del Evangelio

Piensa en una ocasión en la que tuviste miedo. ¿Dónde estabas? ¿Que estabas haciendo?

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President Gordon B. Hinckley

El presidente Gordon B. Hinckley explicó el impacto que el miedo puede tener en nosotros: “¿Quién de nosotros puede decir que no ha sentido temor? No sé de nadie que se haya salvado completamente de esto. Algunas personas, por supuesto, experimentan el miedo a un nivel mucho más alto que otras. Algunos son capaces de elevarse por encima de él con rapidez, pero otros quedan atrapados, son derribados por él y vencidos. Sufrimos temor al ridículo, temor al fracaso, temor a la soledad, temor a la ignorancia. Algunos le temen al presente, otros al futuro. Algunos llevan la carga del pecado y darían casi cualquier cosa por librarse de esas cargas, pero temen cambiar su vida. Reconozcamos que el temor no viene de Dios; más bien, este elemento corrosivo y destructivo viene del adversario de la verdad y la rectitud. El temor es la antítesis [lo opuesto] de la fe. Es corrosivo en sus efectos, incluso mortal” (véase “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía”, Liahona, febrero de 1985, pág. 21).

¿Qué efecto podría tener el miedo en nuestra habilidad de vivir el Evangelio?

Al estudiar 2 Timoteo 1, busca un principio que te ayude a vencer el miedo.

Mientras Pablo estaba encarcelado en Roma cerca del final de su vida, escribió su segunda epístola a Timoteo. Como está escrito en 2 Timoteo 1:1–5, Pablo expresó su deseo de ver a Timoteo y recordó la fe sincera de este.

Lee 2 Timoteo 1:6–8 para ver lo que Pablo le recordó a Timoteo que hiciera para superar el miedo.

Es probable que el “don de Dios” que se recibe por la imposición de manos (2 Timoteo 1:6) se esté refiriendo al Espíritu Santo. Pablo aconsejó a Timoteo que avivara el don del Espíritu Santo, o que invitara al Espíritu Santo a estar con él.

De acuerdo con 2 Timoteo 1:7, ¿qué bendiciones se pueden recibir por tener el Espíritu con nosotros?

Pablo hizo referencia al miedo del mundo, el cual produce ansiedad, inseguridad y pánico, y es diferente a lo que las Escrituras llaman el “temor de Jehová” (Proverbios 9:10). Tener temor al Señor es “sentir reverencia y admiración por Él y obedecer sus mandamientos” (Guía para el Estudio de las Escrituras, “Temor”, scriptures.lds.org). Nuestro temor, o reverencia, al Señor nos puede fortalecer contra el temor al mundo.

Un principio que podemos aprender del consejo que Pablo dio a Timoteo es que al procurar fervientemente tener el Espíritu con nosotros, podemos superar el temor y no avergonzarnos de nuestro testimonio de Jesucristo.

  1. Contesta las siguientes preguntas en tu diario de estudio de las Escrituras:

    1. ¿Cuáles son algunas maneras en las que puedes mostrar que no te avergüenzas de tu testimonio de Jesucristo?

    2. ¿Cuándo te ha ayudado el Espíritu a superar el temor del mundo, o te ha dado valor para mantenerte firme en tu testimonio de Jesucristo?

Medita en cuanto a lo que puedes hacer para invitar al Espíritu a estar contigo para que puedas superar el temor del mundo y no avergonzarte de tu testimonio de Jesucristo.

Como está escrito en 2 Timoteo 1:9–18, Pablo instó a Timoteo a que permaneciera fiel a la doctrina verdadera. Testificó del poder salvador de Jesucristo, que hace posible la Resurrección, la inmortalidad y la vida eterna.

2 Timoteo 2

Pablo instruye a Timoteo para que soporte las dificultades con fidelidad

Como está escrito en 2 Timoteo 2:1–9, Pablo instó a Timoteo a que confiara en el Evangelio y soportara las dificultades como lo haría un buen soldado. Pablo dijo que él pasó por muchas pruebas por ser discípulo de Cristo.

Lee 2 Timoteo 2:10–12 para ver lo que Pablo dijo en cuanto a por qué soportó tantas dificultades. Los “escogidos” (versículo 10) se refiere a los miembros fieles de la Iglesia (véase D. y C. 29:7), y la palabra perseveramos en el versículo 12 se refiere a permanecer constantes.

Un principio que podemos aprender de esos versículos es que al soportar las dificultades y permanecer fieles al Señor, nos podemos ayudar a nosotros mismos y a otras personas a obtener la salvación mediante Jesucristo.

¿Cómo podemos ayudar a otras personas a obtener la salvación mediante Jesucristo al soportar fielmente nuestras propias pruebas?

En 2 Timoteo 2:13–19, Pablo aconsejó a Timoteo que recordara a los santos que evitaran la contención y que se “[apartaran] de [la] iniquidad” (versículo 19). Podrías marcar la última frase en 2 Timoteo 2:19.

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goblets, barrels

Para ayudar a Timoteo a entender la necesidad que tenían los santos de arrepentirse, Pablo usó diferentes tipos de recipientes como una metáfora para los miembros de la casa, o la Iglesia, de Jesucristo.

Lee 2 Timoteo 2:20 para saber qué tipo de de recipientes están en “una casa grande”. La frase “unos para uso honroso, y otros para uso deshonroso” insinúa que algunos miembros de la Iglesia eran dignos y se habían dedicado a propósitos nobles, mientras que otros no lo habían hecho.

Lee 2 Timoteo 2:21 para averiguar lo que hace que alguien sea un “instrumento… útil para el Señor”. La frase “si alguno se limpia de esas cosas” se refiere a llegar a ser completamente limpio de la iniquidad (véase 2 Timoteo 2:19).

Un principio que podemos aprender de la metáfora de Pablo es que si nos despojamos de la iniquidad, podemos servir mejor al Señor.

¿Qué podemos hacer para despojarnos de la iniquidad?

Lee 2 Timoteo 2:22 para encontrar algunas cosas que Pablo escribió que podemos hacer para despojarnos de la iniquidad.

El élder Jeffrey R. Holland, del Cuórum de los Doce Apóstoles, dio un ejemplo de cómo ese principio se aplica a los misioneros:

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Elder Jeffrey R. Holland

“…Pues bien, el Señor ha trazado líneas de dignidad para quienes son llamados a trabajar con Él en esta obra. ¡Ningún misionero puede desafiar a otra persona a que se arrepienta de una transgresión sexual, de usar lenguaje profano o de ver pornografía si él mismo no lo ha hecho! No pueden hacer eso; el Espíritu no los acompañará y las palabras se les atorarán en la garganta cuando traten de decirlas. Ustedes no pueden andar por lo que Lehi llamó ‘senderos prohibidos’ [1 Nefi 8:28] y esperar guiar a otras personas en ese camino ‘estrecho y angosto’ [2 Nefi 31:18]; no puede hacerse”.

“Pero hay una respuesta a este reto para ustedes, de la misma manera que la hay para el investigador al que ustedes enseñarán. No importa quiénes sean ni lo que hayan hecho, pueden ser perdonados. Cada uno de ustedes… puede abandonar cualquier transgresión con la que batallen. Ése es el milagro del perdón; es el milagro de la expiación del Señor Jesucristo. Pero no lo pueden hacer sin un compromiso activo hacia el Evangelio, y no lo pueden hacer sin arrepentirse cuando sea necesario. Estoy pidiéndoles… que sean activos y puros. Si fuese necesario, les pido que se activen y que se purifiquen” (“Somos los soldados”, Liahona, noviembre de 2011, pág. 45).

Medita en por qué es esencial ser limpios de pecado al proclamar el Evangelio. Piensa en cualquier pecado del que tengas que arrepentirte para poder servir mejor al Señor. Recuerda que tu obispo o presidente de rama puede ser un recurso importante de ayuda al esforzarte para llegar a ser limpio y puro.

2 Timoteo 3

Pablo describe los tiempos difíciles de los últimos días

¿Te ha preocupado alguna vez que tú o tus futuros hijos no puedan soportar la maldad del mundo de nuestros días?

El apóstol Pablo le enseñó a Timoteo a superar los peligros del mundo. Lee 2 Timoteo 3:1–5 para buscar algunos de los peligros que Pablo le dijo a Timoteo que tendríamos o de los que seríamos testigos en nuestra vida. Quizás sería bueno que usaras las notas al pie de página para entender algunas palabras difíciles.

Piensa en una ocasión reciente en la que quizás hayas presenciado algunos de esos comportamientos peligrosos.

En 2 Timoteo 3:6–13, Pablo continuó describiendo esos peligros, y profetizó que en los últimos días incluso empeorarían.

Fíjate en 2 Timoteo 3:7 que Pablo menciona a las personas “que siempre están aprendiendo, pero nunca pueden llegar al conocimiento de la verdad”. ¿Cuáles son algunas filosofías o ideas que prevalecen hoy en día pero que son contrarias a la verdad que Dios ha revelado a través de Sus profetas?

Después de describir esos peligros, Pablo brindó consejo a Timoteo, y a nosotros, acerca de cómo superar esos peligros espirituales.

Lee 2 Timoteo 3:14–17 para ver el consejo de Pablo. (Ten en cuenta que 2 Timoteo 3:15–17 es un pasaje de dominio de las Escrituras. Si lo deseas, márcalo de una forma especial para que puedas localizarlo en el futuro).

Piensa en lo que podría significar “Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste” (2 Timoteo 3:14).

De esos versículos aprendemos los dos principios siguientes: Si continuamos en las verdades que hemos aprendido de fuentes de confianza y en las Escrituras, podremos superar el peligro espiritual de los últimos días. Al estudiar las Escrituras, podemos aprender la doctrina y recibir corrección e instrucción que nos ayudarán a crecer hacia la perfección.

  1. Escribe en tu diario de estudio de las Escrituras acerca de alguna ocasión en la que las Escrituras te han ayudado en una o más de las siguientes formas:

    1. Para entender una doctrina del Evangelio

    2. Al brindar reprobación o corrección en cuanto a algo en tu modo de pensar, tus decisiones o tu comportamiento que no era correcto

    3. Al proporcionar una respuesta a una oración o al dar instrucción en cuanto a cómo podrías solucionar un problema

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Dominio de las Escrituras—2 Timoteo 3:15–17

  1. Toma un momento y memoriza 2 Timoteo 3:16–17. Después, escribe en tu diario de estudio de las Escrituras: He memorizado 2 Timoteo 3:16–17 Piensa en cómo podrías estudiar tus Escrituras esta semana de manera que invite las promesas de esos versículos a tu vida.

2 Timoteo 4

Pablo declara que ha peleado una buena batalla y le encarga a Timoteo que siga predicando

Es probable que 2 Timoteo fuera la última carta que escribió el apóstol Pablo antes de su muerte. Lee 2 Timoteo 4:1–5 para descubrir dos cosas: (1) El consejo de Pablo a Timoteo y (2) la profecía de Pablo en cuanto al futuro de la antigua Iglesia cristiana. Usa las notas al pie de página para entender lo que leas. La frase “que instes a tiempo y fuera de tiempo” en el versículo 2 significa hacer con urgencia la obra del Señor y reprender o corregir a aquellos que no lo hacen (véase la Traducción de José Smith, 2 Timoteo 4:2 [en la nota a al pie de página de 2 Timoteo 4:2]).

Escribe lo que encuentres en el siguiente cuadro:

Consejo de Pablo a Timoteo

Profecía de Pablo en cuanto al futuro de la antigua Iglesia cristiana

¿Por qué piensas que Pablo alentó a Timoteo a que continuara predicando y ministrando al pueblo aunque sabía que muchos se apartarían de la verdad?

Lee 2 Timoteo 4:6–8 para averiguar lo que Pablo escribió en cuanto a sus propios esfuerzos de propagar el Evangelio.

Fíjate en que las referencias deportivas de Pablo de luchar una buena batalla y terminar la carrera describen que completó su misión fielmente. De acuerdo con el versículo 8, ¿qué sabía Pablo que le esperaba después de la muerte?

De esos versículos aprendemos el siguiente principio: Si permanecemos fieles en todo lo que el Señor requiere de nosotros, recibiremos una corona de justicia. La “corona de justicia” incluye llegar a ser como nuestro Padre Celestial.

  1. En tu diario de estudio de las Escrituras, haz una lista de los requisitos que el Señor ha dado a los jóvenes de la Iglesia para ayudarlos a llegar a ser más como el Padre Celestial. (Si necesitas ayuda, consulta el librito Para la Fortaleza de la Juventud). Después escribe las respuestas a las siguientes preguntas:

    1. ¿Por qué podrías optar por dejar de ser fiel a algunos de esos requisitos?

    2. ¿A quién conoces que, como Pablo, sea un buen ejemplo de permanecer fiel, aun cuando sea difícil? ¿Qué has hecho tú que ejemplifique ese principio?

Como está registrado en 2 Timoteo 4:9–22, Pablo terminó su carta y explicó que aunque se había sentido solo algunas veces en su obra, sabía que el Señor estaba con él y le fortalecía.

Recuerda permanecer fiel en todo lo que el Señor requiera de ti. Si lo deseas, escribe cualquier impresión o inspiración del Padre Celestial que podrías haber tenido durante esta lección. Podrías ponerte la meta de actuar conforme a tus impresiones.

  1. Escribe lo siguiente en el diario de estudio de las Escrituras al final de las asignaciones de hoy:

    He estudiado 2 Timoteo y he terminado esta lección el (fecha).

    Otras preguntas, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con el maestro: