Escuela Dominical: Doctrina del Evangelio
‘Ensancha el sitio de tu tienda’


Lección 40

“Ensancha el sitio de tu tienda”

Isaías 54–56; 63–65

Objetivo

Instar a los miembros de la clase a fortalecer las estacas de Sión y a prepararse para la Segunda Venida y para el Milenio.

Preparación

  1. Estudie los pasajes de Isaías 54–56 y 63–65, y ore al respecto.

  2. Si va a emplear la actividad para despertar la atención, lleve a la clase una estaquilla de tienda de campaña (carpa).

  3. Si la tiene disponible, utilice la lámina “Jesucristo resucitado” durante la presentación de la lección (62187; Las bellas artes del Evangelio 239).

Sugerencias para el desarrollo de la lección

Actividad para despertar la atención

Si lo desea, utilice la actividad siguiente (u otra de su preferencia) para comenzar la lección.

Dibuje una tienda de campaña en la pizarra, similar a la que aparece en la ilustración de abajo; luego, muestre a la clase la estaquilla que haya llevado y haga las siguientes preguntas:

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• ¿Por qué necesita estacas esta tienda? ¿Qué pasaría si no estuviera sostenida por las estacas?

• ¿Qué representa la tienda que se menciona en Isaías 54:2? (La Iglesia de Jesucristo.) ¿Qué representan las estacas de las que habla el versículo?

El presidente Ezra Taft Benson dijo:

“El término estaca se usa como expresión simbólica. Imaginad una gran tienda de campaña sostenida por cuerdas, cada una de ellas atada a una estaca que se encuentra firmemente clavada en la tierra.

“Los Profetas compararon a la Sión de los últimos días con una gran tienda que cubriera toda la tierra y que estuviera sostenida por cuerdas atadas a estacas. En nuestra época, por supuesto, las estacas son organizaciones locales que se encuentran en todo el mundo. En la actualidad, se está congregando a Israel en todas las estacas de Sión” (“Fortalece tus estacas”, Liahona, agosto de 1991, pág. 3).

Diga a la clase que las primeras estacas de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días se organizaron en 1834, en Kirtland, Ohio, y en el condado de Clay, Misuri. Al crecer la Iglesia, se agregaron más estacas, según lo que había mandado el Señor (D. y C. 101:20–21). Actualmente hay centenares de estacas esparcidas por todo el mundo.

Explique a los miembros de la clase que en esta lección analizarán las formas en que se deben fortalecer las estacas de Sión. También se tratarán las extraordinarias enseñanzas de Isaías sobre la Segunda Venida y sobre el Milenio.

Al enseñar los siguientes pasajes de las Escrituras, analice la forma en que se podrían poner en práctica en el diario vivir. Aliente a los miembros de la clase a relatar experiencias que se relacionen con los principios de las Escrituras.

1. “Alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas” (Isaías 54:2).

• ¿Cuál será el significado de la frase “Ensancha el sitio de tu tienda” (Isaías 54:2)? (El Señor quiere que los miembros de la Iglesia den a conocer el Evangelio a muchas personas, a fin de que éste cubra la tierra. Isaías profetizó que en los últimos días la Iglesia crecería rápidamente y que mucha gente de todo el mundo se convertiría a la verdad [Isaías 54:3].)

• ¿Qué otro consejo se da en el versículo 3 con respecto a la tienda, o sea, la Iglesia? ¿Qué debemos hacer para seguir ese consejo? Si lo desea, haga en la pizarra un resumen de este análisis, tal como se ilustra más abajo.

El consejo de Isaías

Lo que nosotros debemos hacer

Ensanchar las cortinas de la tienda y alargar las cuerdas.

Servir en el campo misional como misioneros regulares; dar a conocer el Evangelio a amigos y a conocidos.

Fortalecer las estacas de la tienda.

Fortalecer las estacas locales.

• ¿Qué podemos hacer para fortalecer la estaca en la que vivimos? (Entre las respuestas, quizás mencionen lo siguiente: Hacernos más fuertes espiritualmente, influir en nuestros familiares y amigos para que hagan lo mismo; prestar servicio a nuestros vecinos y conocidos, sean o no sean miembros de la Iglesia; y aceptar los llamamientos que nos extiendan los líderes del sacerdocio para prestar servicio en la Iglesia.)

• ¿De qué manera bendicen las estacas a las personas? (Véase D. y C. 115:5–6.) ¿En qué sentido son las estacas de Sión una defensa y un refugio para nosotros?

2. “Te recogeré con grandes misericordias” (Isaías 54:7).

• A pesar de que Israel estuvo muchos años esparcido, el Señor prometió que lo recogería en los últimos días para congregarlo en la Iglesia verdadera (Isaías 54:4–10). ¿Qué aprendemos sobre el Señor en esos versículos? ¿Qué bendiciones precisas promete el Señor a sus siervos justos? (Véase Isaías 54:13–14, 17.) ¿Por qué son importantes estas promesas?

• ¿A quiénes se invita a buscar refugio congregándose con los santos? (A todos los hijos de nuestro Padre Celestial.) Repasen los siguientes versículos de Isaías en los cuales se describen grupos de personas que el Señor desea que vengan a Él y encuentren protección en el Evangelio:

  1. Isaías 55:1–3. (Todos los sedientos.) ¿A qué clase de sed se refieren esas palabras? ¿Qué pasa cuando intentamos satisfacer la sed espiritual gastando dinero y esfuerzo en cosas temporales? ¿Cómo se puede saciar por completo nuestra sed espiritual? (Véase 2 Nefi 9:50–51; 3 Nefi 20:8.)

  2. Isaías 55:6–7. (Los inicuos que se arrepientan.) ¿Qué promesa se hace a los que se arrepientan?

  3. Isaías 56:3, 5–8. (Los extranjeros que no conozcan al Señor.) ¿Qué debe hacer el extranjero para que el Señor lo acepte?

• ¿Qué nos enseñan esos versículos sobre la misericordia del Señor? ¿Qué enseñan sobre la forma en que debemos considerar a todos los hijos de nuestro Padre Celestial?

• Isaías escribió que la palabra de Dios nos nutre el alma como la lluvia y la nieve nutren las semillas (Isaías 55:10–13). ¿De qué manera nos nutre el alma la palabra de Dios? (Véase Alma 32:28, 41.)

3. El Milenio será una época de paz y de gozo.

• A lo largo de sus escritos, Isaías testificó que aunque en este mundo hubiera luchas, tentaciones y sufrimiento, al fin el bien triunfaría sobre el mal, y el futuro estaría lleno de gozo para los justos; también oró fervientemente por la segunda venida del Salvador, que traerá el castigo a los inicuos y gran regocijo a los justos (Isaías 64). ¿Qué mensaje de esperanza y de gozo contiene Isaías 64:1–4? ¿Qué efecto producen esas palabras para aumentar en ustedes el deseo de perseverar hasta el fin sirviendo al Señor?

• Los últimos capítulos del registro de Isaías presentan un hermoso cuadro del Milenio, o sea, el período de mil años de paz que traerá la segunda venida del Salvador. Según lo que está escrito en Isaías 65:17–25, ¿qué condiciones existirán durante el Milenio? (Si lo desea, anótelas en la pizarra; véase también Isaías 11:6–9.)

  1. El Señor creará nuevos cielos y nueva tierra (Isaías 65:17).

  2. Habrá gran alegría y no habrá más lloro para el pueblo del Señor (Isaías 65:18–19).

  3. La gente no morirá joven, sino que vivirá cien años (Isaías 65:20).

  4. Las personas disfrutarán la obra de sus manos (Isaías 65:21–23).

  5. Las oraciones recibirán respuesta inmediata (Isaías 65:24).

  6. Los animales no se atacarán entre sí (Isaías 65:25).

• ¿Qué nos enseña Isaías 63:7–9 sobre la bondad y el amor infinitos del Señor? (Pida a los miembros de la clase que mencionen palabras y frases de esos versículos en las que se ponga de manifiesto el amor que el Salvador nos tiene. Si lo desea, anote las respuestas en la pizarra.) ¿De qué modo les ha demostrado el Salvador a ustedes “la multitud de sus piedades”?

Conclusión

Testifique a la clase que si fortalecemos las estacas de Sión y damos a conocer el Evangelio al mundo, nos esperan las riquezas de la eternidad. Podremos, además, contemplar con expectativa la segunda venida del Salvador y la paz y el gozo que reinarán en el Milenio. Las profecías de Isaías nos hacen recordar que es un privilegio servir al Señor y que Él bendice a Sus discípulos.

Otros conceptos didácticos

El siguiente material complementa las sugerencias para el desarrollo de la lección. Si lo desea, utilice uno o más de estos conceptos como parte de la lección.

1. La verdadera ley del ayuno (Isaías 58:3–12)

• ¿Qué aprendemos sobre el ayuno en el capítulo 58 de Isaías? ¿Cuáles son los elementos de un verdadero ayuno? (Véase Isaías 58:3–7.)

Uno de los elementos de un verdadero ayuno es una generosa ofrenda de ayuno. El presidente Spencer W. Kimball dijo: “Yo creo que cuando tenemos en abundancia, como muchos de nosotros tenemos, debemos ser muy, pero muy generosos… en lugar de dar simplemente la cantidad exacta de dos comidas correspondientes a nuestro ayuno, tal vez deberíamos dar mucho más, incluso diez veces más, cuando podamos hacerlo” (citado en Guía de estudio personal del Sacerdocio de Melquisedec, Número 3, 1991, pág. 64).

• ¿Qué bendiciones se prometen en el capítulo 58 de Isaías por obedecer la ley del ayuno?

  1. Nos fortalecemos para resistir la tentación (Isaías 58:6).

  2. Nuestras cargas se hacen más livianas (Isaías 58:6).

  3. Obtendremos luz y salvación (Isaías 58:8).

  4. Nos volvemos más humildes y dispuestos a invocar al Señor (Isaías 58:9).

  5. Al ayudar al hambriento y al necesitado, recibiremos luz (Isaías 58:10).

  6. Recibiremos continuamente guía y fortaleza del Señor (Isaías 58:11).

  7. Nuestra alma se saciará en las sequías y seremos “como manantial de aguas, cuyas aguas nunca faltan” (Isaías 58:11).

Inste a los miembros de la clase a mencionar ejemplos de las Escrituras, de la historia de la Iglesia o de su propia experiencia en los que se hayan manifestado las bendiciones que se reciben al obedecer la ley del ayuno. (Véase Guía para el Estudio de las Escrituras, pág. 22.)

• ¿Cómo lograremos ser más diligentes para obedecer la ley del ayuno?

2. Descripción del ministerio del Salvador

• El pasaje de Isaías 61:1–3 es una declaración del llamamiento y del ministerio del Salvador. A principios de Su ministerio en Nazaret, Él mismo citó esos versículos y dijo a la gente: “Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros” (véase Lucas 4:14–21). ¿Qué enseñan esos versículos sobre el carácter y sobre la misión de Jesucristo?

3. La segunda venida de Cristo (Isaías 63:1–6)

• En Isaías 63:1–6 se describe la segunda venida del Salvador. ¿De qué color serán los vestidos del Salvador cuando venga en Su gloria? (Véase Isaías 63:2; Apocalipsis 19:11–13; D. y C. 133:46–48.) ¿Qué simboliza el color rojo? (La sangre que Él derramó cuando sufrió por nuestros pecados en Getsemaní y en la cruz.)