Seminario
Unidad 28: Día 2, Jeremías 42–52


Unidad 28: Día 2

Jeremías 42–52

Introducción

Un pequeño remanente del pueblo de Judá no fue llevado cautivo por el ejército babilónico. Pidieron el consejo de Jehová concerniente a si debían salir de Judá e ir a Egipto. A petición suya, Jeremías oró para conocer la voluntad de Jehová para ellos, y Jehová les prometió que estarían a salvo si permanecían en la tierra de Judá. Jeremías profetizó además que si el pueblo desobedecía a Jehová e iba a Egipto, sería destruido. Jeremías predijo la destrucción de muchas naciones, entre ellas Babilonia. Testificó además de la fortaleza del Redentor para liberarlos.

Jeremías 42–44

Jeremías advierte al remanente de Judá que no vaya a Egipto

¿Cuáles son algunas de las formas en que la juventud de la Iglesia podría sentirse tentada a desobedecer el consejo del Señor que recibe a través de los profetas de nuestros días?

A medida que estudies Jeremías 42–44, busca principios que te ayuden a entender las consecuencias de escoger el obedecer o desobedecer el consejo del Señor que Él da a través de Sus profetas.

Después del segundo ataque del ejército babilónico contra Jerusalén, éste se llevó a la mayoría de los judíos a Babilonia. Un pequeño grupo de judíos, conocido como un remanente, quedó atrás en Jerusalén. Varias personas de ese remanente creían que si iban a Egipto estarían a salvo de más abusos por parte del ejército babilónico.

En Jeremías 42:1–3 aprendemos que los judíos que permanecieron en Jerusalén le pidieron a Jeremías que orara a Jehová para saber si debían ir a Egipto o quedarse en Jerusalén.

Lee Jeremías 42:4 para conocer la respuesta de Jeremías. La frase “no os reservaré palabra alguna”, en el versículo 4, significa que Jeremías se comprometió a revelar audazmente la voluntad de Dios al pueblo.

Lee Jeremías 42:5–6 para averiguar la forma en que el pueblo reaccionó a Jeremías.

¿Qué dijo el pueblo acerca de cómo les iría si obedecían el consejo que Jehová les había dado a través de Su profeta?

  1. Realiza las siguientes asignaciones en tu diario de estudio de las Escrituras:

    1. Responde la siguiente pregunta: ¿Qué piensas que significa el que “nos vaya bien” cuando seguimos el consejo del Señor?

    2. Escribe por lo menos tres ejemplos de personas de las Escrituras que fueron bendecidas por seguir el consejo que dio el Señor a través de Sus profetas.

En la siguiente declaración, subraya las palabras o frases que usó la Primera Presidencia para describir cómo les irá bien a los que sigan el consejo que da el Señor a través de Sus profetas en nuestros días: “Les prometemos que, si guardan los convenios que han hecho y estas normas, serán bendecidos con la compañía del Espíritu Santo, su fe y testimonio serán más firmes y disfrutarán de mayor felicidad” (Para la Fortaleza de la Juventud, folleto, 2011, pág. II).

En Jeremías 42:7–8 aprendemos que después de diez días, Jeremías juntó al pueblo para revelar la voluntad de Dios acerca de si debían o no ir a Egipto.

Lee Jeremías 42:9–12 en busca de cómo le iría bien al pueblo si escuchaba y obedecía la palabra que Dios dio a través de Jeremías.

Lee Jeremías 42:13–17, y observa la advertencia que Jeremías dio a los judíos acerca de lo que ocurriría si no obedecían el mandato de Jehová de permanecer en esa tierra.

En esos versículos aprendemos que cuando no hacemos caso del consejo que el Señor da a través de Sus profetas, acarreamos consecuencias negativas para nosotros.

  1. Contesta las siguientes preguntas en tu diario de estudio de las Escrituras:

    1. ¿Qué consecuencias has visto que las personas acarrean sobre sí cuando han hecho caso omiso del consejo que da el Señor por medio de Sus profetas?

    2. Por el contrario, ¿qué bendiciones has visto al obedecer o al ver a otras personas obedecer el consejo que el Señor da por medio de Sus profetas?

Lee Jeremías 42:19–22 y averigua lo que Jeremías le dijo al pueblo después de decirle que se quedara en la tierra de Judá. La frase “habéis hecho errar vuestras almas”, en el versículo 20, significa que los del pueblo mintieron cuando le dijeron a Jeremías que obedecerían las palabras de Jehová.

En el versículo 22, podrías marcar las consecuencias que el pueblo acarrearía sobre sí mismo al no hacer caso de las palabras que Jehová les dio por medio de Jeremías.

  1. Responde la siguiente pregunta en tu diario de estudio de las Escrituras: ¿Por qué crees que a veces las personas eligen no hacer caso del consejo de los profetas, aun cuando se les ha advertido en cuanto a las consecuencias?

Lee Jeremías 43:1–4 y fíjate cómo reaccionó el pueblo al consejo de Jeremías. Presta atención especial a la excusa que dieron los hombres arrogantes por desobedecer las palabras de Jeremías.

Medita en las excusas que dan los arrogantes en nuestros días por desobedecer las palabras del profeta. Medita en lo bien que estás obedeciendo el consejo de los profetas del Señor. Establece una meta que te ayude a seguir mejor el consejo que da el Señor a través de Sus profetas.

En Jeremías 43:5–13 aprendemos que el remanente de los judíos no sólo desobedeció a Jehová y fue a Egipto, sino que también se llevó a Jeremías. Después de llegar a Egipto, Jeremías escondió grandes piedras enfrente de la casa de Faraón y profetizó que cuando el ejército babilónico destruyera Egipto, el rey de Babilonia haría su trono en ese lugar.

Lee el resumen del capítulo 44 de Jeremías en busca de lo que profetizó Jeremías acerca de los judíos que vivían en Egipto.

Los judíos en Egipto rehusaron escuchar a Jeremías, y le dijeron que se sentían más bendecidos cuando adoraban a los dioses falsos de Egipto que cuando dejaban de adorarlos.

Lee Jeremías 44:22–23 y averigua lo que Jeremías les dijo a los judíos en Egipto. En el versículo 23, la frase “quemasteis incienso” se refiere a adorar dioses falsos, y la frase “ha venido sobre vosotros este mal” se refiere a la destrucción de Jerusalén que se describe en el versículo 22.

Jeremías 45–52

Jeremías profetiza la destrucción de varias naciones; también testifica de la fortaleza del Redentor para liberar al pueblo del cautiverio

Piensa en una ocasión en que te sentiste desanimado por causa de la oposición que recibiste al tratar de hacer lo correcto.

¿Qué te ayudó a tener esperanza durante esos momentos de desánimo?

En Jeremías 45 aprendemos que Baruc, el escriba de Jeremías, se sentía desanimado, y Jehová le envió un mensaje de ánimo a través de Jeremías.

En Jeremías 46–52, Jeremías profetizó en cuanto a la destrucción de varias naciones, pero también compartió mensajes de esperanza. A medida que estudies Jeremías 46–52, observa una verdad que ayudaría a dar esperanza en los momentos de desánimo.

Lee las siguientes referencias de las Escrituras y busca mensajes de esperanza. Podrías marcar las palabras o frases que reflejen mensajes de esperanza.

En esos versículos aprendemos la siguiente verdad: Por medio de la fortaleza de nuestro Redentor, podemos ser liberados del cautiverio físico y espiritual.

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Christ the Consolator
  1. Pregúntale a un familiar, amigo o miembro del barrio cómo piensa que nuestro Redentor Jesucristo puede ayudar a liberarnos del cautiverio físico y espiritual. Luego, en tu diario de estudio de las Escrituras, haz un resumen de lo que él o ella dijo.

Jeremías 52 contiene un relato adicional de la captura babilónica de Jerusalén, incluso cómo los babilonios tomaron cautivo al rey Sedequías y mataron a sus hijos. (Recuerda que Mulek, uno de los hijos de Sedequías, escapó a las Américas [véase Helamán 6:10; 8:21]). Los judíos que estaban en Jerusalén o fueron muertos o fueron llevados cautivos a Babilonia.

  1. Escribe lo siguiente en tu diario de estudio de las Escrituras al final de las asignaciones de hoy:

    He estudiado Jeremías 42–52 y he terminado esta lección el (fecha).

    Otras preguntas, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con el maestro: