Seminario
Introducción a Malaquías


Introducción a Malaquías

¿Por qué debemos estudiar este libro?

Un siglo después que los judíos volvieron a su patria, muchos de ellos habían llegado a ser autocomplacientes y menos devotos del Señor. Por medio del profeta Malaquías, Jehová habló sobre el compromiso cada vez menor por parte de los judíos hacia Dios. El Señor mandó a Su pueblo del convenio que se volvieran a Él al entregarle los diezmos y ofrendas con mayor fidelidad, y prometió bendecir y proteger a quienes así lo hiciesen (véase Malaquías 3:7–12). Al estudiar las palabras de Malaquías, podrás obtener un testimonio mayor de la ley del diezmo y sentir más deseos de obedecerla.

Además, aprenderás que cumples la profecía de Malaquías de que el Señor hará volver el corazón de los hijos a sus padres (o antepasados) (véase Malaquías 4:6) cuando participas en la obra del templo y de historia familiar. Estudiar esa profecía te inspirará a participar en la obra de salvación de tus antepasados fallecidos.

¿Quién escribió este libro?

El libro de Malaquías indica que contiene la “profecía de la palabra de Jehová contra Israel, por medio de Malaquías” (Malaquías 1:1). En hebreo el nombre Malaquías quiere decir “mi mensajero” (véase Bible Dictionary, “Malachi” [en inglés]). Tal nombre refleja adecuadamente los importantes mensajes que el profeta comunicó al pueblo de su época, muchos de los cuales también se aplican al pueblo del Señor de los últimos días.

Sabemos muy poco sobre la vida de Malaquías, aparte de lo que conocemos por sus escritos. Su origen y circunstancias nos son desconocidos, pero evidentemente vivió en el siglo V a. de J.C. (véase Bible Dictionary, “Malachi” [en inglés]) y habría sido contemporáneo de Esdras y Nehemías.

¿Cuándo y dónde se escribió?

Aunque no sabemos cuándo ni dónde se escribieron las profecías de Malaquías, Malaquías las comunicó alrededor del año 430 a. de J.C., muy probablemente en Jerusalén (véase Bible Dictionary, “Malachi” [en inglés]). Si escribió él mismo las profecías, es factible que lo haya hecho aproximadamente en esa época.

¿Cuáles son algunas de las características distintivas de este libro?

Malaquías es el último libro del Antiguo Testamento. Además, Malaquías es uno de los profetas del Antiguo Testamento que se citan con mayor frecuencia. Lo han citado los autores del Nuevo Testamento, a menudo en lo referente a la misión de Juan el Bautista (véanse Mateo 11:10; Marcos 1:2; Lucas 1:17; 7:27), Jesucristo al hablar a los nefitas (véase 3 Nefi 24–25), y Moroni al dirigirse al profeta José Smith (véanse D. y C. 2:1–3; José Smith—Historia 1:36–39).

La profecía de Malaquías de que Elías el Profeta haría “volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres” (Malaquías 4:6) está presente en los cuatro libros canónicos (véanse 3 Nefi 25:6; D. y C. 2:2–3; 128:17; José Smith—Historia 1:39). Cuando Elías el Profeta se apareció al profeta José Smith y a Oliver Cowdery en el Templo de Kirtland, hizo alusión a esa profecía: “He aquí, ha llegado plenamente el tiempo del cual se habló por boca de Malaquías, testificando que él [Elías el profeta] sería enviado antes que viniera el día grande y terrible del Señor” (D. y C. 110:14). La profecía es de gran importancia para los Santos de los Últimos Días, puesto que enseña las doctrinas del poder para sellar, de la familia eterna y de la obra que efectuamos en el templo a favor de las personas fallecidas (véase D. y C. 138:46–48).

El libro de Malaquías está escrito con un estilo literario distintivo ya que presenta un diálogo entre Jehová y el pueblo de Israel (por ejemplo, véase Malaquías 1:2–5). Algunos ejemplos de dichos diálogos comprenden preguntas que plantean Jehová o diversas personas, así como afirmaciones de quienes se oponen a Jehová.

Bosquejo

Malaquías 1. Por medio del profeta Malaquías, el Señor reprende a los israelitas por su desobediencia en los ritos y sacrificios del templo. Los líderes judíos ofrendaban “pan inmundo” (Malaquías 1:7) y sacrificios inadecuados valiéndose de animales con defectos, lastimados o enfermos.

Malaquías 2. Jehová reprende a los sacerdotes por no guardar sus convenios con el Señor y por ser un mal ejemplo para el pueblo. Utiliza el incumplimiento del convenio del matrimonio para ilustrar el modo en que aquellos no guardaban los convenios que habían hecho con Él.

Malaquías 3–4. Jehová enviará a un precursor a preparar el camino ante Él, y Jehová vendrá súbitamente a Su templo. Exhorta al pueblo a vivir la ley del diezmo y promete enviar a Elías el Profeta antes del grande y terrible día de Jehová.