“Más de un testigo”

El Libro de Mormón: Manual para el maestro, 1999


Objetivo

Aumentar la comprensión de los miembros de la clase en cuanto al plan de redención y al poder que hay en tener más de un testigo para testificar de las verdades del Evangelio.

Preparación

  1. 1.

    Lea los pasajes de las Escrituras que se mencionan a continuación y medite y ore al respecto:

    1. a.

      Alma 8–9. Después de predicar en Melek, Alma llama al pueblo de Ammoníah al arrepentimiento, pero éste lo rechaza. Sale de la ciudad pero un ángel le manda que regrese. Alma es recibido por Amulek, y ambos reciben el mandamiento de predicar en Ammoníah.

    2. b.

      Alma 10. Amulek predica al pueblo de Ammoníah y describe su conversión. El pueblo se asombra de que haya otro testigo de las enseñanzas de Alma. Amulek contiende con abogados y jueces injustos.

    3. c.

      Alma 11. Amulek contiende con Zeezrom y testifica de la venida de Cristo, del juicio de los inicuos y del plan de redención.

    4. d.

      Alma 12. Alma sigue explicando las palabras de Amulek; amonesta contra la dureza de corazón y la iniquidad y testifica de la Caída y del plan de redención.

  2. 2.

    Pida a un miembro de la clase que se prepare para dar un resumen del relato de cómo se conocieron Alma y Amulek (Alma 8:19–32).

  3. 3.

    Pida a dos miembros de la clase que se preparen para leer el diálogo que se encuentra en Alma 11:21–40; uno de ellos debe leer las palabras de Amulek y el otro las de Zeezrom.

  4. 4.

    Si va a utilizar la actividad para despertar interés, lleve a la clase un objeto en una caja o en una bolsa. Lleve un objeto fuera de lo común, uno que los miembros de la clase no esperen o no crean que usted posea. Asegúrese de que la caja o la bolsa oculte el objeto de manera que los miembros de la clase no lo puedan ver.

Sugerencias para el desarrollo de la lección

Actividad para despertar interés

Si lo desea, utilice la siguiente actividad, o una de su preferencia, para comenzar la lección. Escoja la actividad que sea más apropiada para su clase.

Muestre la caja (o la bolsa) donde tiene guardado el objeto (véase “Preparación”, inciso 2). Diga a los miembros de la clase lo que contiene la caja, pero no les muestre el objeto. Pregúnteles si creen que ese objeto realmente está en la caja.

Después que los miembros de la clase hayan tenido la oportunidad de responder, pida a uno de ellos que se acerque y mire dentro de la caja. Pida a esa persona que diga a los demás miembros de la clase lo que hay dentro de la caja. Después pregunte de nuevo si creen que dicho objeto está en la caja.

• ¿Por qué fue más fácil creer que el objeto estaba en la caja después de que alguien se cercioró de que en efecto así era?

Explique que cuando Alma predicaba el arrepentimiento al pueblo de Ammoníah, Amulek se unió a él. En esta lección se analiza la forma en que se fortaleció la enseñanza de Alma al contar con Amulek como testigo.

Análisis y aplicación de las Escrituras

Con la ayuda de la oración, seleccione los pasajes de las Escrituras, las preguntas y otros materiales de la lección que mejor satisfagan las necesidades de los miembros de la clase. Analicen la forma en que los pasajes seleccionados se aplican al diario vivir. Anime a los miembros de la clase a compartir experiencias que hayan tenido que se relacionen con los principios que se encuentran en las Escrituras.

1. Alma llama al pueblo de Ammoníah al arrepentimiento, pero éste lo rechaza.

Analicen Alma 8–9. Pida a varios miembros de la clase que lean en voz alta los versículos que usted haya seleccionado. Recuerde a los miembros de la clase que Alma entregó el asiento judicial a Nefíah e inició sus viajes misionales, entre ellos un viaje a la inicua ciudad de Ammoníah.

• Después de establecer el orden de la Iglesia entre el pueblo de Gedeón y de Melek, Alma fue a predicar a la tierra de Ammoníah. ¿Qué problema enfrentó allí? (Véase Alma 8:8–9.) ¿Qué palabras de Alma 8:10 describen la intensidad de los esfuerzos de Alma en Ammoníah? ¿Cómo respondió el pueblo de Ammoníah a la predicación de Alma? (Véase Alma 8:11–13.)

• ¿Qué sucedió cuando Alma salió de Ammoníah y viajó hacia la ciudad de Aarón? (Véase Alma 8:14–17.) Según el ángel, ¿qué razón tenía Alma para regocijarse? (Véase Alma 8:15.) ¿Cómo reaccionó Alma a las instrucciones del ángel? (Véase Alma 8:18.) ¿Qué podemos aprender de su reacción?

Pida al miembro de la clase previamente asignado que hable brevemente acerca de la forma en que se conocieron Alma y Amulek (Alma 8:19–32). Si no se lo ha pedido a ningún miembro de la clase, haga usted mismo la presentación.

• ¿Cómo preparó el Señor a Amulek para predicar con Alma? (Véase Alma 8:20, 27; 10:7–11.) ¿Cuáles son algunas de las formas en las que las personas son preparadas para llevar a cabo la obra del Señor?

• ¿Por qué el pueblo de Ammoníah continuó rechazando las amonestaciones de Alma? (Véase Alma 9:5.) ¿De qué argumentos se valieron para rechazar su mensaje? (Véase Alma 9:2, 6.)

• Alma dijo que las personas inicuas de Ammoníah habían olvidado la tradición de rectitud de sus padres, los mandamientos del Señor y la liberación de sus padres por parte del Señor (Alma 9:8–11). ¿En qué forma ese olvido los llevó a la iniquidad? ¿Cuáles son algunas de las razones por las que las personas olvidan lo que el Señor ha hecho por ellas y por los demás? ¿Qué métodos eficaces han encontrado ustedes para acordarse de las bendiciones que el Señor les ha dado?

• Alma advirtió que si los inicuos nefitas de Ammoníah no se arrepentían, el día del juicio sería “más tolerable” para los lamanitas que para ellos (Alma 9:15). ¿Por qué? (Véase Alma 9:14–24; véase también Lucas 12:47–48; D. y C. 82:3.) ¿Qué requiere el Señor de las personas que han recibido mayor luz?

• ¿Qué enseñó Alma acerca de las “promesas que se extienden a los lamanitas”? (Alma 9:16–17). ¿Cómo se están cumpliendo esas promesas en nuestros días?

2. Amulek predica al pueblo de Ammoníah.

Lean y analicen los versículos de Alma 10 que usted haya seleccionado. Explique que después de que Alma habló al pueblo, Amulek se puso de pie y comenzó a predicarles. Amulek era descendiente de Lehi y era un hombre rico “de no poca reputación” en la comunidad (Alma 10:2–4).

• Amulek dijo que fue “llamado muchas veces” pero “no [quiso] oír” y que sabía “concerniente a estas cosas” pero “no quería saber” (Alma 10:6). ¿Cuáles son algunas de las formas en las que el Señor nos llama? ¿Por qué a veces somos lentos en responderle? ¿Cómo podemos ser más receptivos?

• ¿Cuándo fue que se convirtió Amulek finalmente? (Véase Alma 10:7–11; si lo desea, pida a un miembro de la clase que lea en voz alta los cinco versículos.)

• ¿Qué intenciones tenían los abogados que interrogaron a Amulek? (Véase Alma 10:13–16, 31–32.) ¿Por qué no pudieron engañarle? (Véase Alma 10:17.)

• Amulek reprendió a los abogados y les advirtió que estaban estableciendo el fundamento de la destrucción del pueblo (Alma 10:17–21, 27). ¿En qué forma estaban estableciendo ese fundamento? ¿Qué había impedido que el pueblo fuera destruido? (Véase Alma 10:22–23.) ¿Cómo ayudan las oraciones de los justos a contrarrestar los efectos de la iniquidad en el mundo de hoy?

• ¿Por qué se asombró el pueblo con las palabras de Amulek? (Véase Alma 10:12.) ¿Cuáles son los beneficios de tener más de un testigo al compartir el Evangelio? ¿Cómo podemos apoyarnos los unos a los otros en esa tarea? (Si lo desea, mencione a las personas de la Iglesia que enseñan en parejas, tales como los misioneros regulares, los maestros orientadores, las maestras visitantes y los padres.)

Pida a los miembros de la clase que durante el resto de la lección observen cómo Alma y Amulek continuaron apoyándose mutuamente en su labor, cada uno predicando las mismas doctrinas. Al analizar esas doctrinas, tal vez desee resumirlas en la pizarra. A continuación se presenta una gráfica que podría indicarle cómo hacerlo:

Doctrina

El testimonio de Amulek

El testimonio de Alma

La Expiación

Alma 11:40

Alma 12:33–34

El arrepentimiento

Alma 11:40

Alma 12:24

El juicio

Alma 11:41

Alma 12:14

La Resurrección

Alma 11:41–42

Alma 12:24–25

3. Amulek contiende con Zeezrom y testifica de Cristo.

Lean y analicen los versículos de Alma 11 que usted haya seleccionado. Explique que el capítulo 11 comienza con una descripción del sistema monetario de los nefitas. En Alma 11:20 comienza el relato de la interrogación de Amulek por parte de Zeezrom, uno de los abogados más astutos de la tierra de Ammoníah.

• ¿Cómo ganaban dinero los jueces de Ammoníah? (Véase Alma 11:1, 20.) ¿Por qué querían contender con Alma y con Amulek? (Véase Alma 11:20.)

Pida a los dos miembros de la clase previamente asignados que lean el diálogo entre Amulek y Zeezrom (que se encuentra en Alma 11:21–40), o use la sugerencia adicional para la enseñanza que se encuentra al final de la lección para introducir estos versículos. Después analicen el resto de las preguntas de esta sección.

• ¿Cómo respondió Amulek a la primera pregunta de Zeezrom? (Véase Alma 11:21–22.) ¿Cómo podemos mantener nuestras palabras y nuestras enseñanzas en armonía con el Espíritu del Señor?

• Zeezrom le preguntó a Amulek si Jesús salvaría a las personas en sus pecados (Alma 11:34). ¿Qué razones dio Amulek para decir que no podemos ser salvos en nuestros pecados? (Véase Alma 11:34, 37.) ¿Qué diferencia hay entre el falso concepto de salvarnos en nuestros pecados y la verdad de que podemos ser salvos de nuestros pecados? (Si no nos arrepentimos y permanecemos en un estado pecaminoso, no podemos ser salvos, pero si nos arrepentimos, Jesucristo puede salvarnos de nuestros pecados.)

• ¿Qué bendiciones de la expiación de Cristo son para todas las personas? (Véase Alma 11:42–43.) ¿Cuáles son las bendiciones que sólo reciben los que tienen fe en él y guardan Sus mandamientos? (Véase Alma 11:40–41.)

• ¿Qué enseñó Amulek en cuanto a la resurrección? (Véase Alma 11:43–45.) ¿Por qué es importante que conozcamos esas verdades?

4. Alma continúa explicando las palabras de Amulek y amonesta contra la dureza de corazón.

Lean y analicen los versículos de Alma 12 que usted haya seleccionado. Señale que después de que Amulek respondió a los argumentos de Zeezrom, éste “empezó… a temblar” (Alma 11:46). Al ver esto, Alma comenzó a hablar a fin de “afirmar las palabras de Amulek… [para] aclarar las Escrituras más de lo que Amulek había hecho” (Alma 12:1).

• De las palabras que Alma habló a Zeezrom que se encuentran en Alma 12:3–6, ¿qué podemos aprender acerca de lo que Satanás desea y de la forma como trabaja? (Señale que a menudo Satanás trata de engañar a una persona a fin de llevar a muchas personas a la destrucción.) ¿Cómo podemos protegernos de las sutiles artimañas de Satanás?

• ¿Qué enseñó Alma acerca de la forma en que el estado de nuestro corazón afecta el entendimiento que tengamos de la palabra de Dios? (Véase Alma 12:9–11.) ¿Qué bendiciones reciben los que no endurecen su corazón? (Véase Alma 12:10.) ¿Cómo podemos llegar a tener corazones que reconocen, comprenden y aceptan la palabra de Dios? (Véase 1 Nefi 2:16; 15:11.)

• Alma enseñó que los que endurecen su corazón contra la palabra de Dios serán condenados por sus palabras, sus obras y sus pensamientos (Alma 12:13–14). ¿Por qué nos juzga el Señor de acuerdo con nuestros pensamientos así como por nuestras palabras y obras?

• ¿Cómo describió Alma el estado de los que no se arrepienten y por lo tanto mueren en sus pecados? (Véase Alma 12:14–18.) ¿Por qué esas personas “se hallarán como si no se hubiese hecho ninguna redención”? (Véase D. y C. 19:16–18.)

• Alma 12:22–34 contiene la descripción que Alma hizo en cuanto a la caída de Adán y del plan de redención. ¿Qué enseñó Alma acerca del propósito de la vida terrenal? (Véase Alma 12:24.) ¿Cómo puede la comprensión de ese principio ayudarnos a vivir con mayor rectitud?

• ¿Por qué es significativo que “…después de haberles dado a conocer el plan de redención, Dios les dio mandamientos [a Adán y a Eva]”? (Alma 12:32; cursiva agregada). ¿En qué forma nos ayuda el comprender el plan de redención a guardar los mandamientos? ¿Cómo pueden los padres y los maestros aplicar este principio al enseñar la importancia de los mandamientos?

• ¿Por qué es necesario que sepamos que Dios ha preparado un plan para nuestra redención? ¿Qué nos enseña el plan de redención en cuanto a la justicia y la misericordia de Dios?

Conclusión

Señale que, al trabajar juntos Alma y Amulek como testigos del Evangelio de Jesucristo, se fortalecieron entre sí e impartieron poderosas enseñanzas acerca del plan de redención. Inste a los miembros de la clase a buscar oportunidades para fortalecerse los unos a los otros al dar testimonio del Evangelio.

De acuerdo con la inspiración del Espíritu, testifique de las verdades que se analizaron durante la lección.

Sugerencia adicional para la enseñanza

El siguiente material complementa las sugerencias para el desarrollo de la lección. Si lo desea, utilice uno o más de estos conceptos como parte de la lección.

La respuesta a las preguntas de Zeezrom.

Pida a los miembros que, con sus Escrituras cerradas y sin haber analizado el tema, traten de contestar correctamente las preguntas que Zeezrom le hizo a Amulek, las cuales se encuentran en Alma 11:26–39. Compare las respuestas que den con las de Amulek. Después analicen cómo Zeezrom intentaba engañar a Amulek para que diera respuestas contradictorias. Señale que es esencial comprender los principios del Evangelio y procurar la guía del Espíritu Santo a fin de estar preparados para contestar preguntas similares.