La propia estimación y la rectitud

Mujeres Jóvenes, Manual 1, 1994


Objetivo

Que las jovencitas reconozcan que la propia estimación se nutre cuando se vive con rectitud.

Preparación

  1. 1.

    Antes de la clase, busque un frasco (recipiente de vidrio con tapa) chico y ponga dentro una cucharadita llena de tierra. Llene el frasco con agua casi hasta el borde, colóquele la tapa y sacúdalo; déjelo reposar unos diez minutos y sáquele el agua cuidando de que la tierra quede en el fondo. Vuelva a llenar el frasco con agua y a sacudirlo, dejándolo reposar otros diez minutos; vacíe el agua otra vez. Repita este procedimiento cuatro o cinco veces, hasta que el agua aparezca bastante limpia una vez que el sedimento se haya depositado en el fondo del frasco. Este método quita del agua todas las impurezas que se disuelven. Unos diez o quince minutos antes de dar la lección, coloque el frasco sobre una mesa en la sala de clase y déjelo ahí, sin tocarlo ni moverlo, para que el sedimento se asiente.

  2. 2.

    Asigne a las jóvenes los pasajes de las Escrituras, los relatos o las citas que desee que se lean en la clase en voz alta.

Sugerencias para el desarrollo de la lección

Introducción

Actividad

Levante el frasco, con cuidado de no sacudirlo, y muéstrelo a la clase. El agua estará bastante clara con el sedimento asentado en el fondo. Diga a las alumnas que se fijen en lo que pasa cuando usted sacuda el frasco (el agua se enturbia). Vuelva a dejarlo sobre la mesa.

Pasaje de las Escrituras

Pida a una joven que lea Isaías 57:20–21.

Presentación por la maestra

Explíqueles que las personas que viven cerca del mar saben lo que le pasa al agua cuando hay tormenta: las aguas agitadas llevan a la superficie arena y toda clase de materia orgánica y las arrastran de acá para allá arrojando “cieno y lodo”. El constante movimiento de las furiosas olas produce confusión y agitación.

Análisis

• ¿Qué compara Isaías con el “mar en tempestad, que no puede estarse quieto”? Cuando Dios dice que “no hay paz… para los impíos”, ¿a qué paz se refiere? (A la paz interior, a una conciencia limpia). Hágales comprender que cuando una persona comete un pecado y no se arrepiente, no puede tener tranquilidad ni paz. Esa agitación produce un cambio en el pecador. ¿Qué cambio es ése? Dirija este análisis de modo que se hable del sentido de culpabilidad y de la pérdida de la propia estimación como resultados del pecado.

Presentación por la maestra

Explíqueles que la pérdida del autorrespeto que ocurre debido a la iniquidad es como un “mar en tempestad”, que no permite que haya paz para el transgresor.

• ¿Por qué contribuye la iniquidad a la pérdida del autorrespeto?

Vivir con rectitud aumenta la propia estimación de una persona

Presentación por la maestra

Comente que la propia estimación se relaciona a veces con lo que una persona pueda hacer, como por ejemplo tocar bien un instrumento musical o destacarse en los estudios o los deportes, y eso sólo pueden hacerlo algunas personas. Pero hay algo que desarrolla y aumenta la propia estimación y que se encuentra al alcance de todos, y es vivir con rectitud. El que se esfuerce por vivir rectamente logrará tener en su corazón una serenidad que no se puede adquirir de ninguna otra manera, pues se sentirá satisfecho consigo mismo. Un líder de la Iglesia, miembro de los Setenta, ha hecho este comentario:

“No sé de nada que nos traiga mayor felicidad que el darnos cuenta de que lo que hemos hecho o lo que estamos haciendo es lo correcto y lo justo” (Rex D. Pinegar, “What It Means to Establish a Relationship with Christ”, Speeches of the Year, 1977, Provo: Brigham Young University Press, 1978, pág. 91).

Cita

Otro hermano de la Iglesia dijo algo similar:

“Cuando una persona se traba en batalla con sus propias debilidades, emprende la guerra más santa de todas; y la recompensa que se recibe cuando se triunfa en esa lucha es la más duradera, la más satisfactoria y la más intensa que se pueda obtener” (Bryant S. Hinckley, That Ye Might Have Joy, Salt Lake City: Bookcraft, 1958, pág. 83).

Análisis en la pizarra

• Cuando se habla de vivir con rectitud, ¿se refiere solamente a no pecar?

• ¿Qué elementos adicionales forman parte de ese tipo de vida? (Anote en la pizarra algunas de las cosas que hacemos si vivimos rectamente.)

Entre éstos se debe mencionar: la determinación de apegarse a los principios cristianos fundamentales como la total honestidad, la virtud, la castidad, la fe, la integridad, la modestia, el prestar servicio al prójimo.

Pida a las jovencitas que busquen y lean Doctrina y Convenios 121:45. Analicen la frase “tu confianza se hará fuerte en la presencia de Dios”. Hágales comprender que si viven con rectitud, tendrán una idea de su propio valor que les permitirá presentarse con la conciencia limpia ante sus padres, ante el obispo y ante su Padre Celestial.

Presentación por la maestra

Dígales que se fijen en el frasco con agua y tierra; comente que ahora que el agua está en calma, está más clara porque el sedimento ha empezado a asentarse en el fondo.

Análisis

Analicen los efectos calmantes y tranquilizadores que produce el vivir de acuerdo con los principios de rectitud anotados en la pizarra.

Relatos

Cuénteles los relatos que aparecen a continuación para que entiendan mejor por qué el vivir con rectitud produce paz.

María Elena era la mayor de cinco hermanos y su madre siempre había dependido mucho de la ayuda que ella le daba con los niños menores; desde muy pequeña, la mamá le había enseñado a ser paciente y cariñosa con sus hermanitos, y esperaba que fuera así. Pero María Elena se había cansado de tener tanta responsabilidad, especialmente después de llegar a la adolescencia y tener muchos amigos y muchas actividades interesantes. Poco a poco, empezó a abrigar resentimiento contra ellos y a tratarlos mal; por cualquier cosa les gritaba y, cuando iban a pedirle algo, de mal modo les decía que se fueran y la dejaran tranquila; ya no les pedía que le contaran sus actividades ni tampoco los dejaba entrar en su cuarto. Después de las clases, se iba a la casa de sus amigas en lugar de regresar a la suya, para no tener que cuidar a “esos chicos malcriados”. A veces, les notaba una expresión de tristeza en los ojos cuando los miraba durante la cena, pero no permitía que eso cambiara su manera de tratarlos.

Nancy consideraba que la anciana que vivía cerca de su casa era una de las pruebas de su vida. La señora vivía sola y muchas veces necesitaba ayuda para cuidar de la casa y el jardín; ella iba de vez en cuando a ayudarla, pero cuando lo hacía, no sólo tenía que trabajar en la casa y el jardín sino que también tenía que escuchar a la anciana hablando sin parar por horas. Pensaba que el ir a su casa era una pérdida de tiempo y prefería estar con sus amigas. Su mamá le pidió que hiciera un experimento: le dijo que fuera a la casa de la señora sólo una vez por semana, pero que no se limitara solamente a limpiarle la casa sino que la escuchara también atentamente y tratara de entender lo que le decía; y agregó que le pedía que hiciera eso durante un mes, nada más, y que si después no quería seguir yendo no fuera más. Nancy decidió hacer el experimento sólo para que su madre no volviera a pedirle que fuera a visitar a la vecina.

La primera semana hizo un esfuerzo por escuchar a la anciana, y la verdad es que empezó a sentir compasión de ella al darse cuenta de la vida tan dura que había tenido; a la semana siguiente, mientras limpiaba y la escuchaba, se dio cuenta de que la señora había aprendido mucho de todas las experiencias que había tenido, y que no era nada aburrido escucharla; cuando el mes llegó a su fin, no sólo había comenzado a sentir afecto por la anciana y a apreciarla, sino que también se daba cuenta de que su presencia allí era muy importante y que su nueva amiga la necesitaba mucho.

Análisis

• ¿Cuál de esas dos muchachas sentiría más paz interior? ¿Cuál de las dos estaría más satisfecha consigo misma? ¿Por qué?

• ¿Qué ventajas tiene el empezar desde muy temprano en la vida a vivir con rectitud? (Desde muy joven se forman buenos hábitos; se tienen más oportunidades de progresar, de desarrollarse, de adquirir autorrespeto; hay menos posibilidades de cometer transgresiones graves que puedan conducir a la pérdida de la propia estimación.)

El Señor nos ha advertido que la iniquidad no trae felicidad

Nota a la maestra

Levante el frasco y sacúdalo vigorosamente hasta que el agua se enturbie por completo. Dígales que, en contraste con la tranquila seguridad que siente una persona como Nancy, que se empeña en vivir con rectitud, la que permite que la iniquidad se infiltre en su vida es “como el mar en tempestad”.

Análisis de pasajes de las Escrituras

Lean en voz alta Alma 41:10 y Gálatas 6:7.

• ¿Qué sentimos cuando hemos cometido un error? ¿Por qué es desagradable sentirnos así? ¿Cómo describirían ustedes el sentimiento de culpabilidad? ¿Qué pasa con nuestra propia estimación cuando nos sentimos culpables? ¿Es diferente entonces la imagen que tenemos de nosotras mismas?

Presentación por la maestra

Explíqueles que el mundo quiere hacernos creer que debemos deshacernos de los sentimientos de culpabilidad en lugar de abandonar los pecados que los causan.

Análisis

Haga destacar la idea de que todos nacemos con un sentido de lo que está bien y lo que está mal, y que a ese sentido se le da el nombre de conciencia. “Pues he aquí, a todo hombre se da el Espíritu de Cristo para que sepa discernir el bien del mal” (Moroni 7:16). Eso nos capacita para darnos cuenta cuando hemos cometido un error y nos inspira a alejarnos del mal.

• ¿Qué nos pasa cuando nos negamos demasiado seguido a escuchar la voz de la conciencia? (Nos vamos volviendo cada vez más insensibles a ella.)

Cita

El élder James E. Faust, del Consejo de los Doce, dijo lo siguiente:

“…Quizás muchos piensen que pueden vivir siguiendo las normas que bien les plazca. En una sociedad donde los valores, la moral y las normas no cuentan, muchas personas carecen de sentimientos de valor, respeto y dignidad personales” (“El valor de una persona”, Liahona, agosto de 1981, pág. 11).

Análisis

• ¿Por qué habrá dicho el Señor que “la maldad nunca fue felicidad”? ¿Por qué nos sentimos más seguras y más tranquilas cuando tenemos normas por las que regirnos?

Es posible volver a adquirir la propia estimación que se haya perdido

Análisis

• Una vez que se han perdido, ¿cómo se pueden recuperar la propia estimación, el autorrespeto y la dignidad?

Presentación por la maestra

Explíqueles que nadie puede crecer sin cometer errores, y que, si hemos perdido el autorrespeto y nos sentimos culpables, por medio del arrepentimiento nos es posible cambiar los malos hábitos y la conducta equivocada. El sentir que hemos recibido el perdón del Señor es lo que nos da más sentido del valor propio que cualquier otra cosa.

Conclusión

Hágales comprender que el arrepentimiento y el perdón restablecen la paz interior y calman “el mar en tempestad” de una persona. Dígales que piensen en lo clara que se volvería el agua si la colaran para librarla de toda la tierra que contiene. Cuando nos arrepentimos sinceramente y volvemos a tener limpia la conciencia, recobramos también nuestra propia estimación.

Aplicación de la lección

Exhórtelas a considerar sus acciones y determinar cuáles son las faltas de las que deben arrepentirse o qué hábitos deben cambiar para aumentar su propia estimación.