¿Están dando en el blanco al realizar las Evaluaciones del aprendizaje?

La evaluación del aprendizaje puede ser más que tomar un examen. Usted puede dar la evaluación del aprendizaje de una manera tal que los presentes sientan que acaban de tener una experiencia que profundizó su conversión. El verdadero objetivo no es obtener calificaciones satisfactorias en la evaluación, sino facilitar una experiencia que ayude a los alumnos a cumplir el objetivo de Seminarios e Institutos de Religión y a profundizar su conversión (véase La enseñanza y el aprendizaje del Evangelio: Manual para maestros y líderes de Seminarios e Institutos de Religión, 2012, x).

Al implementar las siguientes ideas, usted y sus alumnos pueden tener una experiencia que profundice su conversión la próxima vez que dé la evaluación del aprendizaje.

Preparar a sus alumnos

A fin de comenzar a preparar a sus alumnos para el éxito desde ahora, repase constantemente la doctrina y los principios importantes a lo largo del semestre. Tal vez quiera considerar realizar uno de los siguientes:

• Invitar a los alumnos a compartir un principio que hayan aprendido de la lección anterior antes de empezar la lección.

• Preguntar a los alumnos qué han aprendido después de cada lección.

• Utilizar ejercicios de repaso o de práctica del material del Dominio de la doctrina para repasar temas doctrinales importantes y practicar cómo superar los desafíos en la vida real.

• Pedir a los alumnos que completen algunos de los “Repasos semanales” que se están implementando en el programa piloto de las evaluaciones del aprendizaje.

Planificar cada día

Planifique maneras de hacer que cada día de la evaluación del aprendizaje sea un día significativo, no simplemente el día en el que se repasa la evaluación. Por ejemplo, en el día en el que los alumnos realicen la evaluación, planifique maneras de ayudarlos a sentir el Espíritu y a tener una experiencia que profundice su conversión. Tal vez quiera considerar realizar uno de los siguientes:

• Controlar de manera apropiada el tiempo de la evaluación del aprendizaje a fin de dejar 5 a 10 minutos al final para que los alumnos compartan sus respuestas a las preguntas de la sección Explicar la doctrina.

• Dirigir un análisis significativo de la sección Creencias y aplicación a fin de que los alumnos vean su potencial divino y tengan el deseo de establecer metas para superar sus debilidades.

La evaluación del aprendizaje puede ayudar a los alumnos a acercarse más a Jesucristo, facilitar experiencias reveladoras y brindar fortaleza para vencer los desafíos. Los alumnos pueden tener una experiencia que profundice su conversión.

Considere consultar con su coordinador, administrador, u otros miembros del cuerpo docente acerca de maneras en que puede utilizar las evaluaciones para lograr el verdadero objetivo: profundizar la conversión.

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