L. Tom Perry, “El perfecto amor echa fuera el temor”, conferencia general de octubre de 2011
Si ustedes responden a la invitación de compartir sus creencias y sentimientos sobre el evangelio restaurado de Jesucristo, un espíritu de amor y un espíritu de valentía serán sus compañeros constantes.
W. Christopher Waddell, “La oportunidad de toda una vida”, conferencia general de octubre de 2011
Por medio de tu dedicado servicio y sacrificio voluntario, tu misión se convertirá en tierra santa para ti.
M. Russell Ballard, “La importancia de un nombre”, conferencia general de octubre de 2011
Adquiramos el hábito… de dejar claro que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es el nombre por el que el Señor ha ordenado que se nos conozca.
Kazuhiko Yamashita, “Los misioneros son un tesoro de la Iglesia”, conferencia general de octubre de 2011
Agradezco que los misioneros sean llamados por el Señor, que respondan a ese llamado y que presten servicio por todo el mundo.
Neil L. Andersen, “Preparar al mundo para la Segunda Venida”, conferencia general de abril de 2011
La misión de ustedes será una oportunidad sagrada de traer a otros a Cristo y ayudar en la preparación para la segunda venida del Salvador.
M. Russell Ballard, “Encontrar gozo al servir con amor”, conferencia general de abril de 2011
Que demostremos nuestro amor y aprecio por el sacrificio expiatorio del Salvador a través de nuestros actos de servicio sencillos y caritativos.
Thomas S. Monson, “Al encontrarnos reunidos de nuevo”, conferencia general de octubre de 2010
El servicio misional es un deber del sacerdocio, una obligación que el Señor espera de nosotros, a quienes se nos ha dado tanto.
Jeffrey R. Holland, “A causa de vuestra fe”, conferencia general de octubre de 2010
Cuando fui llamado a servir en una misión, en la época de Matusalén, no había costos misionales de igualación financiera. Cada uno tenía que pagar el costo completo de la misión a la que se le enviara. Algunas misiones eran muy caras, y resultó que la mía era una de ellas.
Thomas S. Monson, “La preparación trae bendiciones”, conferencia general de abril de 2010
Muchas veces la fortaleza espiritual se logra por medio del servicio abnegado.
Ronald A. Rasband, “El llamamiento divino de un misionero”, conferencia general de abril de 2010
El Señor necesita que todo joven capaz se prepare y se vuelva a comprometer, a partir de esta noche, a ser digno de un llamado del profeta de Dios de servir en una misión.
L. Tom Perry, “La forma que se tenía en el pasado de enfrentar el futuro”, conferencia general de octubre de 2009
Hace unos años, eliminamos las misiones de estaca y desplazamos el enfoque de nuestros empeños a la organización de la misión de barrio. Con la elaboración de un plan misional de barrio por cada consejo de barrio de la Iglesia, se está progresando a una velocidad cada vez mayor. Gran parte del éxito se debe a la estrecha colaboración de los misioneros de tiempo completo con los consejos de barrio, los líderes de la misión de barrio y los miembros de la Iglesia.
Brent H. Nielson, “Un llamado a la nueva generación”, conferencia general de octubre de 2009
No hay llamamiento más importante que el de “hacer discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo”.
Joseph W. Sitati, “Las bendiciones del Evangelio están disponibles para todos”, conferencia general de octubre de 2009
Los hijos de Dios que viven hoy en la tierra tienen la oportunidad de entender Su plan de felicidad para ellos más íntegramente que en otras épocas.
L. Tom Perry, “Traer almas a Mí”, conferencia general de abril de 2009
Los misioneros… continuarán haciendo lo mejor que puedan, pero ¿no sería mejor si ustedes y yo nos pusiéramos a la altura de las circunstancias e hiciéramos la labor que legítimamente nos corresponde?
Silvia H. Allred, “Por tanto, id”, conferencia general de octubre de 2008
Todos podemos participar en la obra misional, ésta es la obra del Señor y Él nos ayudará a realizarla.
M. Russell Ballard, “La verdad de Dios seguirá adelante”, conferencia general de octubre de 2008
Ésta es la obra de Dios y la obra de Dios no será frustrada; sin embargo, todavía queda mucho por hacer.
Eduardo Gavarret, “Regresando a casa”, conferencia general de octubre de 2008
¡Qué impacto tremendo puede tener en la vida de tantas [personas]… el que aceptemos la invitación del Salvador de apacentar Sus ovejas…!
Craig C. Christensen, “Un libro con una promesa”, conferencia general de abril de 2008
Ruego que continuemos utilizando El Libro de Mormón: Otro Testamento de Jesucristo, para compartir el mensaje del Evangelio con familiares y amigos.
Erich w. Kopischke, “Predicad Mi Evangelio: La herramienta unificadora entre miembros y misioneros”, conferencia general de octubre de 2007
Los misioneros y los miembros deben… ser uno en nuestra labor de proclamar el Evangelio.
Michael J. Teh, “De las cosas pequeñas”, conferencia general de octubre de 2007
Como discípulos del Señor Jesucristo, tenemos la responsabilidad de cuidar y prestar servicio a nuestros hermanos y hermanas.
L. Tom Perry, “Elevar el nivel”, conferencia general de octubre de 2007
Asegúrense de que cumplan fácilmente con las normas mínimas para servir en calidad de misioneros y continuamente eleven ese nivel.
Quentin L. Cook, “Vivan por fe y no por cobardía”, conferencia general de octubre de 2007
Si escogemos seguir a Cristo con fe, en lugar de escoger otro camino por temor, se nos bendecirá con la consecuencia que va de acuerdo con lo que hayamos elegido.
Jay E. Jensen, “El poder de los himnos para nutrir el alma”, conferencia general de abril de 2007
Los himnos tienen una función primordial en la espiritualidad, la revelación y la conversión.
L. Tom Perry, “El plan de salvación”, conferencia general de octubre de 2006
No se nos ha dejado solos para vagar por el mundo sin conocer el plan maestro que el Señor ha diseñado para Sus hijos.
David F. Evans, “Su misión cambiará todo”, conferencia general de abril de 2006
Vengan y formen parte de la generación más grandiosa de misioneros que el mundo haya conocido.
M. Russell Ballard, “Cómo crear un hogar en el que se comparta el Evangelio”, conferencia general de abril de 2006
Tener un hogar en el que se comparte el Evangelio es la manera más fácil y eficaz de darlo a conocer.
Richard G. Scott, “¡Ahora es el momento de servir en una misión!”, conferencia general de abril de 2006
Los emocionantes campos de labor misional que se encuentran por todo el mundo permiten que mediante la inspiración del Señor se llame a jóvenes, a jovencitas y a matrimonios devotos a cumplir asignaciones desafiantes.
C. Scott Grow, “El Libro de Mormón, instrumento para recoger al Israel esparcido”, conferencia general de octubre de 2005
Jesucristo nos dio el Libro de Mormón como instrumento para recoger al Israel esparcido.
Paul K. Sybrowsky, “Si Cristo tuviera mis oportunidades…”, conferencia general de octubre de 2005
Nuestro Salvador Jesucristo nos enseña la importancia de ir en busca del que se encuentra perdido.
David A. Bednar, “Llegar a ser misioneros”, conferencia general de octubre de 2005
Ustedes y yo, hoy y siempre, debemos dar testimonio de Jesucristo y declarar el mensaje de la Restauración… la obra misional es una manifestación de nuestra identidad y de nuestro patrimonio espirituales.
Thomas S. Monson, “El profeta José Smith: Maestro mediante el ejemplo”, conferencia general de octubre de 2005
Ruego que incorporemos a nuestra propia vida los principios divinos que él tan bellamente enseñó —mediante el ejemplo— para que vivamos en forma más completa el Evangelio de Jesucristo.
Anne C. Pingree, “Conocer la voluntad del Señor con respecto a ustedes”, conferencia general de octubre de 2005
Que el Señor las bendiga en su búsqueda personal para conocer Su voluntad para con ustedes, y sometan su voluntad a la de Él.
Richard G. Scott, “El poder de Predicad Mi Evangelio”, conferencia general de abril de 2005
Les aliento a descubrir la forma en que este material los puede ayudar en sus labores misionales.
Robert D. Hales, “Los matrimonios misioneros. Las bendiciones del sacrificio y del servicio”, conferencia general de abril de 2005
Su Padre Celestial les necesita. Su obra, bajo la dirección de nuestro Salvador Jesucristo, precisa aquello que sólo ustedes pueden brindar.
M. Russell Ballard, “Uno más”, conferencia general de abril de 2005
Necesitamos más misioneros trabajadores y de firme testimonio a fin de llegar a más de los hijos de nuestro Padre Celestial.
L. Tom Perry, “¿Qué buscáis?”, conferencia general de abril de 2005
Los que buscan sinceramente la verdad están hallando respuesta a sus preguntas, están hallando al Señor por medio de Su Iglesia restaurada.
Julie B. Beck, “Una obra para mí”, conferencia general de abril de 2005
El Señor envió un ángel a José Smith para que le dijera que tenía una obra que llevar a cabo. La obra continúa hoy en día con nosotros.
M. Russell Ballard, “Testimonio puro”, conferencia general de octubre de 2004
El testimonio —el verdadero testimonio, nacido del Espíritu y confirmado por el Espíritu Santo— cambia vidas.
Russell M. Nelson, “Los misioneros mayores y el Evangelio”, conferencia general de octubre de 2004
Expreso gratitud por nuestros misioneros mayores. Ellos son jóvenes de espíritu, prudentes y tienen el deseo de trabajar.
Jeffrey R. Holland, “Permaneced en mí”, conferencia general de abril de 2004
Para que el fruto del Evangelio florezca y bendiga nuestra vida, debemos ceñirnos con firmeza a Él, el Salvador de todos nosotros.
Thomas S. Monson, “El Señor necesita misioneros”, Liahona, enero de 2011
Todo joven digno y capaz debe prepararse para servir una misión. El servicio misional es un deber del sacerdocio, una obligación que el Señor espera de nosotros, a quienes se nos ha dado tanto.
M. Russell Ballard, “El papel esencial de los miembros en la obra misional”, Liahona, mayo de 2003
Debemos prepararnos para ayudar a los misioneros a encontrar a aquellos hijos de nuestro Padre Celestial que van a abrazar el mensaje de la Restauración.
Dallin H. Oaks, “¿Por qué realizamos la obra misional?”, Liahona, septiembre de 2009
El propósito de nuestra obra misional consiste en ayudar a los hijos de Dios a cumplir con una condición prescrita por nuestro Salvador y Redentor.
Robert D. Hales, “Nuestro deber a Dios: La misión de padres y líderes para con la nueva generación”, Liahona, mayo de 2010
Es nuestro deber imperioso ayudar a los jóvenes a comprender y creer el Evangelio de una forma profundamente personal.