2002
Las palabras del Profeta viviente
marzo de 2002


Las palabras del Profeta viviente

Reflexiones Y Consejos del Presidente Gordon B. Hinckley

Un Pueblo de Convenios

“Ustedes son un pueblo de convenios… Cuando se bautizaron en esta Iglesia, aceptaron el compromiso, que permanecerá con ustedes por el resto de su vida, de vivir como Él desea que vivan. Cada semana participan de la Santa Cena, los emblemas de Su sacrificio, de Su sufrimiento por ustedes, un recordatorio del convenio que han hecho de tomar sobre sí el nombre de Jesucristo y de guardar Sus mandamientos. Y Él hace convenio con ustedes de que les bendecirá con Su Espíritu”1.

Contribuyan a Lo Bueno del Mundo

“Creemos que todos somos hijos e hijas de Dios, nacidos con una especie de legado divino, que hay algo bueno en nuestro interior y que debemos cultivarlo y nutrirlo y manifestarlo a fin de contribuir a lo bueno del mundo”2.

Aprecien la Diversidad de Culturas

“Los malentendidos nacen de la ignorancia y la sospecha. A medida que aprendemos a conocer y apreciar a las personas de culturas diferentes, llegamos a valorarlas”3.

Sean Buenos Santos de los Últimos Días

“No es difícil ser un buen Santo de los Últimos Días. Sólo tienen que ser buenos, decentes, amables, gentiles, amigables y corteses, y el Señor aceptará su esfuerzo, lo magnificará y les bendecirá a ustedes y a sus hogares, sus familias, sus hijos… Seamos Santos de los Últimos Días. Elevémonos un poco más, alcemos la cabeza y caminemos como es propio de los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días”4.

Sean Dignos de Sus Bendiciones

“Arrodíllense cada noche y cada mañana… No permitan que haya nada en su vida que les aleje del deseo de orar. Hablen con su Padre Celestial, hablen con amor, denle gracias por Sus bendiciones. Pídanle aquellas cosas que aprecian y Él oirá y contestará sus oraciones. Les abrirá el camino si es que se lo suplican y viven dignos de Sus bendiciones”5.

Fieles Pagadores de Diezmos

“No puedo sino sentir gratitud por los de esta Iglesia que fielmente pagan sus diezmos. Sé que el Señor les ama. Les ama tanto que está dispuesto a abrir las ventanas de los cielos y derramar Sus bendiciones sobre ellos. Lo he visto constantemente”6.

Esperanza

“La gente no carece de esperanza. Todos deberían reconocer que aun en las circunstancias más extremas existe un elemento de esperanza, que la gente puede recuperarse de lo que ha hecho, puede mejorar, puede cambiar y ser mucho más feliz si obra así”7.

La Sociedad de Socorro

“Esta magnífica organización [de la Sociedad de Socorro] ofrece sociabilidad, tremendas oportunidades de prestar servicio, tolerancia y educación, el atender a las necesidades de los desfavorecidos y muchas otras oportunidades. [Para ustedes, mujeres] la Sociedad de Socorro es como una madre querida y amorosa que les bendecirá aún estando sanas o enfermas. Les dará oportunidades de crecer y desarrollarse, les traerá la amistad de las mejores mujeres del mundo, las consolará en los momentos de tristeza, las bendecirá en medio de la angustia y les proporcionará la inimitable dicha de reunirse con hermanas que comparten los mismos valores que ustedes”8.

Notas

  1. Reunión, Nouméa, Nueva Caledonia, 17 de junio de 2000.

  2. Entrevista, Boston Globe, 14 de agosto de 2000.

  3. Observaciones, National Press Club, 8 de marzo de 2000.

  4. Conferencia regional, Ogden, Utah, 21 de mayo de 2000.

  5. Reunión, Pago Pago, Samoa Americana, 17 de junio de 2000.

  6. Observaciones, rededicación del centro de reuniones del Barrio Salt Lake 10, 2 de enero de 2000.

  7. Entrevista con la prensa sobre su libro Standing for Something, 11 de febrero de 2000.

  8. Reunión espiritual con el alumnado de la Universidad Brigham Young, 12 de septiembre de 2000.