Seminario
Unidad 17: Día 1, Doctrina y Convenios 76:81–119; 77


Unidad 17: Día 1

Doctrina y Convenios 76:81–11977

Introducción

Esta lección explora la visión del Reino Telestial que se mostró al profeta José Smith y a Sidney Rigdon, cual se registra en Doctrina y Convenios 76. Se recibió esta revelación en Hiram, Ohio, el 16 de febrero de 1832. José y Sidney describieron lo que aprendieron acerca de las personas que heredarán el Reino Telestial y las consecuencias de rechazar el evangelio y testimonio de Jesucristo. Asimismo, explicaron las diferencias entre el Reino Telestial y los otros reinos de gloria, y lo que deben hacer las personas para alcanzar la condición de ver y comprender por sí mismos los misterios del Reino de Dios. Posteriormente, en marzo de 1832, José Smith registró las respuestas a sus preguntas acerca del libro de Apocalipsis. Esa revelación se encuentra ahora en Doctrina y Convenios 77.

Doctrina y Convenios 76:81–112

El Señor muestra a José Smith y a Sidney Rigdon una visión del Reino Telestial

Imagínate que estás conversando sobre religión con un amigo que pertenece a otra iglesia cristiana. Tu amigo dice: “El domingo pasado en la iglesia, nuestro ministro dijo que al morir, iremos al cielo o al infierno. No me creo tan bueno ahora mismo como para ir al cielo, pero tampoco me veo tan malo como para tener que ir al infierno. ¿Qué es lo que enseña tu religión acerca del cielo y el infierno?”.

Consulta el diagrama de la lección del día 3 de la unidad 16, “Doctrina y Convenios 76: Reseña de la visión” en esta guía de estudio. Observa que el último reino de gloria que vieron el profeta José Smith y Sidney Rigdon fue el Reino Telestial. Lee Doctrina y Convenios 76:81–83, 103, y busca palabras y frases que describan a las personas que heredarán el Reino Telestial. Si lo deseas, marca lo que encuentres.

En el versículo 103, la palabra hechiceros se refiere a las personas que procuran controlar y ejercer poder valiéndose de fuentes malignas. Fornicarios designa a las personas que participan en la fornicación y otros pecados sexuales.

Uno de los criterios que determinan cuál de los reinos de gloria heredará una persona es la manera en que responde al evangelio y testimonio de Jesucristo. Lee las referencias de las Escrituras indicadas en la siguiente tabla. Describe en el espacio previsto la manera en que los habitantes de esos reinos responden al evangelio y testimonio de Jesucristo.

Reino

Respuestas al Evangelio y testimonio de Jesucristo

Celestial (D. y C. 76:50–51)

Terrestre (D. y C. 76:74, 79)

Telestial (D. y C. 76:82, 101)

  1. Responde las siguientes preguntas en tu diario de estudio de las Escrituras:

    1. ¿De qué forma procuras fortalecer tu testimonio de Jesucristo?

    2. ¿Por qué crees que la respuesta de una persona al evangelio y testimonio de Jesucristo sea tan importante para determinar el reino que esa persona heredará?

    3. ¿De qué manera puedes ser valiente en tu testimonio de Jesucristo?

Lee Doctrina y Convenios 76:84–85, 104–106 y marca las frases que enseñan la siguiente verdad: Las personas que hereden el Reino Telestial deben padecer en el infierno antes de que puedan ser redimidas por el Salvador.

Es conveniente que sepas que las Escrituras utilizan el término infierno al menos de dos maneras: Primero, el infierno es la región del mundo de los espíritus donde habitan los inicuos, y es, literalmente, una condición temporal de tormento y sufrimiento espirituales (véase Doctrina y Convenios 76:84–85, 104–106). El “fuego eterno” es una expresión figurada que describe el intenso tormento y sufrimiento que se experimentará en el infierno. Segundo, ocasionalmente se usa en las Escrituras la palabra infierno para referirse a las tinieblas de afuera, que a veces describe la condición permanente de tormento y suplicio que persiste para los hijos de perdición luego de su resurrección y juicio, así como para Satanás y sus seguidores desde la vida premortal (véase la Guía para el Estudio de las Escrituras, “Infierno”, escrituras.lds.org).

El élder James E. Talmage, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó lo siguiente acerca del infierno:

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Élder James E. Talmage

“El infierno tiene una salida así como una entrada… es un lugar preparado para disciplinar a los que rehusaron aprender en la tierra y enseñarles lo que debieron haber aprendido” (en Conference Report, abril de 1930, pág. 97; véase también Doctrina y Convenios: Manual para el alumno, Religión 324–325, manual del Sistema Educativo de la Iglesia, 1985, pág. 35).

“En cuanto a la duración del castigo, podemos tener la seguridad de que será graduada, según el pecado, y que es falso el concepto de que es interminable toda sentencia que se dicta por hacer lo malo [véase D. y C. 19:6–12; 76:36, 44]. Aun cuando es grande el efecto que esta vida ejercerá en la venidera, y ciertamente se responderá por haber pasado por alto las oportunidades para arrepentirse, Dios tiene el poder de perdonar más allá de la tumba. No obstante, las Escrituras hablan de un castigo eterno e interminable. Cualquier castigo que Dios ordena es eterno, porque Él es eterno [véase D, y C. 19:10–12]. Su sistema es uno de castigo sin fin, porque siempre existirá como lugar o condición preparado para los espíritus desobedientes; sin embargo, la imposición del castigo terminará cada ocasión que haya arrepentimiento y reparación aceptable” (Los Artículos de Fe, 1980, pág. 66).

¿Qué frases de Doctrina y Convenios 76:85, 106 enseñan que el infierno será una condición temporal para los que heredarán el Reino Telestial?

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Presidente Joseph Fielding Smith

El presidente Joseph Fielding Smith explicó las consecuencias del sufrimiento en el infierno para los que heredarán el Reino Telestial: “Ese sufrimiento será el medio de purificación o limpieza, y mediante él se llevará a los malvados a una condición en la cual podrán, gracias a la redención de Jesucristo, obtener la inmortalidad. Su espíritu y cuerpo se reunirán de nuevo y morarán en el Reino Telestial. Pero esa resurrección no vendrá hasta el fin del mundo” (véase Doctrina de Salvación, compilado por Bruce R. McConkie, 3 tomos, 1979, tomo II, págs. 280–281).

En Doctrina y Convenios 76:106–108 aprendemos que los inicuos sufrirán por sus pecados hasta que Jesucristo haya completado Su obra y entregue el Reino de Dios sobre la tierra a Su Padre, lo que acontecerá después del Milenio. Entonces Cristo será coronado con gloria.

Lee Doctrina y Convenios 76:111 y Doctrina y Convenios 137:9 y descubre lo que determinará qué reino de gloria heredaremos.

Un principio que aprendemos en estos versículos es que nuestras acciones en esta vida y los deseos de nuestro corazón determinarán el reino de gloria que heredaremos.

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Élder Russell M. Nelson

La siguiente declaración del élder Russell M. Nelson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, puede ampliar tu comprensión de este principio: “Cada uno de nosotros será juzgado de acuerdo con sus obras y con los deseos de su corazón [véase D. y C. 137:9]. A nadie se le requerirá pagar la deuda de otra persona; tampoco se dejará a la casualidad el hecho de que vayamos al Reino Celestial, al Terrestre o al Telestial. El Señor ha prescrito ciertos requisitos inalterables para cada reino. Podemos averiguar lo que enseñan al respecto las Escrituras y ajustar nuestra vida a ese modelo [véanse Juan 14:2; 1 Corintios 15:40–41; D. y C. 76:50–119; 98:18]” (“La constancia en medio del cambio”, Liahona, enero de 1994, pág. 40).

  1. Responde la siguiente pregunta en tu diario de estudio de las Escrituras: El entender este principio, ¿cómo puede influir en las decisiones que tomas actualmente?

Lee Doctrina y Convenios 76:86–89, 98, 112 y selecciona las palabras y frases que describen cómo será la inmortalidad de quienes hereden el Reino Telestial. Si lo deseas, marca lo que encuentres.

Cuando el profeta José Smith y Sidney Rigdon describieron a los habitantes del Reino Telestial, incluyeron una explicación de cómo se comparan entre sí los tres Reinos de gloria. Lee Doctrina y Convenios 76:91–98 y fíjate cómo los Reinos se comparan en gloria.

¿De qué modo difiere la gloria del Reino Celestial de la gloria de los Reinos Terrestre y Telestial?

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sol, luna, estrellas

Se puede ilustrar la diferencia en gloria entre los Reinos Celestial, Terrestre y Telestial por la diferencia en el brillo del sol, la luna y las estrellas, tal como se perciben desde la tierra. Vistas desde la tierra, las estrellas más refulgentes son 100 veces más brillantes que las estrellas más tenues. La luna brilla con un resplandor equivalente a 30 000 veces el de las estrellas de mayor brillo. El sol es aproximadamente 400 000 veces más radiante que la luna llena. Esas diferencias en resplandor permiten ilustrar las diferencias que José y Sidney observaron entre los reinos de gloria. Como puedes ver en Doctrina y Convenios 76:94–95, las bendiciones que reciben los que alcanzan la gloria Celestial son excelsamente superiores a las que reciben quienes heredan el Reino Telestial.

Doctrina y Convenios 76:113–119

José Smith y Sidney Rigdon explican lo que deben hacer las personas para hacerse merecedoras de ver y comprender por sí mismas los misterios del Reino de Dios

En Doctrina y Convenios 76:113–119 el profeta José Smith y Sidney Rigdon explican que recibieron el mandato de no escribir todo lo que les fue mostrado. También explicaron lo que deben hacer las personas para hacerse merecedoras de ver y comprender por sí mismas los misterios del Reino de Dios. Lee Doctrina y Convenios 76:116 y busca lo que debe hacer una persona para hacerse merecedora de ver y comprender los misterios del Reino de Dios por el poder del Espíritu Santo.

De acuerdo con el versículo 116, ¿qué debe hacer una persona para hacerse merecedora de ver y comprender los misterios del Reino de Dios por el poder del Espíritu Santo?

  1. Escribe en tu diario de estudio de las Escrituras una respuesta a la situación ficticia que se planteó al inicio de la lección, en la que un amigo te pregunta lo que la Iglesia enseña sobre el cielo y el infierno. Responde las preguntas siguientes como parte de tu respuesta a la pregunta de tu amigo.

    1. ¿Qué ha revelado el Señor acerca del cielo y el infierno en Doctrina y Convenios 76?

    2. ¿Qué diferencias hay entre los grados de gloria y las tinieblas de afuera?

    3. ¿En qué se diferencian las decisiones que tomaron las personas que heredan los diversos reinos y las tinieblas de afuera?

  2. Para ayudarte a poner en práctica lo que aprendiste en tu estudio de Doctrina y Convenios 76, completa cada una de las declaraciones siguientes en tu diario de estudio de las Escrituras:

    Como resultado de lo que he aprendido de mi estudio de Doctrina y Convenios 76:

    1. Yo creo o sé que…

    2. Yo quiero…

    3. Yo haré lo siguiente:

Doctrina y Convenios 77

El Señor revela respuestas a las preguntas de José Smith en cuanto al libro de Apocalipsis

Abre tu ejemplar de las Escrituras en Doctrina y Convenios 77, y fíjate en qué se diferencia el formato de los versículos al de otras secciones de Doctrina y Convenios. Lee la introducción de Doctrina y Convenios 77 para averiguar lo que el Profeta estaba haciendo cuando recibió esa revelación.

Desde marzo de 1831 hasta julio de 1833, el profeta José Smith hizo revisiones inspiradas al Nuevo Testamento. (Muchas de esas revisiones están reseñadas en las notas al pie de página de la edición SUD de la Biblia, indicadas con TJS, y en la sección Traducción de José Smith, incluida en el Apéndice, donde aparecen en cursiva las palabras cambiadas). Cuando el Profeta estaba trabajando en el libro de Apocalipsis, le preguntó al Señor acerca del significado de algunos versículos. Tanto las preguntas de José como las respuestas del Señor se encuentran registradas en Doctrina y Convenios 77. Revisa algunos de esos versículos y observa que una P antecede a cada pregunta que José Smith formuló al Señor, y una R precede a las respuestas del Señor.

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mujer joven leyendo las Escrituras

La experiencia de José Smith al recibir la revelación de Doctrina y Convenios 77 nos enseña que el Señor revela la interpretación correcta de las Escrituras mediante Sus profetas. También aprendemos que si preguntamos al Señor, Él nos puede ayudar a entender las Escrituras.

Puede resultarte de utilidad saber que en Doctrina y Convenios 77:6, los 7000 años hacen referencia a la existencia temporal de la tierra, es decir, comenzando desde la Caída de Adán. No es un comentario sobre la edad de la tierra.

  1. Escribe lo siguiente en tu diario de estudio de las Escrituras al final de las asignaciones de hoy:

    He estudiado Doctrina y Convenios 76:81–119; 77 y he terminado esta lección el (fecha).

    Preguntas adicionales, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con mi maestro: