Historia de la Iglesia
La Iglesia llega a Colombia


“La Iglesia llega a Colombia”, Historias mundiales: Colombia, 2022

“La Iglesia llega a Colombia”, Historias mundiales: Colombia

La Iglesia llega a Colombia

Empezando en 1963, los líderes de la Iglesia empezaron a explorar el potencial para predicar el Evangelio restaurado en Ecuador, Colombia y Venezuela. Luego de que el Pabellón Mormón en la Feria Mundial de Nueva York de 1964 reuniera más de 90 referencias de la región —31 eran de Colombia— los líderes de la Iglesia sintieron que era el momento correcto.

El 11 de mayo de 1966, el élder Spencer W. Kimball, del Cuórum de los Doce Apóstoles, reunió a miembros, misioneros y otras personas en el Parque Nacional Enrique Olaya Herrera de Bogotá. Caía una suave lluvia mientras el grupo se amontonaba en un pequeño pabellón. Kimball les pidió a algunos miembros del grupo compartir sus testimonios y, luego de que el grupo cantara un himno, ofreció una oración dedicatoria bendiciendo la nación de Colombia y abriendo la tierra para la prédica del Evangelio. Esa noche, Kimball organizó la Rama Colombia en Bogotá, con Harold M. Rex como presidente, y, en los días siguientes, los misioneros Randall Harmsen y Jerry Broome comenzaron a buscar las referencias de la Feria Mundial. En julio, Harmsen y Broome empezaron a enseñar a las familias Mendoza y Hernández, quienes habían visitado la Feria, y en el curso de semanas se bautizó Medardo Antonio Vela Hernández, y se convirtió en el primer miembro de la Iglesia en Colombia.

En poco tiempo llegó el aviso a la Misión Andes de que un miembro nuevo de Costa Rica, llamado Enrique Castillo, se había mudado recientemente a Cali, Colombia. Se enviaron dos misioneros a Cali en junio de 1966, para encontrar a la familia Castillo. A las pocas horas de su llegada, los misioneros se encontraron con los Castillo y el domingo siguiente se realizaron las primeras reuniones de la Iglesia en Cali, en el hogar de los Castillo. Los Castillo y los misioneros empezaron a invitar a otras personas a unirse a ellos en sus reuniones, y la rama fue creciendo. Aura Ivars, quien estaba contratada para cocinar para los misioneros, llegó a asistir regularmente a la rama, pero aún tenía ciertas reservas sobre unirse a la Iglesia. Sin embargo, cuando terminó de leer el Libro de Mormón, le dio su ejemplar a los misioneros y les dijo: “Bautícenme”. En noviembre, Ivars llegó a ser una de las primeras miembros de la Iglesia bautizados en Cali.

Poco después, la familia Castillo se mudó a Bucaramanga, una ciudad a 764 kilómetros (475 millas) al noreste de Cali. En un año, la Rama Bucaramanga competía con las ramas de Bogotá y Cali en tamaño y actividad. Cuando se creó la Misión Colombia-Venezuela en julio de 1968, poco más de dos años después de que el élder Kimball dedicara el país, se habían organizado doce ramas en Bogotá, Cali, Bucaramanga, Medellín y Pereira, y se había bautizado a casi 800 personas.