Si he dejado de mirar pornografía por mí mismo, ¿todavía tengo que hablar con el obispo?
Si has estado mirando pornografía, se te alienta a “[buscar] la ayuda que necesites; tus padres y el obispo pueden ayudarte a tomar los pasos necesarios para arrepentirte y librarte de este hábito destructivo” (Para la Fortaleza de la Juventud, 2011, pág. 12).
Si has dejado de mirar pornografía por ti mismo, la pregunta realmente no es si todavía se te “requiere” que hables de ello con tu obispo. La verdadera pregunta sería: “¿Por qué no hablar con mi obispo?”. En realidad no pierdes nada al hacerlo. Él será comprensivo y te dará aliento, y se sentirá complacido con los esfuerzos que has hecho para abandonar tus pecados del pasado. El obispo te ayudará a resolver todo remanente de duda que puedas tener en cuanto a tu dignidad y la rigurosidad de tu arrepentimiento, y te puede ayudar a fortalecer tu fe y tu confianza en Jesucristo y en Su sacrificio expiatorio. Por razones similares, también podrías considerar la posibilidad de hablar con tus padres.