2017
4 de las mejores estrategias de Satanás y cómo oponerte a ellas
2017 – Artículos digitales


4 de las mejores estrategias de Satanás y cómo oponerte a ellas

Imagen
chess pieces

¿Cómo pasa Satanás sus días, sabiendo que no tiene tiempo que perder? El apóstol Pedro escribió que “el diablo, cual león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar” (1 Pedro 5:8). Debemos estudiar las tácticas del enemigo a fin de vencerlo. Comparto cuatro estrategias comprobadas de Satanás y algunas ideas de cómo resistirlas.

1. La tentación.

Nos atosiga para que cedamos a deseos adictivos, al egoísmo y a la codicia. ¿Cómo podemos resistir esa tentación directa? Jesús utilizó una técnica defensiva de dos pasos: primero ordenó a Satanás que se marchase; después citó las Escrituras. Ustedes tienen derecho a decirle a Satanás que se marche cuando afrontan tentaciones. Existe gran poder en memorizar Escrituras, como lo hizo Jesús. El poder de las Escrituras no solo intimida a Satanás, sino que también invita al Espíritu en el corazón.

2. Mentiras y engaños

Al diablo se le ha llamado “el gran impostor”. Él intenta falsificar cada principio verdadero que presenta el Señor. Aunque Satanás les mienta, ustedes pueden contar con que el Espíritu les dirá la verdad. Es por eso que el don del Espíritu Santo es tan esencial.

3. Contención

Satanás es el padre de la contención. Le encanta ver discutir a la gente buena. Cuando haya contención en sus hogares o en su lugar de trabajo, dejen de hacer inmediatamente lo que sea que estén haciendo y procuren establecer la paz. No importa quién empezó.

4. El desánimo

Cuando todo lo demás falla, Satanás utiliza esta herramienta eficazmente con los santos más fieles. El presidente Ezra Taft Benson (1899–1994) dio unas sugerencias para luchar contra el desánimo. Sus sugerencias incluían prestar servicio a los demás; trabajar arduamente y evitar la ociosidad; poner en práctica buenos hábitos de salud; procurar una bendición del sacerdocio; escuchar música inspiradora; contar tus bendiciones y fijar metas. Sobre todo, como enseñan las Escrituras, debemos orar siempre para que vencer a Satanás (véase D. y C. 10:5).