El poder, las bendiciones y las verdades del Libro de Mormón: Mensajes recientes de los profetas y apóstoles

“… [E]l Señor […] también desea que comprendamos el núcleo central de Su doctrina y mensaje, que es la razón por la cual nos ha dado el don del Libro de Mormón.

“El Libro de Mormón se centra en Jesucristo, contiene el núcleo mismo de Su mensaje. Fue escrito para nosotros en nuestros días, para nuestra vida. A medida que estudiemos, meditemos y apliquemos los principios que se enseñan en sus páginas, recibiremos fortaleza para centrar nuestra vida en Jesucristo y disfrutar de las gozosas bendiciones que Él nos promete, ahora y para siempre”.

“En 2020, nuestro profeta, el presidente Russell M. Nelson, nos alentó a escucharlo a Él (#Escúchalo): a buscar la guía y dirección del Señor en nuestra vida personal. Una de las mejores maneras de buscar revelación personal es estudiar las Escrituras. La palabra del Señor que se encuentra en las Escrituras es como una lámpara que guía nuestros pies (véase Salmos 119:105) y la revelación es como una fuerza poderosa que aumenta en gran manera la iluminación de la lámpara.

“La idea de que la lectura de las Escrituras conduce a la inspiración y la revelación abre la puerta a la verdad de que un pasaje de las Escrituras no se limita a su significado original, sino que también puede incluir otro para el lector actual. Lo que un pasaje del Libro de Mormón significaba para mí cuando lo leí por primera vez a los dieciséis años no es igual para mí cuando lo leo a los ochenta y cinco años. Con la ventaja de las experiencias de mi vida y una mayor familiaridad con la revelación, al leer las Escrituras hoy puedo aprender cosas que no estaban a mi alcance ayer.

“En virtud de nuestra creencia de que la lectura de las Escrituras puede ayudarnos a recibir revelación, se nos insta a leerlas una y otra vez. Esa es una razón por la cual los Santos de los Últimos Días creen en el estudio diario de las Escrituras. Por ese medio, obtenemos acceso a lo que nuestro Padre Celestial quiere que sepamos y hagamos hoy en nuestra vida personal”.

“Siempre me inspiran los pasajes de las Escrituras que describen, de una manera extraordinaria, los tiempos en los que vivimos en la actualidad.

“‘Y en ese día se oirá de guerras y rumores de guerras, y toda la tierra estará en conmoción, y desmayará el corazón de los hombres […]. Y el amor de los hombres se enfriará, y abundará la iniquidad’ (Doctrina y Convenios 45:26–27).

“Una de las palabras que me llama la atención en el versículo 26 es ‘conmoción’, que es sinónimo de disturbios, alboroto, agitación, desorden, confusión, turbulencia, inquietud y perturbación. Sin duda, somos testigos casi todos los días de una creciente conmoción en todo el mundo.

“¿Dónde podemos hallar paz y seguridad en medio de toda la conmoción?

“El Libro de Mormón.

“No somos las únicas personas que viven en tiempos difíciles. Testifico que el Libro de Mormón es la palabra de Dios y que fue escrito para nuestros días. Es la fuente de seguridad y paz en nuestros atribulados últimos días.

“A medida que dediquen tiempo a estudiar el Libro de Mormón, les prometo que notarán una mayor medida de paz en su vida.

“¿De qué manera el estudio del Libro de Mormón te ha brindado paz?”.

“El Libro de Mormón: Otro Testamento de Jesucristo testifica de la realidad viviente y divinidad de nuestro Salvador y Redentor. Es la palabra de Dios, y nos advierte y nos prepara para el mundo en el que vivimos ahora. Me encantan las palabras que Mormón comparte con su hijo en Moroni 9:25: 

“‘Hijo mío, sé fiel en Cristo; y que las cosas que he escrito no te aflijan, para apesadumbrarte hasta la muerte; sino Cristo te anime, y sus padecimientos y muerte, y la manifestación de su cuerpo a nuestros padres, y su misericordia y longanimidad, y la esperanza de su gloria y de la vida eterna, reposen en tu mente para siempre’.

“Las enseñanzas de Cristo nos elevarán. La esperanza que Él brinda nos ayudará a superar los desafíos de la vida. Los invito a leer sobre Él, a aprender de Él y a seguirlo”.

“Durante los últimos ocho años, una de mis asignaciones fue repasar y leer todos los excepcionales papeles y documentos de José Smith y la investigación que llevó a la publicación de ‘Santos’, un libro que documenta la historia de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

“Mi testimonio y admiración por el profeta José Smith se ha fortalecido inmensamente y ha aumentado después de leer los inspiradores detalles de su vida y de su ministerio profético preordenado.

“La traducción de José del Libro de Mormón por el don y el poder de Dios fue fundamental para la Restauración. El Libro de Mormón posee consistencia interna, está escrito de manera hermosa y contiene las respuestas a los grandes interrogantes de la vida. Es un compañero de la Santa Biblia y es otro testamento de Jesucristo”.

“Hay cientos, incluso miles de enseñanzas y experiencias en el Libro de Mormón que pueden ayudarnos a transformarnos en quienes deseamos ser. Al abrir el Libro de Mormón a diario, serás bendecido para ver las lecciones que debes aprender”.

“Como miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, nuestro estudio del Libro de Mormón como otro testamento de Jesucristo y como compañero de la Santa Biblia es un elemento fundamental de nuestra fe […].

“Te invito a leer el Libro de Mormón y a seguir las enseñanzas de Jesucristo que se encuentran en este santo libro. Al hacerlo, podrás hallar mayor gozo y paz en esta vida y en la vida venidera. Sé que esto es verdad”.

“En una reunión reciente con misioneros, me preguntaron: ‘¿Qué es el Libro de Mormón para usted?’.

“Para responder, acudí al Libro de Mormón, a la Introducción del Libro de Mormón. Cerca del final, dice lo siguiente: ‘Invitamos a toda persona, dondequiera que se encuentre, a leer el Libro de Mormón, a meditar en su corazón el mensaje que contiene y luego a preguntar a Dios, el Padre Eterno, en el nombre de Cristo, si el libro es verdadero. Quienes así lo hagan y pidan con fe lograrán un testimonio de la veracidad y la divinidad del libro por el poder del Espíritu Santo’.

“Ese soy yo. Eso es lo que el Libro de Mormón significa para mí. Llegué a saber, por el poder del Espíritu Santo, que el Libro de Mormón es verdadero.

“Luego, el último párrafo dice lo siguiente: ‘Aquellos que obtengan este testimonio divino del Santo Espíritu también llegarán a saber, por el mismo poder, que Jesucristo es el Salvador del mundo, que José Smith ha sido Su revelador y profeta en estos últimos días, y que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días es el reino del Señor que de nuevo se ha establecido sobre la tierra, en preparación para la segunda venida del Mesías’.

“Todos los aspectos de esos dos párrafos de la Introducción del Libro de Mormón se aplican a mí. Es el comienzo de cómo llegué a saber que Jesús es el Cristo. Es el principio de mi conocimiento de la Iglesia, el principio de mi conocimiento de José Smith. Es la piedra clave de mi religión. Es su fundamento.

“Amo el Libro de Mormón y sé que las personas se acercarán más al Padre Celestial y a Jesucristo al seguir sus preceptos que por cualquier otro medio. Sé que esto es verdad para mí y es verdad para ti”.