Cuándo debe recibir su bendición patriarcal

Ayer, mi querido amigo, el élder Randall K. Bennett habló sobre las bendiciones patriarcales. Fue un gran mensaje que nos inspiró a todos. Mis queridos hermanos y hermanas, ¿me permiten que también les hable sobre las bendiciones patriarcales? Patriarcas, conforme aumenten las solicitudes para recibir bendiciones patriarcales, ruego que el Señor los bendiga al seguir magnificando su llamamiento.

Al asistir a las conferencias de estaca, siempre converso con el patriarca de la estaca y su esposa. Los patriarcas son líderes amables, obedientes e increíbles llamados por Dios. Ellos me cuentan experiencias espirituales maravillosas. Yo les pregunto la edad de la persona más joven y la de más edad a quien hayan dado una bendición. Hasta ahora, la persona más joven tenía once y la mayor tenía noventa y tres.

Yo recibí mi bendición patriarcal siendo un miembro nuevo en la Iglesia, a los diecinueve años, dos años después de haber sido bautizado. Mi patriarca era muy entrado en años; él se unió a la Iglesia en 1916 y fue un pionero de la Iglesia en Japón. Fue un gran honor para mí recibir mi bendición patriarcal de un discípulo de Dios tan extraordinario. Me fue un poco difícil entender el japonés que hablaba, pero fue poderoso.

Los patriarcas que he conocido me dicen que muchas personas reciben sus bendiciones patriarcales justo antes de servir en una misión. Mis queridos jóvenes y jovencitas, padres y obispos; las bendiciones patriarcales no son solamente una preparación para servir en una misión. Los miembros bautizados que son dignos pueden recibir sus bendiciones patriarcales cuando sea el tiempo apropiado para ellos¹.

Queridos miembros adultos, algunos de ustedes no han recibido sus bendiciones patriarcales aún. Recuerden, no hay una edad máxima.

Mi suegra era una miembro muy activa de la Iglesia, que sirvió como maestra de la Sociedad de Socorro hasta que falleció a los noventa y un años. Me entristeció saber que ella no recibió su bendición patriarcal. Ella experimentó muchas dificultades en su vida y debido a que no tenía a un poseedor del sacerdocio en su hogar, no recibió muchas bendiciones del sacerdocio. Una bendición patriarcal podría haberle brindado consuelo cuando más lo necesitaba.

Adultos, si aún no han recibido una bendición patriarcal, ¡no se preocupen! El calendario espiritual de cada persona es diferente. Si usted tiene treinta y cinco u ochenta y cinco, y tiene el deseo, hable con su obispo sobre cómo recibir su bendición.

Y ustedes, miembros nuevos de la Iglesia, ¿han oído sobre las bendiciones patriarcales? Cuando me uní a la Iglesia, no sabía que tenía la oportunidad de recibir una, pero mi amado obispo me habló de las bendiciones patriarcales y me alentó a prepararme para recibir la mía después de ser bautizado. Mis queridos miembros nuevos, ustedes también pueden recibir una bendición patriarcal. El Señor los ayudará a prepararse para esta oportunidad sagrada.

Consideremos dos propósitos de una bendición patriarcal:

1. La bendición patriarcal contiene el consejo personal del Señor para ustedes².

2. La bendición patriarcal declara su linaje en la casa de Israel.

Su bendición patriarcal también es un mensaje del Padre Celestial que seguramente incluirá promesas y consejo inspirado para guiarlos en el transcurso de su vida. En la bendición patriarcal no está planificada toda su vida ni se hallarán las respuestas a todas sus preguntas. Si no menciona un evento importante en su vida, no supongan que eso significa que no tendrán esa oportunidad. Del mismo modo, no hay una garantía de que todo lo que esté en sus bendiciones patriarcales llegará a pasar en esta vida. Las bendiciones patriarcales son eternas y, si viven de forma digna, las promesas que no se cumplan en esta vida, se cumplirán en la siguiente³.

Al recibir la declaración de su linaje, llegarán a saber que son de la casa de Israel y de la descendencia de Abraham⁴. Para entender el significado de esto, céntrense en las promesas que el Señor hizo a la casa de Israel por medio de Abraham.

Tales promesas incluyen que:

• “Su posteridad sería numerosa” (véanse Génesis 17:5–6; Abraham 2:9; 3:14).

• “Sus descendientes recibirían el Evangelio y poseerían el sacerdocio” (véase Abraham 2:9).

• “Por medio del ministerio de sus descendientes, ‘ser[ían] bendecidas todas las familias de la tierra, sí, con las bendiciones del evangelio, que son las bendiciones de salvación, sí, de vida eterna’” (Abraham 2:11)⁵.

Como miembros de la Iglesia, somos hijos del convenio⁶. Recibimos las bendiciones del convenio abrahámico al obedecer las leyes y ordenanzas del Evangelio.

La preparación para recibir su bendición patriarcal les ayudará a incrementar su fe en el Padre Celestial y en Jesucristo. Y cuando reciban su bendición patriarcal, la lean y mediten en ella, podrán centrarse en Ellos más a menudo.

El presidente Thomas S. Monson explicó que: “El mismo Señor que le proporcionó la Liahona a Lehi, nos brinda a nosotros hoy un don valioso y excepcional que proporciona guía a la vida, que marca los peligros que se nos interponen y nos traza el camino, un sendero seguro, no hacia una tierra prometida, sino hacia nuestro hogar celestial”⁷.

Mis queridos obispos, padres, presidentes del cuórum de élderes y de la Sociedad de Socorro; líderes misionales, hermanos y hermanas ministrantes, por favor, alienten a los hombres jóvenes y las mujeres jóvenes, a miembros adultos y miembros nuevos, que aún no han recibido sus bendiciones patriarcales, a buscar la guía del Señor y ayúdenlos a prepararse para ello.

Con frecuencia y con espíritu de oración leo mi bendición patriarcal y siempre me infunde ánimo. Reconozco lo que el Señor espera de mí y eso me ha ayudado a arrepentirme y a ser humilde. Cuando la leo y medito en ella, deseo vivir digno de recibir las bendiciones que allí se prometen.

Así como los pasajes de las Escrituras que hemos leído muchas veces tienen más adelante un nuevo significado para nosotros, la bendición patriarcal tendrá un significado diferente para nosotros en distintas épocas. La mía tiene ahora un significado distinto del que tenía cuando yo tenía treinta o cuando tenía cincuenta años. No es que las palabras cambien, pero las vemos de una forma diferente.

El presidente Dallin H. Oaks declaró que una bendición patriarcal “se da mediante la inspiración del Espíritu Santo y debe leerse e interpretarse mediante la influencia de ese mismo Espíritu. El significado y la trascendencia de la bendición patriarcal se enseñarán línea por línea con el transcurso del tiempo por el poder del mismo Espíritu que inspiró [la] bendición”⁸.

Hermanos y hermanas, testifico que el Padre Celestial y Su Hijo Amado y Unigénito, el Señor Jesucristo, viven. Ellos nos aman. La bendición patriarcal es un don sagrado que Ellos nos dan. Cuando ustedes reciban su bendición, se darán cuenta y sentirán cómo Ellos los aman y cómo se centran en ustedes de forma individual.

El Libro de Mormón es otro testamento de Jesucristo; y estoy agradecido por ser guiado por un profeta viviente, el presidente Russell M. Nelson.

Me siento muy agradecido por nuestro Salvador, Jesucristo. Este domingo de Pascua de Resurrección, me centraré en Él y en Su resurrección, en adorarlo y en dar gracias por Su sacrificio. Sé que Él sufrió profundamente, porque Él nos ama profundamente. Sé que Él resucitó debido a Su amor por nosotros. Él es real. De ello testifico en el nombre de Jesucristo. Amén.