El primer templo en África Occidental
Poco después de su bautismo, Joseph William Billy Johnson tuvo un sueño en el que espíritus de personas que habían fallecido lo visitaron y le preguntaron qué podía hacer él por ellos. “¿Qué podía hacer?”, se preguntó. Él comprendió que los Santos de los Últimos Días podían efectuar bautismo por los antepasados muertos en los templos, pero también sabía cuán lejos se encontraban los templos más cercanos. Él y otros santos ghaneses oraron y ayunaron por muchos años para que se construyera un templo en su país natal.
En febrero de 1998, Gordon B. Hinckley fue el primer Presidente de la Iglesia que visitó Ghana. Él había visitado el país cinco años antes como miembro de la Primera Presidencia con la esperanza de encontrar un lugar apto para construir un templo, pero no tuvo éxito. Ahora bien, en la mañana del 16 de febrero, él y el élder Jeffrey R. Holland visitaron el posible sitio para el templo en una de las principales vías de Accra. Después de un análisis, el presidente Hinckley le preguntó al élder Holland sobre lo que pensaba del sitio. “Pienso que esta es la respuesta a la oración”, señaló. El presidente Hinckley respondió: “Es probable que me sienta como Brigham Young se sintió cuando llegó al Valle del Lago Salado. Este es el lugar. Compremos el sitio y continuemos con el proceso de construcción”.
Esa tarde, él y el élder Holland se reunieron con más de 6000 miembros de la Iglesia en Black Star Square, una plaza grande y al aire libre en Accra. “Han vivido por mucho tiempo sin un templo”, dijo el profeta. Luego anunció que había comprado un hermoso lote de terreno en Accra esa misma mañana en el que se erigiría el templo.
Los miembros en la multitud se pusieron de pie rápidamente de sus asientos y empezaron a ovacionar con entusiasmo, muchos lloraron e intercambiaron abrazos. “Grité de alegría entre la multitud”, recordó Nesmeekia Engman, “porque sabía lo que significaba tener un templo en mi país”. Después de años de esperar pacientemente, Joseph William Billy Johnson se regocijó en extremo: “Ahora podemos comenzar a hacer la obra del templo para nuestros antepasados”.
Se dio la palada inicial en noviembre de 2001 y el 11 de enero de 2004, el Templo de Accra, Ghana fue el primero dedicado en África Occidental.