El apóstol Juan vio en visión al Cordero de Dios que abría los seis primeros sellos del libro sellado. En el sexto sello, que simboliza esta dispensación de los últimos días, Juan vio a los siervos de Dios que habían “lavado sus ropas y las [habían] blanqueado en la sangre del Cordero” (véase Apocalipsis 7:14).
Juan vio al Cordero de Dios que abría los seis primeros sellos del libro sellado
¿Cuáles son algunas preocupaciones o temores que tú o personas que conozcas podrían tener en cuanto a vivir en los últimos días?
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Prophet Joseph Smith
El profeta José Smith enseñó cómo se sentían los profetas de la antigüedad sobre nuestra época: “La edificación de Sión es una causa que ha interesado al pueblo de Dios en todas las edades; es un tema que los profetas, reyes y sacerdotes han tratado con gozo particular. Han mirado adelante, con gloriosa expectativa, hacia el día en que ahora vivimos; e inspirados por celestiales y gozosas expectativas, han cantado, escrito y profetizado acerca de ésta, nuestra época” (Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: José Smith, 2007, pág. 195).
¿Por qué creen que los profetas de la antigüedad se sentían así sobre nuestra época?
El apóstol Juan, también llamado Juan el revelador, fue uno de los profetas que supo en cuanto a los acontecimientos de los últimos días y profetizó sobre nuestros días con gozosas expectativas. Al estudiar Apocalipsis 6–7, busca las verdades que puedan brindarte consuelo a ti y a quienes conozcas sobre los acontecimientos de los últimos días.
Recuerda que Apocalipsis 5:1–5 da cuenta de que Juan vio un libro con siete sellos que solo el Cordero era digno de abrir. En su visión, Juan vio representaciones figurativas de algunos de los principales acontecimientos pertinentes a cada uno de los períodos de 1.000 años que representaban los siete sellos.
En el diario de estudio de las Escrituras, haz un dibujo sencillo que ilustre los acontecimientos de los primeros cinco sellos, que se hallan en las siguientes referencias. Al leer sobre cada sello, piensa en lo que podrían significar algunos de los simbolismos.
Aunque el Señor no ha revelado el significado de algunos símbolos que se hallan en las Escrituras, sí ha revelado el significado de muchos de ellos mediante Sus profetas. Conforme estudies las Escrituras y te surjan preguntas, puedes buscar los comentarios de los profetas para ver lo que han dicho las autoridades de la Iglesia acerca de ciertos pasajes. La información del siguiente cuadro te ayudará a entender algunos de los simbolismos que se encuentran en Apocalipsis 6:1–11 en cuanto a la apertura de los primeros cinco sellos.
Primer sello
(Aproximadamente 4000 a 3000 a. C.)
Caballo blanco = Victoria
Arco = Guerra
Corona = Conquistador
El élder Bruce R. McConkie, del Cuórum de los Doce Apóstoles, sugirió que Apocalipsis 6:1–2 describe la época de Enoc y que el jinete es Enoc (véase Doctrinal New Testament Commentary, 3 tomos, 1966–1973], tomo III, 476–478).
Segundo sello
(Aproximadamente 3000 a 2000 a. C.)
Caballo rojo = Derramamiento de sangre
Espada = Guerra y destrucción
El élder McConkie propuso que Apocalipsis 6:3–4 describe la época de Noé, cuando la iniquidad cubría la tierra. El jinete del caballo rojo podría ser el diablo mismo o, quizás, “una persona que representa a muchos guerreros que matan” (véase Doctrinal New Testament Commentary, tomo III, págs. 478–479).
Tercer sello
(Aproximadamente 2000 a 1000 a. C.)
Caballo negro = Hambruna
Balanzas = Precio de los alimentos muy elevados
El élder McConkie indicó que Apocalipsis 6:5–6 describe la época de Abraham, cuando muchas personas murieron de hambre (véase Doctrinal New Testament Commentary, tomo III, págs. 479–480). Una persona podía comprar alimentos suficientes para subsistir con el salario de un día completo, lo que indica precios de una hambruna extrema.
Cuarto sello
(Aproximadamente 1000 a. C. hasta el nacimiento de Cristo)
Caballo amarillo = Muerte
Muerte y Hades [infierno] = La destrucción de los inicuos y su recibimiento en la cárcel de los espíritus (véase Isaías 5:14)
El élder McConkie propuso que Apocalipsis 6:7–8 se refiere a la época “de aquellos grandes reinos y naciones cuyas guerras y traiciones atormentaron e invadieron a [Israel] una y otra vez” (véase Doctrinal New Testament Commentary, tomo III, pág. 481). Entre esas naciones se encontraban Babilonia, Persia, Egipto, Grecia y Roma.
Quinto sello
(Alrededor del nacimiento de Cristo a 1000 d. C. )
Altar = Sacrificio
Almas = Mártires; cristianos asesinados por sus creencias
El élder McConkie planteó que Apocalipsis 6:9–11 se refiere a los numerosos primeros cristianos, incluso la mayoría de los primeros apóstoles, quienes murieron como mártires (véase Doctrinal New Testament Commentary, tomo III, pág. 482–483). Puesto que dichos santos entregaron la vida “por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que ellos tenían” (Apocalipsis 6:9), se les dieron “vestiduras blancas” (Apocalipsis 6:11), que son un símbolo de pureza (véanse Apocalipsis 7:13–14; 3 Nefi 27:19).
El sexto sello representa nuestro propia época y los acontecimientos —particularmente las calamidades— que anteceden al Milenio, en el cual Jesucristo reinará en persona sobre la tierra (véase de Bruce R. McConkie, Doctrinal New Testament Commentary, tomo III, págs. 485–486).
Observa que en Apocalipsis 6:16 se describe cuán desesperadamente procurarían algunas personas escapar de la ira de Dios. Juan luego plantea la pregunta: “¿Y quién podrá permanecer de pie?” (Apocalipsis 6:17). Apocalipsis 7 nos ayuda a entender quién será capaz de permanecer, es decir, resistir, ante las catástrofes del sexto sello.
El élder Bruce R. McConkie explicó que la palabra Elías, tal como se halla en Doctrina y Convenios 77:9, es “un nombre y un título para aquellos cuya misión era encomendar llaves y poderes a los hombres en esta dispensación final” (Mormon Doctrine, 2da. edición, 1966, pág. 221).
Algunos de los hombres que vinieron a entregar llaves y poderes fueron Adán; Moroni; Juan el Bautista; Pedro, Santiago y Juan; Moisés; y Elías el Profeta.
El sello o marca “en sus frentes a los siervos de nuestro Dios” (Apocalipsis 7:3) es una metáfora de su dedicación y servicio, y de su pertenencia a Dios.
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Prophet Joseph Smith
El profeta José Smith enseñó que el sello de los fieles en la frente “significa sellar las bendiciones sobre su cabeza, es decir, el convenio sempiterno, y de ese modo hacer firme su vocación y elección” (en History of the Church, tomo V, pág. 530).
El número 144.000 que se menciona en Apocalipsis 7:4 “es el número de representantes de las doce tribus de Israel que se ordenarán para ayudar a otras personas en su búsqueda de la exaltación… No es, como algunos creen, el número total de personas que serán exaltadas” (Nuevo Testamento, Manual del alumno [manual del Sistema Educativo de la Iglesia, 2014], pág. 544).
Tal como indica Apocalipsis 9, Juan se refirió de nuevo a esos siervos rectos. Lee Apocalipsis 9:3–4 para saber lo que les ocurriría a quienes no han sido sellados como siervos de Dios.
Lee Apocalipsis 7:9–10 para saber lo que vio Juan. Fíjate cómo estaban vestidas las personas.
Como se nos dice en Apocalipsis 7:11–12, Juan vio que esas personas, junto con los 24 ancianos [élderes] y los cuatro seres vivientes mencionados en Apocalipsis 4, rodeaban el trono de Dios y lo adoraban a Él.
Lee Apocalipsis 7:13–17 en busca de las respuestas a las siguientes preguntas. Si lo deseas, marca lo que encuentres.
¿Qué habían sobrellevado aquellas personas?
¿Cómo se blanquearon sus vestiduras?
¿Qué bendiciones recibirán?
Observa que las vestiduras de las personas se habían “blanqueado en la sangre del Cordero” (Apocalipsis 7:14), que es un símbolo de la purificación de la gente mediante la expiación de Jesucristo. Las bendiciones que están en los versículos 16–17 describen el gozo, la paz y la dedicación de quienes heredan la gloria celestial (véase también D. y C. 138:12–15).
En esos versículos aprendemos que si sobrellevamos las tribulaciones fielmente y llegamos a ser puros mediante la expiación de Jesucristo, disfrutaremos la gloria celestial con Dios.
Piensa en cómo sería y cómo te sentirías si pudieras estar puro en la presencia de Dios. ¿Cómo compararías esos sentimientos a los de las personas que se describen en Apocalipsis 6:16?
Contesta las siguientes preguntas en tu diario de estudio de las Escrituras:
¿Qué debemos hacer para que el Salvador pueda purificarnos mediante Su expiación?
¿De qué manera el recordar las bendiciones de la gloria celestial te ha ayudado en tus esfuerzos por sobrellevar las tribulaciones y llegar a ser puro?
Repasa la lista de preocupaciones que escribiste al principio de la lección. Considera la forma en que el principio que hallaste en Apocalipsis 7 puede ayudarte cuando te sientes preocupado por vivir en los últimos días.
Si lo deseas, dedica unos minutos a meditar y orar en tu corazón sobre cómo puedes aplicar esos principios en tu vida.
Escribe lo siguiente en tu diario de estudio de las Escrituras al final de las asignaciones de hoy:
He estudiado Apocalipsis 6–7 y he terminado esta lección el (fecha).
Otras preguntas, ideas y reflexiones que me gustaría compartir con el maestro: