Biblioteca
Albedrío


“Albedrío”, Temas y preguntas, 2023

Imagen
mujer de pie ante un camino que se divide

Guía para el estudio del Evangelio

Albedrío

El don de escoger y actuar por nosotros mismos

Antes de nacer, usted vivió como hijo o hija espiritual de Dios. Aprendió acerca del plan que el Padre Celestial preparó para que usted progrese y llegue a ser semejante a Él. Él le dio el don del albedrío moral, lo cual significa que tiene la libertad de seguir a Dios y Su plan, o no hacerlo (véase Doctrina y Convenios 101:78). El principio del albedrío le da el poder de actuar por sí mismo (2 Nefi 2:16). También significa que tiene que asumir la responsabilidad de sus decisiones (véase Helamán 14:29–31).

En el mundo preterrenal, Satanás “pretendió destruir el albedrío del hombre” (Moisés 4:3), y muchos lo siguieron (véase Doctrina y Convenios 29:35–36). El hecho de que usted esté aquí en la tierra significa que utilizó su albedrío para aceptar el plan de Dios y seguirlo (véase Abraham 3:24–26, 28). Mediante la guía del Espíritu Santo, Dios lo fortalecerá en sus esfuerzos por utilizar el albedrío moral para seguirlo. Cuando escoja ser recto, descubrirá mayor paz y gozo, y con el tiempo, será digno de recibir la vida eterna.

¿Qué es el albedrío?

Dios ha dado a Sus hijos la capacidad y el privilegio de “actuar por sí mismos, y no […] que se actúe sobre ellos” (2 Nefi 2:26). Eso significa que podemos elegir si queremos o no obedecer los mandamientos de Dios. Experimentaremos las consecuencias, buenas o malas, de nuestras decisiones. Dios describió este don como “albedrío moral” (Doctrina y Convenios 101:78).

Reseña del tema: Albedrío y responsabilidad

Guías de estudio del Evangelio relacionadas: Plan de Salvación, Vida preterrenal, Vida terrenal, Obediencia 

Sección 1

Usted es responsable de las decisiones que toma en esta vida

Imagen
una mujer caminando en la calle

Cada día uno toma cientos de decisiones con respecto a las cosas en las que piensa, lo que dice y lo que hace. El presidente Thomas S. Monson dijo que algunas de nuestras decisiones “no marcarán ninguna diferencia en el orden eterno de las cosas, mientras que otras marcarán toda la diferencia”1. Con la ayuda de Dios, usted puede saber qué decisiones son las más importantes.

Una de las razones por las que Dios manda a Sus hijos a la tierra es para “probar[los], para ver si harán todas las cosas que el Señor su Dios les mandare” (Abraham 3:25). En este mundo, usted afronta “oposición en todas las cosas” (2 Nefi 2:11), lo que le aporta innumerables oportunidades de ejercer su albedrío. Algún día, se le hará responsable de sus pensamientos, palabras y hechos (véase Mosíah 4:30). El modo en que use su albedrío moral dará forma a su experiencia en esta vida y en el mundo venidero.

Algo en qué pensar

  • El élder David A. Bednar explicó que “en la espléndida distribución de todas las creaciones de Dios, existen tanto las cosas que actúan como aquellas sobre las cuales se actúa (véase 2 Nefi 2:13–14). […] Habiendo sido dotados del albedrío, ustedes y yo venimos a ser agentes, y ante todo hemos de actuar y no permitir tan solo que se actúe sobre nosotros”2. ¿Cómo aclara esa declaración la diferencia que existe entre los hijos de Dios y Sus otras creaciones? ¿Por qué cree que el principio del albedrío moral es una parte esencial del plan de Dios para la salvación de Sus hijos?

  • Considere leer lo que Lehi enseñó a su hijo Jacob acerca de la importancia del albedrío en 2 Nefi 2:26–29. ¿Cómo describiría las experiencias de libertad y cautividad que se mencionan en este pasaje de las Escrituras? ¿Qué nos enseña este pasaje acerca de cómo “escoge[r] la vida eterna”?

Actividad para aprender con otras personas

  • Miren el video “Las diez vírgenes” (1:40) o lean juntos la parábola de las Diez Vírgenes en Mateo 25:1–13. Analicen lo que enseña esta parábola acerca del albedrío. Hablen acerca de las maneras en que pueden elegir prepararse para encontrarse con el Salvador.

Más información

Sección 2

Jesucristo escogió hacer la voluntad del Padre en todas las cosas

Imagen
Jesucristo de niño enseñando a unos hombres

Cuando Jesús tenía doce años, María y José descubrieron que no estaba con su familia mientras volvían a casa desde Jerusalén. Lo encontraron en el templo contestando preguntas de aquellos que estudiaban la ley de Dios. María le preguntó a Jesús si estaba al tanto de que lo habían estado buscando. Jesús respondió: “¿No sabíais que en los asuntos de mi Padre me es necesario estar?” (Lucas 2:49). Jesús siempre tomaba decisiones basándose en la voluntad de Su Padre (véanse Lucas 22:42; 3 Nefi 11:11; 27:13). Jesucristo es el ejemplo perfecto de usar el albedrío moral para escoger la rectitud por encima del interés propio y el pecado.

Algo en qué pensar

  • Jesucristo afrontó tentaciones durante Su vida terrenal, tal como nosotros (véanse Hebreos 4:15; Mosíah 3:7; Alma 7:11). Lea Mateo 4:1–11. ¿Qué puede aprender de la respuesta de Jesús cuando Satanás trató de hacer que Él escogiera inicuamente?

  • En el discurso “Vencer al mundo y hallar descanso”, el presidente Russell M. Nelson dijo: “¿Qué significa vencer al mundo? Significa vencer la tentación de preocuparse más por las cosas de este mundo que por las cosas de Dios. Significa confiar en la doctrina de Cristo más que en las filosofías de los hombres. Significa deleitarse en la verdad, denunciar el engaño y llegar a ser ‘humildes discípulos de Cristo’ [2 Nefi 28:14]. Significa optar por abstenerse de todo lo que aleje al Espíritu. Significa estar dispuestos a abandonar incluso nuestros pecados favoritos [Alma 22:18]”3. ¿Cómo puede el seguir el ejemplo de Jesucristo guiar nuestros esfuerzos por vencer al mundo?

  • ¿Cuáles son algunas de las cosas que pueden dificultarle someterse a la voluntad del Padre? ¿Qué puede hacer para someterse a Él más plenamente?

Actividad para aprender con otras personas

  • A menudo, nuestras decisiones no son entre lo correcto y lo incorrecto, ni entre lo bueno y lo malo. Lean juntos la siguiente declaración del presidente Dallin H. Oaks: “Al considerar varias opciones, debemos recordar que no es suficiente que algo sea bueno. Otras opciones son mejores e incluso otras son excelentes. A pesar de que una opción en particular cueste más, por el hecho de que su valor sea mayor, tal vez resulte ser la mejor elección de todas”4. Hablen sobre algunos principios que pueden servirles de guía al escoger entre opciones que sean buenas, mejores o excelentes. ¿Qué pueden aprender del ejemplo de Jesucristo al tomar esas decisiones?

Más información

Sección 3

Deje que Dios prevalezca en su vida

El presidente Russell M. Nelson enseñó: “Todos tenemos nuestro albedrío […]; podemos optar por dejar que Dios prevalezca en nuestras vidas, o no; podemos optar por dejar que Dios sea la influencia más poderosa en nuestras vidas, o no”5. Cuando de buena gana usted decide seguir a Dios en las decisiones que toma, demuestra que Su plan tiene prioridad en su vida.

Escoger creer es uno de los primeros pasos para utilizar adecuadamente su albedrío. Creer en Jesucristo aumenta su fe y confianza en Él. Cristo también desea que crea en Sus palabras reveladas por medio de Sus profetas a medida que continúa la restauración de la plenitud de Su evangelio. Al escoger tener fe y creer, recibirá mayor comprensión espiritual y hallará claridad al tomar decisiones. Su deseo de ser obediente aumentará, y es más probable que elija un camino que conduzca a la vida eterna.

Algo en qué pensar

  • El presidente Russell M. Nelson enseñó: “Manténgase en el camino de los convenios. Su compromiso de seguir al Salvador al hacer convenios con Él y luego guardar esos convenios abrirá la puerta a toda bendición y privilegio espiritual que están al alcance de hombres, mujeres y niños en todas partes”6. ¿Qué decisiones le han ayudado a progresar en la senda de los convenios del Señor? ¿Qué decisiones tomará que le ayudarán a permanecer en la senda?

Actividad para aprender con otras personas

  • Invite a otras personas a hablar sobre experiencias en las que la vida no resultó como esperaban. Hablen acerca de los pensamientos y sentimientos que tales experiencias pueden producir. Consideren leer juntos Isaías 55:8–9 y analizar por qué el principio de dejar que Dios prevalezca brinda paz y confianza.

Más información

Otros recursos acerca del albedrío