2021
“La misión te enseña a amar a los demás”
Octubre de 2021


Voces de los Santos

“La misión te enseña a amar a los demás”

“Nunca pensé que me iban a mandar a servir en Australia. Conocía los canguros y poco más…”. Lo dice con los ojos abiertos y la sonrisa amplia. Samuel Sánchez Santos es un exmisionero de la Rama de León, cuyo deseo de llevar el Evangelio al mundo le llevó a más de 17 000 km de casa. Y allí encontró la felicidad de servir a los demás como el Salvador.

Si bien es un chico resuelto, la primera reacción al abrir la carta que le enviaba a la Misión Australia-Melbourne fue de sorpresa. Aún tendría más tiempo para sorprenderse en Nueva Zelanda, donde se preparó como misionero. Era el único hispanohablante, aunque no fue un problema porque “siempre me encontré personas amables, gente que te acoge con cariño y que quiere a todo el mundo”.

Pero… ¿Qué lleva a un joven de veinte años a renunciar a una beca de estudios y a embarcarse en esta aventura? Como él mismo dice, “recibí un testimonio del Evangelio y decidí que serviría al Señor en una misión”. No se necesita más. Aquellos amigos que no eran miembros no llegaron a entender muy bien esa decisión. “Creían que estaba un poco loco por dejar atrás todo lo que estaba dejando atrás. Mantuvimos el contacto durante estos dos años y creo que, cuando llegué tras la misión, lo entendieron mucho mejor”, señala.

Sus expectativas se cumplieron sobradamente. Cada noche, Samuel se iba a la cama rendido, “era agotador”, pero con la sensación de que “lo que haces en una misión es útil a los demás. Era un gozo para mí”.

A falta de tener a su familia durante ese par de años, el joven misionero encontró una nueva familia, la de los miembros de los barrios en los que servía. Él mismo recuerda encantado que “aquellas personas me trataban como a un hijo ¡La Iglesia es una gran familia!”. Para Samuel, lo mejor que se trajo de Australia no venía en su maleta. Fueron sentimientos vividos cada día. “Ahora soy más paciente y más humilde ¡La misión te enseña a amar a los demás! Puedo ver más a todo el mundo como hijos de Dios con el potencial infinito que tienen”.