2023
Ministrar con diligencia
Octubre de 2023


“Ministrar con diligencia”, Liahona, octubre de 2023.

Principios de ministración

Ministrar con diligencia

Podemos marcar una profunda diferencia al ministrar con diligencia.

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Unos jóvenes rastrillando hojas

Tíquico no es el nombre más conocido del Nuevo Testamento, pero fue un ejemplo en cuanto a ministrar y servir con diligencia. Aunque en ocasiones su servicio se hallaba en un segundo plano, su fidelidad hizo posible que Pablo efectuara su importante obra. Tíquico entregó cartas a los santos de Éfeso y de Colosas, y los consoló y los animó (véanse Efesios 6:21–22; Colosenses 4:7–8). Viajó a diferentes regiones, como Creta y Éfeso, para ayudar con la obra, liberando a líderes como Tito y Timoteo para ayudar a Pablo (véase 2 Timoteo 4:12). Pablo llamó a Tíquico “hermano amado y fiel ministro en el Señor” (Efesios 6:21).

La diligencia incluye la perseverancia, especialmente, ante la oposición. Nuestra diligencia ayuda al Señor a saber que Él puede contar con nosotros porque no nos daremos por vencidos, aun cuando las cosas se vuelvan difíciles. Parece que debido a la diligencia de Tíquico, Pablo le confió algunas asignaciones importantes. Del mismo modo, el Señor nos ha dado algunas asignaciones importantes. ¿Persistiremos en nuestros esfuerzos por bendecir a aquellos a quienes Él nos ha pedido que ministremos?

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Personas empujando un auto atascado en la arena

Cultivar un corazón diligente

Podría haber muchas razones por las que afrontemos oposición cuando trabajemos para ministrar a los demás, pero el Señor confía en que persistamos en hacer nuestro mejor esfuerzo, aun cuando no sea fácil.

A continuación, se presentan algunas ideas sobre cómo podemos desarrollar el atributo cristiano de la diligencia:

  1. “Cuando siento que me aparto de mis deberes del sacerdocio por otros intereses y cuando mi cuerpo suplica un descanso, me digo a mí mismo estas palabras de ánimo: ‘Acuérdate de Él’. El Señor es nuestro ejemplo perfecto de diligencia”1.

  2. Recuerde que el Señor llamó a líderes para que ayudaran a llevar a cabo Su obra. Ministrar con diligencia no significa que tenga que seguir adelante solo. Busque el apoyo del Señor y de sus líderes locales.

  3. Ore para recibir inspiración sobre cómo puede desarrollar más diligencia. El Padre Celestial entiende que los desafíos de la vida significan que servir no siempre será fácil, y está presto a ayudarnos e inspirarnos.

  4. Recuerde que al Señor le encanta el esfuerzo y que aprender a ser más diligentes no es algo instantáneo. Con práctica y paciencia, aumentará su diligencia.

Ministrar con diligencia

  1. Ser diligente no significa persistir de una manera que incomode a las personas. Respete los deseos de aquellos a quienes ministre. Tenga en cuenta que aunque a pocas personas les gusta que se les obligue a interactuar con otras, casi todas desean tener más amigos verdaderos en su vida.

  2. La diligencia incluye tener iniciativa en la ministración, en lugar de que sea necesario que se nos diga qué hacer todo el tiempo.

  3. La diligencia incluye acciones pequeñas y sinceras. Ser diligente en ministrar no tiene que ser un gesto grandioso.

  4. Una de las mejores maneras de ministrar diligentemente es llegar a conocer a las personas a las que ministra y meditar sobre cómo puede atender sus necesidades. Pregúntese: ¿Qué ayuda me gustaría recibir si estuviera en el lugar de esa persona? El pasar por este proceso le ayudará a identificarse con aquellos a quienes ministra y a hacer que su servicio sea más considerado y personal.