2022
Ministrar por medio de una invitación, un dibujo hecho con el corazón y las palabras de un apóstol
Julio de 2022


Voces de los Santos de los Últimos Días

Ministrar por medio de una invitación, un dibujo hecho con el corazón y las palabras de un apóstol

Ministrar es cuidar de otras personas a la manera de Cristo y ayudar a satisfacer sus necesidades espirituales y temporales.

Jared González asiste a la estaca Panamá Ciudad, es un JAS al que le gusta dibujar, hacer diseño gráfico y crear con sus manos. Este año, antes de la conferencia general, recibió una invitación para prepararse para participar en ella.

Una pequeña invitación

Era la semana previa a la conferencia general. El hermano Leonardo, asesor del barrio para los JAS, se tomó tiempo para llamarlo por teléfono. En esa llamada le preguntó cómo se encontraba, qué planes tenía para ver la conferencia y le animó a no perderse ninguna sesión. Antes de terminar la llamada el hermano Leonardo agregó una sencilla invitación: “¿Por qué no te preparas escuchando himnos?”.

Esa pregunta requería acción de parte de Jared; él siempre participaba de la mayoría de las sesiones de la conferencia, pero no había reflexionado en la importancia de la parte previa. Jared decidió seguir esa invitación, por lo que hizo planes para estar libre el fin de semana, y el viernes antes de la conferencia empezó a escuchar himnos y ver videos sobre Jesucristo desde la tarde.

Mientras veía un video de Jesucristo le vino el sentimiento de realizar un dibujo. Jared desde pequeño ha tenido la habilidad de pintar y dibujar. En ese momento pensó cómo Jesucristo había ministrado a las personas sanándolas y cómo él podía ser partícipe del don de Dios; entonces tomó papel y lapiceros para dibujar el rostro de nuestro Señor.

Era la primera vez que Jared se atrevía a dibujar a Jesucristo; mientras lo hacía pensaba en las cosas que gracias a Él podía gozar. Para Jared fue una experiencia sublime y sentía que estaba mejor preparado para el fin de semana.

Ministrar es más que visitar a alguien por cumplir una asignación. El presidente Russell M. Nelson ha dicho que es “un enfoque más nuevo y santo”1; requiere pensar en otros, sentir con ellos e invitarlos a actuar. El hermano Leonardo había pensado en un miembro de su barrio sin saber todo el efecto que vendría después.

Las palabras de Cristo nos dan esperanza

Jared participó de todas las sesiones; en una de ellas sintió que los cielos habían preparado un mensaje para él cuando en su discurso el presidente M. Russell Ballard dijo lo siguiente: “Sé lo que es sentirse rodeado de familiares, amigos y conocidos e incluso así sentirme solo, debido a que el amor de mi vida ya no está aquí a mi lado…

“Llamemos a nuestros miembros solteros a servir, elevar y enseñar. Ignoremos las viejas nociones e ideas que a veces han contribuido involuntariamente a que se sientan solos y que no pertenecen o que no pueden servir”2.

Jared había sido ministrado antes de la conferencia y durante ella. No fue una visita de un hermano por cumplir una tarea en una lista, fue la invitación sencilla de un amigo y las palabras de un apóstol de Jesucristo que habían llenado su corazón.

Ministrar es compartir, incluir y aliviar

Jared tiene una experiencia sobre ministrar al incluir a otros; esta experiencia fue al inicio de la pandemia en el 2020. Mientras los negocios cerraban y el trabajo era escaso, Jared fue contactado por una empresa multinacional para elaborar mascarillas bordadas con los colores y logotipos de la empresa. Entre los talentos que tiene Jared está la parte artística; él puede bordar y sabe enseñar a otros. El pedido consistía en elaborar 3300 mascarillas y entregarlas en dos semanas. Jared pensó en algunas familias de su barrio que podían beneficiarse, así que los contactó y juntos tomaron parte de este proyecto. En los tiempos difíciles pudieron recibir alivio económico con trabajo honrado. En los días antes de la entrega, Jared pudo ver cómo Dios ayudaba a completar el trabajo. En los tiempos difíciles, Jared tuvo una oportunidad y decidió compartirla, al pensar en las necesidades de sus hermanos e incluirlos, también les ministró.

Ahora Jared piensa en los miembros de su cuórum de élderes y cómo ministrarles de diferentes formas, ya sea a través de una clase, compartiendo sus talentos o con sencillas invitaciones por teléfono. Para Jared es importante la manera, pero es más importante la acción. A veces pensamos tanto en los programas que olvidamos centrarnos en lo más importante: las personas.

Ministrar tuvo que ver con una llamada, un dibujo y palabras de un apóstol. En todos los casos pareciera que el cielo mismo le ministraba.

Referencias

  1. Russell M. Nelson, “Ministrar”, Liahona, mayo de 2018, pág. 100.

  2. M. Russell Ballard, “Esperanza en Cristo”, Liahona, mayo de 2021, págs. 53, 56.