2022
Las misiones de servicio
Agosto de 2022


Voces de los Santos

Las misiones de servicio

Las misiones de servicio complementan a las misiones de proselitismo, al permitir que otras personas experimenten el amor de Dios al recibir servicio cristiano. Ahora más que nunca, los hombres y las mujeres jóvenes que tengan el deseo de servir tendrán la oportunidad de hacer avanzar la obra del Señor como misioneros. Esto será una gran bendición para los misioneros, para sus familias y para aquellos a quienes sirvan.

Cada misión de servicio está diseñada exclusivamente para que coincida con los dones espirituales únicos de cada joven. Produciéndose la inclusión de candidatos a misioneros a jóvenes que por su situación de salud o tratamientos médicos no pueden dejar el lugar donde residen, por lo que sirven prestando servicio localmente.

Entrevista al matrimonio Ávila, coordinadores del programa de misioneros jóvenes de servicio

¿Quiénes pueden cumplir con una misión de servicio?

Todo joven con deseos de servir a Dios, más allá de sus problemas de salud, podrá enviar su recomendación misional y esperar el llamado del Señor. Toda misión tiene el objetivo de “ayudar a los demás a venir a Cristo”. Y tanto los misioneros de enseñanza como los de servicio son necesarios.

De esta manera, observamos un mayor cumplimiento de las palabras del Señor en la sección 4 de Doctrina y Convenios, donde Él dice: “De modo que, si tenéis deseos de servir a Dios, sois llamados a la obra”.

¿Qué consejos les darían a los jóvenes que tienen dudas en cuanto a cumplir una misión de servicio cuando los desafíos físicos o emocionales podrían ser un impedimento?

A través de sus profetas, el Señor ha ampliado el servicio misional agregando al enfoque de enseñanza el nuevo enfoque de servicio. De manera que, al enviar la recomendación misional, el Señor, a través de Su profeta, llamará al candidato a una misión de enseñanza o a una misión de servicio.

Jóvenes, qué bendición tienen de representar al Señor como misioneros. Prepárense para servir donde el Señor los llame. Confíen en Él y en Su sabiduría acerca del servicio que ustedes serán llamados a realizar. Y recibirán el gozo que solamente se obtiene por ese sagrado servicio.

¿De qué manera las misiones de servicio complementan las de proselitismo?

En las Escrituras aprendemos de grandes misioneros, como Ammón, Aarón, Pablo, el capitán Moroni, José hijo de Israel, entre otros. Muchos de ellos fueron llamados a misiones de enseñanza y muchos otros a misiones de servicio. Entre estos últimos se encuentra el capitán Moroni. Él no fue llamado a enseñar por medio de la palabra. Su misión fue la de defender a su pueblo de los ataques de sus enemigos. Así que, su enseñanza fue a través de su ejemplo, de su forma de vivir.

De hecho, Mormón dijo que “si todos los hombres pudieran ser como Moroni, he aquí, los poderes mismos del infierno se habrían sacudido para siempre” (Alma 48: 17); y agregó que era un hombre semejante a Ammón. Así que podemos ver cuán importante es servir una misión, y que tanto una misión de enseñanza como una misión de servicio producen el mismo resultado.

Es hermoso leer en el Libro de Mormón (Alma 20) la conversión del padre del rey Lamoni. Aarón le enseñó el Evangelio y lo guio a buscar al Señor con sus palabras. Fue su misionero de enseñanza. Sin embargo, el padre del rey Lamoni nunca habría escuchado al misionero de enseñanza, si antes no hubiera sido impactado por su misionero de servicio, que fue Ammón. Recordarán que, muy enojado con Lamoni, el padre intentó matarlo, por lo que Ammón se interpuso y defendió a Lamoni. Cuando Ammón venció al padre de Lamoni, este le ofreció a cambio de su perdón hasta la mitad de su reino. Pero Ammón solamente le pidió que libertara a sus hermanos y perdonara a Lamoni y ya no estuviera enojado con él. Cuando el padre de Lamoni vio “el gran amor que tenía por su hijo Lamoni, se asombró en sumo grado” (versículo 26). De manera que, al llegar el misionero de enseñanza Aarón, el padre de Lamoni le dijo: “insistiré en que me ministréis, porque mi mente ha estado algo perturbada por razón de la generosidad y grandeza de las palabras de vuestro hermano Ammón” (Alma 22:3).

También José de Egipto, el hijo de Jacob, sirvió una misión de servicio. A través de su servicio el Señor preservó la vida de su pueblo y de muchos otros. Siempre se destacó por realizar el mejor servicio. Fue el mejor hijo. Fue el mejor esclavo. Fue el mejor preso. Y fue el mejor gobernador.

Testimonio del élder Aguirre

¡La verdad es que esta misión es genial! Tuve la oportunidad de ser llamado a esta misión en octubre del año 2021, y sinceramente estos meses sirviendo han sido sin duda los mejores de mi vida. He podido ver el amor que Dios tiene por cada uno de nosotros. Aún no comprendo por qué fui llamado a esta misión, ni tampoco entiendo la confianza que Dios tiene hacia mí, ya que yo mismo no tengo esa misma confianza, pero verdaderamente sé que Dios me ha preparado para ser un representante de Su Hijo en estos tiempos, y también a cada uno de los misioneros que serán llamados para esta misión. Me hace ver las muchas maneras en las cuales podemos invitar a todos a venir a Cristo. Sé que esta misión fue una revelación por medio de los profetas.

Me di cuenta de que a medida que servimos a los demás indirectamente estamos inspirando a todos a venir a Cristo, porque ven nuestro ejemplo, nuestro servicio, nuestra luz. Ello me recuerda las palabras del himno 208 “Brillan Rayos de clemencia”, en el que se nos enseña que si “ajustamos nuestras linternas, los perdidos las verán”. A medida que servimos estamos mostrando nuestros destellos de luz al mundo y de algún modo al “errante marinero ayudamos a salvar”.

Somos misioneros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y tengo la firme certeza del amor y confianza que Dios tiene por cada uno de nosotros. ¡Amo este Evangelio y esta verdad! En el nombre de aquel a quien representamos, sí, nuestro Salvador Jesucristo. Amén.