Seminario
Lección de estudio individual supervisado: Zacarías 3–14; Malaquías 1–4 (Unidad 32)


Lección de estudio individual supervisado

Zacarías 3–14; Malaquías 1–4 (Unidad 32)

Material de preparación para el maestro del curso de estudio individual supervisado

Resumen de lecciones diarias de estudio individual supervisado

El siguiente resumen de las doctrinas y los principios que los alumnos aprendieron al estudiar Zacarías 3Malaquías 4 (Unidad 32) no se ha creado con la intención de que se enseñe como parte de la lección. La lección que usted va a enseñar se centra en sólo algunas de esas doctrinas y principios. Siga las impresiones del Espíritu Santo conforme considera las necesidades de sus alumnos.

Día 1 (Zacarías 3–8)

En ese bloque de las Escrituras, se encomienda a Zorobabel la reconstrucción del templo. Los alumnos aprendieron que conforme andamos por los caminos del Señor y guardamos nuestros convenios, seremos dignos de entrar en la presencia de Dios. También aprendieron que al adorar al Señor debemos centrarnos en Él en vez de en nosotros mismos. Además, estudiaron sobre la necesidad de ablandar siempre el corazón a la palabra del Señor a fin de recibir respuesta a nuestras oraciones.

Día 2 (Zacarías 9–14)

Al terminar de estudiar Zacarías, los alumnos aprendieron que la expiación de Jesucristo permite que quienes han muerto sin haberse bautizado sean liberados de la cárcel de los espíritus. Asimismo, aprendieron que los judíos reconocerán a Jesucristo como el Mesías en el momento de la Segunda Venida y que Él será rey sobre toda la tierra.

Día 3 (Malaquías 1–2)

Por medio de Malaquías, el Señor enseñó a los israelitas y a los sacerdotes, algunos de los cuales estaban cayendo en la apostasía. Los alumnos aprendieron que honramos al Señor cuando le damos lo mejor de nosotros y que, si no seguimos los caminos del Señor, podemos hacer que los demás tropiecen por nuestro mal ejemplo.

Día 4 (Malaquías 3–4)

Al estudiar esos capítulos, los alumnos aprendieron que el Señor envió a José Smith a preparar el mundo para la Segunda Venida. También aprendieron que si nos volvemos a Dios y pagamos nuestros diezmos y ofrendas, el Señor nos bendecirá. Además, conocieron cuál es el porvenir de los inicuos y los rectos en la segunda venida de Jesucristo, y aprendieron que el profeta Elías regresaría a la tierra antes del día grande y terrible de Jehová.

Introducción

La lección se centra principalmente en Malaquías 4, donde se halla la profecía de Malaquías de que el Señor enviaría al profeta Elías antes de la Segunda Venida a efectuar una gran obra.

Sugerencias para la enseñanza

Nota: Conforme los alumnos estudiaron el pasaje de Dominio de las Escrituras de Malaquías 3:8–10, se les invitó a escribir un párrafo en el diario de estudio de las Escrituras sobre cómo explicarían la ley del diezmo a alguien que jamás haya oído de ella valiéndose de dicho pasaje, de analogías y de experiencias personales. Si lo desea, invite a los alumnos a compartir algunas de sus ideas y luego a recitar el pasaje de Dominio de las Escrituras juntos, como clase.

Malaquías 4:1–4

Malaquías profetiza el porvenir de los inicuos y los rectos en la Segunda Venida

Dibuje o muestre una lámina de un árbol en la pizarra. Destaque y rotule las tres partes esenciales de los árboles: las ramas, el tronco y las raíces.

Imagen
tree
  • ¿Qué le pasaría al árbol si le quitáramos alguna de sus partes vitales? (Moriría o dejaría de producir fruto o flores).

Encima del dibujo o la lámina del árbol, escriba la palabra Familia. Invite a los alumnos a considerar el árbol como un árbol genealógico.

  • Si el tronco fueran ustedes, ¿qué representarían las ramas y las raíces? (Las raíces del árbol simbolizan sus antepasados y las ramas representan su futura posteridad).

Cuando los alumnos lean detenidamente Malaquías 4, invítelos a buscar la forma en que sus actos pueden influir en su árbol genealógico en la eternidad.

Invite a un alumno a leer en voz alta Malaquías 4:1, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para determinar lo que le sucederá a los soberbios y a los que hacen maldad en la segunda venida de Jesucristo.

  • Basándose en el análisis que hicieron sobre el árbol familiar, ¿qué creen que signifique la frase “Y no les dejará ni raíz ni rama” en referencia a los inicuos?

Ayude a los alumnos a entender que los inicuos que serán destruidos en la Segunda Venida quedarán sin vínculos eternos con sus antepasados y sus descendientes. En otras palabras, son indignos de vivir con sus familiares por la eternidad en el reino celestial.

Borre o cubra las raíces y las ramas del dibujo o lámina de la pizarra para mostrar cómo el árbol queda incompleto y limitado sin esas partes vitales.

Malaquías 4:5–6

Malaquías profetiza que Elías el Profeta efectuará una gran obra antes de la segunda venida de Jesucristo

Para ayudar a los de la clase a considerar en sus propias vidas la tragedia de no tener raíz ni ramas en sus árboles genealógicos, pídales que piensen en sus padres, abuelos y antepasados, así como en sus futuros cónyuges e hijos. Invítelos a imaginar cómo sería estar separados de sus familiares en la eternidad.

Invite a un alumno a leer en voz alta Malaquías 4:5–6, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para saber cómo dijo el Salvador que ayudaría a las familias del mundo antes de Su segunda venida. (En el estudio semanal, se invitó a los alumnos a memorizar ese pasaje de Dominio de las Escrituras. Para repasar los versículos, si lo desea, pida a los de la clase que reciten el pasaje juntos varias veces).

  • ¿Qué dijo Malaquías que haría Elías el Profeta?

Recuerde a los alumnos que el profeta Elías, ya resucitado, se apareció a José Smith y a Oliver Cowdery el 3 de abril de 1836 en el Templo de Kirtland y les confirió las llaves del poder para sellar del Sacerdocio de Melquisedec (véase D. y C. 110:13–16). Dichas llaves han abierto las puertas a la obra de historia familiar y de la obra del templo, tanto para las personas vivas como por los muertos.

Entregue a los alumnos una fotocopia de la siguiente declaración del presidente Henry B. Eyring, de la Primera Presidencia. Invite a un alumno a leerla en voz alta, y pida a la clase que siga la lectura en silencio para determinar lo que el presidente Eyring dijo que podemos hacer para volver el corazón a nuestros antepasados.

“Muchos de los antepasados de ustedes murieron sin haber tenido nunca la oportunidad de aceptar el Evangelio ni de recibir las bendiciones y las promesas que ustedes han recibido. El Señor es justo y es amoroso, y, por consiguiente, Él ha preparado tanto para ustedes como para mí la manera de que se cumpla el deseo de nuestro corazón de brindar a nuestros antepasados todas las bendiciones que Él nos ha brindado a nosotros…

“Hay más templos por toda la tierra de los que ha habido nunca. En el mundo, muchas personas han sentido el espíritu de Elías el profeta que las ha motivado a registrar el nombre y los hechos de sus antepasados. Hoy en día hay más fuentes de consulta para buscar a sus antepasados de las que ha habido en la historia del mundo. El Señor ha derramado conocimiento con respecto a la forma de poner esa información a la disposición de las personas en todo el mundo por medio de la tecnología que hace unos pocos años hubiera parecido un milagro…

“Cuando ustedes fueron bautizados, sus antepasados los contemplaron desde allá con esperanza. Quizás, al cabo de siglos, se regocijaron al ver a uno de sus descendientes hacer el convenio de buscarlos y de brindarles la libertad. Cuando se reúnan con ellos, verán en sus ojos ya sea gratitud o una terrible desilusión. El corazón de ellos está ligado a ustedes y su esperanza está en las manos de ustedes. Ustedes tendrán más que su fortaleza natural si deciden seguir trabajando para buscarlos” (“Teniendo entrelazados sus corazones”, Liahona, mayo de 2005, págs. 77, 79).

  • ¿Cuál es su función en cuanto a ligar a las familias en unión en los últimos días?

Escriba el siguiente principio incompleto en la pizarra: Al realizar la obra de historia familiar y la del templo…

  • ¿Qué sucederá a medida que cumplamos con nuestro deber de efectuar la obra de historia familiar y del templo a favor de nuestros antepasados? (Tras las respuestas de los alumnos, añada lo siguiente al principio que está incompleto en la pizarra: nuestro corazón se volverá a nuestros antepasados…).

Pida a los alumnos que relean Malaquías 4:6 e indique que, salvo que el corazón de los miembros de las familias se vuelvan los unos a los otros, la tierra será maldecida. Explique que la tierra fue creada para contribuir a “llevar a cabo la inmortalidad y la vida eterna del hombre” (Moisés 1:39). Eso se logra cuando efectuamos las ordenanzas salvadoras en la tierra que ligan a las personas en unión con el Salvador y a las familias en unión, juntas. Si no se hiciera la obra de historia familiar ni la del templo, la tierra sería “totalmente asolada” (D. y C. 2:3). A fin de completar el enunciado de la pizarra, agregue lo siguiente: y ayudaremos a preparar la tierra para la segunda venida de Jesucristo. Invite a un alumno a leer el principio, ya completo, en voz alta: Al realizar la obra de historia familiar y la del templo, nuestro corazón se volverá a nuestros antepasados y ayudaremos a preparar la tierra para la segunda venida de Jesucristo.

  • ¿De qué manera se vuelve nuestro corazón al de nuestros antepasados al hacer la obra de historia familiar y la del templo?

  • ¿Qué creen que sientan nuestros antepasados por nosotros por hacer esa obra a su favor?

  • ¿Qué experiencias ha tenido al efectuar la obra de historia familiar y del templo por sus antepasados?

Si las circunstancias lo permiten, si lo desea, invite a algún alumno que esté familiarizado con el sitio web FamilySearch.org a iniciar sesión en éste y mostrar el programa a la clase. Además, puede concederle algunos minutos para que demuestre cómo se utiliza el sitio web y cómo se buscan nombres de antepasados, así como para explicar su experiencia en esa obra.

Pida a los alumnos que escriban en una hoja de papel una meta que los ayude a participar más en la obra de historia familiar y del templo. Ínstelos a llevar la hoja a casa y a colocarla donde les recuerde la meta.

Ya que ésta es la última lección del curso de estudio del Antiguo Testamento, si lo desea, tome algo de tiempo al final de la clase e invite a los alumnos a compartir las experiencias que hayan tenido al estudiar ese libro en seminario durante este año. Además, aliente a los alumnos a continuar estudiando las Escrituras diariamente en casa. Si van a asistir al próximo curso de seminario, puede sugerirles que comiencen a estudiar el Nuevo Testamento.